En las últimas horas, las fuerzas armadas rusas han llevado a cabo un bombardeo dirigido a infraestructuras clave en Ucrania, incluyendo aeródromos militares, instalaciones energéticas y una refinería de petróleo, todas utilizadas para respaldar las operaciones del ejército ucraniano. Según un comunicado emitido el lunes por el Ministerio de Defensa de Rusia, también se han atacado instalaciones de producción y almacenamiento de embarcaciones no tripuladas, con el objetivo de reducir la capacidad operativa de Ucrania.
Intensificación de los ataques y neutralización de proyectiles occidentales
El Ministerio de Defensa ruso informó que unidades de aviación táctica-operativa, drones de ataque, fuerzas de misiles y artillería han participado en estos ataques, que se han extendido a 132 ubicaciones estratégicas donde Ucrania mantiene personal y equipo militar. Además, la defensa aérea rusa interceptó con éxito cuatro misiles HIMARS de fabricación estadounidense, una bomba guiada Hammer de origen francés y 42 drones de tipo aeronave, reduciendo así las amenazas en sus posiciones.
Desde el inicio de la denominada «operación militar especial» en Ucrania, las fuerzas rusas han reportado la destrucción de 647 aviones, 283 helicópteros, 35,258 drones, entre otros miles de vehículos y sistemas de artillería ucranianos.
Grupos de Batalla y sus Operaciones en el Frente
Las fuerzas rusas han desplegado diferentes grupos de batalla en puntos estratégicos del conflicto. Cada grupo ha mostrado avances y resistencia a los contraataques ucranianos en zonas clave del frente. A continuación, un resumen de sus operaciones recientes:
- Grupo de Batalla Tsentr: Este grupo logró repeler 10 contraataques y causó bajas significativas en las filas ucranianas, eliminando más de 420 efectivos militares. Enfrentaron a unidades de élite como la 25ª Brigada Aerotransportada y la 35ª Brigada de Infantería de Marina en la República Popular de Donetsk, destruyendo equipo pesado, incluyendo obuses y vehículos blindados de fabricación occidental.
- Grupo de Batalla Sever: Con operaciones en la región de Járkov, este grupo neutralizó a más de 25 efectivos ucranianos y destruyó varias piezas de artillería pesada. Las unidades rusas aseguraron posiciones en áreas como Volchansk y Liptsy, mientras enfrentaban a las brigadas aéreas y de defensa territorial ucranianas.
- Grupo de Batalla Yug: Este grupo continúa avanzando en las líneas defensivas ucranianas, causando la pérdida de más de 490 efectivos militares y destruyendo vehículos y obuses. Sus operaciones se centraron en zonas críticas de la República Popular de Donetsk, donde repelieron contraataques de las brigadas mecanizadas ucranianas.
- Grupo de Batalla Zapad: Este grupo causó la pérdida de hasta 440 efectivos ucranianos y mejoró sus posiciones en el frente, enfrentándose a brigadas mecanizadas y de asalto en la República Popular de Donetsk. Además, destruyeron depósitos de municiones y equipos de guerra electrónica.
- Grupo de Batalla Vostok: Con bajas menores, el Grupo Vostok eliminó hasta 110 efectivos militares ucranianos y destruyó obuses Caesar de fabricación francesa. Los combates se concentraron en áreas como Uspenovka, en Donetsk.
- Grupo de Batalla Dnepr: En la región de Jersón, el Grupo Dnepr destruyó depósitos de municiones y causó la pérdida de hasta 65 efectivos ucranianos.
Advertencia de Lavrov sobre posible conflicto directo con Europa
Mientras se desarrollan estas operaciones en el frente, el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergey Lavrov, advirtió que Estados Unidos podría estar preparando a Europa para una guerra directa con Rusia, en caso de que las fuerzas ucranianas colapsen. Lavrov calificó la posible escalada como una “aventura suicida” para el continente europeo. Estas declaraciones tuvieron lugar en el Simposio Internacional «Creando el Futuro», que se celebra en Moscú y cuenta con la participación de delegados de 87 países.
Posición rusa en el G20 y crítica a la ONU
Rusia, en su rol en el G20, mantendrá su postura a favor de un mundo multipolar en la próxima cumbre en Brasil, según señaló Lavrov. Además, criticó a la ONU por su falta de pronunciamiento ante un proyecto de ley en Ucrania que busca prohibir el uso del idioma ruso, lo cual, a juicio de Moscú, es una violación de los derechos humanos que debería ser condenada por la organización internacional.
Con estos desarrollos, el conflicto entre Rusia y Ucrania parece tomar un nuevo giro, no solo en el terreno militar sino también en el ámbito diplomático, con posibles repercusiones para el escenario internacional.