El fútbol argentino está repleto de clubes centenarios, pero son pocos los que pueden celebrar su aniversario de la mano de otro momento histórico. Este es el caso de San Martín de Tucumán, quienes se encuentran festejando 115 años desde su fundación y puede coronar la celebración con un nuevo ascenso a la Primera División. El Ciruja no transita la elite argentina desde 2019 y su ascenso representaría el regreso del clásico tucumano.
El 2 de noviembre de 1909 nació el equipo tucumano por iniciativa de 14 vecinos de clase media-baja del sur de San Miguel de Tucumán. El grupo se reunió en una esquina de la Plaza San Martín para el primer puntapié que fue brindarle al uniforme los colores que usaban los granaderos. Y desde sus orígenes, fue partícipe importante de los torneos de la Federación Tucumana de Fútbol, en donde fue el primer campeón en 1919.
San Martín, un grande del norte
Es cierto que el sector más importante y significativo del fútbol local está en Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, pero Tucumán se ubica en un segundo escalafón. El territorio tucumano, perteneciente al noroeste argentino, sobrepasa la valoración deportiva de Mendoza, San Juan y otras provincias de su misma región geográfica.
La rica historia de San Martín y su clásico rival, Atlético Tucumán, que está en Primera desde hace 2015, justifican esta apreciación. A lo largo de los años, el poderío de San Martín creció a nivel provincial con 67 títulos oficiales y 10 copas, cuyas últimas consagraciones fueron en 1967 y 2004 de respectivamente. En tanto, fue el único club tucumano en decir presente en las tres ediciones de la Copa de la República que se jugó en 1943, 1944 y 1945.
Incluso, fue campeón en la 2° edición tras superar 3-1 a Newell’s y en 2013 la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) oficializó esa consagración tras una revisión histórica. Ese título permitió que el Santo tucumano se sume a un selecto grupo conformado por la Lepra, Rosario Central, Colón, Central Córdoba de Rosario y Patronato.
Este sexteto son los únicos del interior en lograr al menos una coronación oficial de máxima categoría de AFA dentro del profesionalismo. Por otro lado, San Martín fue parte de los viejos Torneos Nacionales entre 1968 y 1985 con 16 participaciones en el antiguo formato de Primera. De hecho, fue el primer club de Tucumán en disputar ese campeonato creado en 1967.
Entre sus mejores participaciones, destaca el 8° lugar al haber alcanzado los cuartos de final en las ediciones de 1982 y 1985. Una vez que los torneos sufrieron una transición en sus formatos, el Ciruja no pudo sostenerse una regularidad en la elite argentina. Sin embargo, una particularidad que caracteriza al cuadro tucumano es que en la temporada 1987-1988 ascendió a Primera División desde los regionales del zonal noroeste sin escalas en la 2° división.
Un ascensor de emociones
La temporada 1988-1989 representó un hecho histórico para el club al llegar a la máxima categoría del país con el nuevo sistema. No obstante, solo logró mantenerse una temporada en lo más alto tras descender por promedios. Asimismo, dos campañas más tarde en la B Nacional bastaron para que regrese a Primera; aunque, en esta ocasión también solo perduró un año allí.
Desde 1993 hasta 2001 se mantuvo en esa divisional con una única chance de ascender. En 1995 tuvo una posibilidad de volver a Primera pero perdió la final por el segundo ascenso ante Colón. Tras 8 años de su último descenso, el Santo sufrió otro al caer en el Argentino A, donde solo estaría una campaña al bajar a la 4°.
Pese a las esperanzas de trepar categorías lo más rápido posible, en 2002-2003 vivió el peor descenso de su historia al retornar a la Liga Tucumana. La secuencia posterior lo subió entre 2004 y 2008 hasta la cúspide del fútbol argentino. Su paso por la quinta categoría local, la única en su historia, duró solo un año ya que logró subir a la cuarta en 2004-2005, la 2° y última en esa división.
Al siguiente año volvió a ascender y una temporada después, reapareció en la B Nacional, donde conservó su lugar por dos campañas. Para la 2008-2009, tras 16 años, disputó su tercera presentación en Primera pero con la misma sintonía que las veces anteriores: descender tras una temporada.
En 2011 sufrió otro descenso al Argentino A al perder la promoción contra Desamparados de San Juan, quedándose en esa categoría por 5 temporadas. Para 2016 iniciaría un sendero de éxitos que le permitirían pasar de la 3° a la 2° división tras dos temporadas. En la 2018-2019 volvió a Primera luego de 10 años de su tercera participación.
Sin embargo, su cuarta y última estadía en la cima mantuvo el semblante de las anteriores y al finalizar la temporada descendió. Desde que asomó en la Superliga hace 6 años, San Martín se mantuvo hasta la fecha en la segunda división con el claro objetivo del ascenso.
Con la pandemia de por medio por el Covid-19 en 2020, y bajo el nombre de Primera Nacional desde 2019 con nuevo formato, San Martín quedó lejos de los ascensos directos. No obstante, estuvo siempre en la pelea del Reducido pero nunca alcanzó las semifinales.
Un regalo de primera
Pese a que sus hinchas no dejarán de lado las emociones por un nuevo aniversario del club, el enfoque central está en la latente posibilidad del ascenso. San Martín jugará este domingo por la tarde contra Aldosivi por el primer ascenso de la actual Primera Nacional. De este modo, desde la entidad norteña sueñan con coronar los festejos de cumpleaños con un nuevo arribo a Primera como broche de oro.
A su vez, el mayor objetivo en caso de subir de categoría será que este quinta ocasión en lo más alto dure más que una sola temporada. El recinto elegido para albergar la final será el Gigante de Arroyito de Rosario Central, lugar que se acordó entre las instituciones y la AFA. El Ciruja pretende alcanzar su 21° campaña en la elite nacional, la 5° en la estructura actual, contra las 22° en segunda división y las 10° en tercera.
Su andar en este 2024 reflejó una enorme supremacía en la Zona A al finalizar primero con 81 puntos, 11 más que su escolta. Con 38 fechas disputadas, el Santo se aseguró su lugar en la final por el primer ascenso en la 35 al superar 1-0 a Patronato y sacarle 12 unidades al 2°. Asimismo, su participación regular se cerró con un empate 2-2 en su casa ante Güemes de Santiago del Estero.
El cuadro rojiblanco es el gran candidato pero el fútbol puede sorprender sin aviso. Ante la potable circunstancia de regresar a Primera, se podría revivir el clásico más importante del norte argentino que involucra a Atlético Tucumán.
El historial favorece levemente al Decano dentro del contexto oficial con 284 cotejos disputados, donde ganó 101 contra 95 del Ciruja y 88 empates. El panorama es muy parejo entre ambos y representan uno de los derbys más convocante del interior del país; aunque el cuadro albiceleste siempre estuvo un peldaño más arriba que su rival.