Hablar de Educación Sexual Integral (ESI), sigue siendo necesario aunque la ley fue sancionada hace 18 años atrás. En medio de un vaciamiento de políticas públicas de protección en la salud reproductiva, la vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, encabezó este jueves un seminario en el Senado bajo el título «Género e identidad: el problema de la sexualización infantil«.
Con el objetivo de instalar sus ideas antiderechos fue que durante el evento, disparó críticas hacia la implementación de la ESI en las escuelas, cuestionando los efectos de esta herramienta educativa y subrayando lo que consideraron «consecuencias psicológicas» de su aplicación. Este evento se produce en medio de una fuerte polarización social y política impuesta por los discursos de odio y discrimminación que legitima este gobierno.
ESI en cifras: otra vez los datos invalidan los argumentos del Gobierno
El debate sobre la ESI no es nada nuevo ya que su implementación comenzó en 2006, cuando se promulgó la Ley de Educación Sexual Integral. Dicha ley establece la enseñanza de contenidos relacionados con el cuidado del cuerpo, la prevención de abusos, el respeto a la diversidad y el acceso a información sexual basada en derechos.
En este sentido, las cifras revelan un impacto positivo en la detección temprana de abusos: en el año 2020, el 80% de los niños y adolescentes que denunciaron abuso sexual en la Ciudad de Buenos Aires lo hicieron después de haber tenido clases de ESI.
A nivel nacional, estudios como el de Casa FUSA de 2021 muestran que la ESI ayudó a jóvenes de entre 16 y 24 años a identificar y responder ante casos de violencia de género. Además, el impacto en la reducción de embarazos adolescentes es destacable, con una disminución de la tasa de fecundidad adolescente en un 57% entre 2005 y 2021, según datos del Ministerio de Salud.
Libros de la provincia de Buenos Aires, en el foco del debate
Dicho seminario también incluyó la cuestión de materiales literarios en el marco del programa Plan de Lecturas Bonaerenses. La vice no desaprovechó la oportunidad para pegarle al gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof minutos antes del evento a través de sus redes sociales.
“Los bonaerenses no merecen la degradación e inmoralidad que Axel Kicillof les ofrece. Existen límites que nunca deben pasarse. ¡Dejen de sexualizar a nuestros chicos, saquen de las aulas a los que promueven estas agendas nefastas y respeten la inocencia de los niños! ¡¡Con los chicos NO!!”, escribió Villarruel en X.
Cómo el propio presidente dijo que están muy pendientes de lo que pasa en redes sociales, se aprovecharon del debate de las últimas semanas sobre algunos textos. Entre ellos Cometierra de Dolores Reyes y Las primas de Aurora Venturini han generado polémica porque se argumenta que estas obras exponen a los jóvenes a escenas “de sexo explícito” y narraciones sobre abuso y violencia.
Si bien el seminario en el Senado generó una plataforma para las críticas a la ESI, el papel de esta ley en el sistema educativo está respaldado por estudios y organismos de derechos humanos.
Organizaciones como Unicef y Casa FUSA defienden la ESI como una herramienta clave para el desarrollo de habilidades sociales y la prevención de abusos. Para muchas familias, la ESI representa una oportunidad para que sus hijos crezcan con acceso a información confiable y con el respeto de su derecho a la salud y al bienestar.