“Lagunas” es el nombre del film que juntó al director Federico Cardone y a la escritora Liliana Bodoc en un viaje al pasado. A su vez, así se llama la zona donde se filmó la película, en un intento por rescatar los recuerdos del pueblo huarpe que habitó el territorio.
La región de Lagunas de Guanacache se encuentra en el norte de Mendoza, en el límite con San Juan. Antes cubierto por agua, ahora la sequía en el lugar es casi permanente. En el pasado, allí vivía parte del pueblo huarpe que navegaba para trasladarse.
En ese desierto, Cardone y Bodoc descubren en las historias de Rubén las vivencias de sus antepasados huarpes. Luego, Liliana las reconstruye en relatos que compuso en su cuaderno mágico y parisino junto a les estudiantes de la escuela local.
Nota al Pie dialogó con Federico Cardone para conocer más sobre el proceso de creación de “Lagunas”. “Rubén fue el guía que nos llevó al desierto, que desenterró lo que había que desenterrar, y que nos brindó con una generosidad impresionante sus propios secretos”, adelantó.
Una crónica de fantasmas
La autodescripción de “Lagunas” es “un documental sobre fantasmas”. Pero no se refiere a los espíritus de los cuentos de terror, sino a los recuerdos del pasado, a lo que ya no está físicamente pero de alguna manera sigue vivo.
“En nuestro documental los fantasmas toman la forma de una laguna vacía, de los huarpes que tuvieran que huir, de un cine que cerró, de la muerte de Liliana Bodoc cuando estábamos haciendo el montaje”, continúa la definición.
Federico Cardone explicó por qué eligió hablar de los “fantasmas” del pueblo huarpe. Se trataba de una historia de la que conocía muy poco y deseaba profundizar más. “Entiendo que si a mí me interesaba, probablemente a otras personas también”, reflexionó .
En ese sentido, afirmó que el impulso vital de querer movilizarse hacia ese lugar es lo más importante que debe tener una película. “Que conmueva a la gente que la hace”, puntualizó.
“Lagunas” destaca la cultura huarpe a través de los ojos de Rubén. “Es una persona excepcional, quien más sabe acerca de los huarpes”, manifestó Cardone. “No solamente por el conocimiento, sino por la sensibilidad, la manera de vivir la naturaleza. Él fue la puerta a ese mundo”.
Pero la película no solo ahonda en la historia de la región mendocina, sino que intercala esas escenas con otras donde el director le cuenta a sus hijes relatos de su propio pasado. En primera persona, Cardone expresa en el film lo que se desencadenó en su interior al momento de grabar la película. Pone en palabras a sus propios fantasmas.
Así, se corre de la posición de director omnisciente. “No está la persona que arma la película, que es la que más sabe y se encuentra en el mejor lugar, sino que está metida en el medio del resto de las historias”, describió Cardone. “Por lo tanto, está envuelta y revuelta por eso que sucede”.
El legado de Liliana
Además de la comunidad de Lagunas y el pueblo huarpe que allí vivía, la protagonista indiscutida de la película es la escritora Liliana Bodoc. En los 85 minutos que dura el film ella dialoga con les niñes de la escuela, les docentes, Rubén y otres habitantes de la zona.
A través de sus ojos curiosos se descubre el desierto y los secretos que esconde. Asimismo, en su interacción con les estudiantes se comprende cómo se crea un relato que rescata costumbres del pasado para contarlas en el presente.
Liliana falleció en 2018, mientras se desarrollaba el montaje de Lagunas. Por eso, su recuerdo es otro de los fantasmas que atraviesa a la película. “En general, cuando alguien fallece, siempre se hablan cosas buenas de esa persona”, reflexionó Cardone. “En el caso de Liliana, a mí me parece que lo excede, porque verdaderamente nos resultó una compañía deslumbrante”.
El cineasta no solo se refirió a su talento y capacidad, sino a su calidad de persona. La manera que tenía de acercarse a la gente, charlar, tomar lo que le decían, dar lo suyo, provocaba embeleso. “Era tan agradable estar con ella y compartir, además tan inteligente lo que decía, tan sensible y humilde lo que aportaba. Ojalá hayamos podido captar eso”; concluyó Cardon.
¡Y lo hicieron! Lagunas se puede ver en distintas salas del país. Su próxima proyección será el viernes 23 y sábado 24 de agosto a las 20, en el Cine Maiten Malargüe, Mendoza. También se transmitirá este viernes 23 en el Cine Arte Cacodelphia, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.