“Entre Sombras”, escrita por el dramaturgo estadounidense, Michael Cristofer, ofrece funciones, todos los miércoles de agosto en el espacio, Galpón de Guevara (Guevara 326, CABA), a las 20.30hs. Las entradas se pueden adquirir en la boletería del teatro o a través de www.alternativateatral.com.ar. La reconocida obra, obtuvo un galardón del premio Pulitzer de Teatro a Mejor Drama y un Premio Tony a Mejor Obra Dramática.
El elenco de “Entre Sombras”, lo conforma: Caro Babich, Juan Manuel Barrera Hernández, Eugenia Correa, José Manuel Espeche, Melania Lenoir, Pablo Mónaco, Isabel Noya, Nicolás Sousa y Mariano Ulanovsky, bajo la dirección de Bruno Pedicone.
La historia, se refiere a la vida de tres personas con situaciones diversas y distintas. Elles, están muriendo. Se encuentran acompañados por su familia y amigues, en un hospicio en medio del bosque. Serán observados, analizados y estudiados por un entrevistador; mientras compartirán sus miedos, amores y su esperanza. “Entre Sombras”, enmarca un contenido conmovedor, sensible y emocionalmente, expone lo vital que es valorar la vida.
Trayectoria de Bruno Pedicone
El director de “Entre Sombras”, es actor, director de teatro y profesor de actuación. Se formó con: Augusto Fernández, Julio Chávez, Beatriz Spelzini. Además de cursar la Licenciatura en Actuación en el Conservatorio Nacional (UNA). Se destacó en diversos trabajos, en teatro, cine y televisión: “Un enemigo del pueblo”, obra que ganó el premio ACE a Mejor Obra Dramática; “Consentimiento”, “El hombre de la Mancha”, “Calígula” y muchas más.
En televisión se destacó en: “Separadas”, “El Tigre Verón”, “Entre Caníbales”, “Campanas en la noche”, “Loco x vos”, “La ley del amor”, “Los ricos no piden permiso”. En cine: “Franklin, la historia de un billete” “La Corazonada”, “Despedida”. Por otro lado, desde hace más de 12 años, conduce, coordina y desarrolla su labor como docente teatral en “Otro Estudio”, espacio se dedica formar y entretener profesionalmente a actores y actrices.
Conociendo el mundo de “Entre Sombras”
Nota al Pie, dialogó con el artista argentino sobre su trabajo de dirección de la puesta en escena.
–¿Por qué decidiste apostar trabajar en “Entre Sombras”?
El año pasado en la semana entre Navidad y Año nuevo, leí más de 30 obras de diversos autores, encontré en internet, el material original en inglés se llama: “The Shadow Box”. Adaptamos al castellano con el nombre de, “Entre Sombras”. Me cautivó profundamente el texto y se lo compartí a mi pareja (Melania Lenoir), quien además actúa en la obra. Me ayudó con la traducción y adaptación. Nos impactó y así fue como decidimos embarcarnos en este maravilloso proyecto.
–Es una obra que adquirió muchos galardones lo cual la hace mucho más atractiva de llevar a escena
Recibió premios tan prestigiosos, porque considero que es una obra muy necesaria. El tratamiento del tema, es un poco anacrónico, porque de alguna manera aborda algo que es fundamental, por lo menos a mi visión, tiene que ver con la muerte, el fin de la vida. No solamente de la persona que se encuentra en esa situación; sino también de los familiares y de la gente que los acompaña. Se basa en hablar de lo significativo que es sentirse queridos y amados. Además, es fundamental no guardarse nada. De hecho si uno se pone a pensar de “The Shadow Box”, es una terminología que se usa mucho en psicología sobre cómo hablamos de cosas que nos distrae y cuáles mecanismos tomamos para no hablar de lo importante. El mensaje radica en no esperar hasta que se te termine el tiempo, para acordarte de vivir. Si no lo importante es vivir ahora, en el tiempo que se te da y de la mejor manera que puedas hacerlo.
En cuanto a mi impronta al dirigirla, tiene que ver un poco con el título que puse. Integrar el mundo de sombras y el mundo de luz del ser humano. En ese sentido, hay algo del terreno del psicólogo Carl Jung, que me atrae y siempre interesó mucho a la hora de perseguirnos como seres humanos.
-En cuanto a adaptarla, es un reto y un trabajo minucioso. ¿Cómo lo viviste?
La adaptación también se basó un poco en eso. La obra original, es bastante más larga. Traté con Melania, de poner esencia a la acción dramática. Por momentos tiene textos hermosos, pero para mí y ahí sí se nota quizás un poco lo antigua que es. Hay algo del regodeo de ciertas palabras, que quizás en el teatro de hoy en día puede, puede ir en detrimento de la acción, por lo tanto también la gente necesita consumir algo de una manera muy específica.
Muy enriquecedor es trabajar con tu pareja, quien además actúa en la obra.
Trabajar con Melania, siempre es un desafío. Porque somos pareja hace siete años y compartimos una misma pasión por el teatro, la actuación. A la vez desafiante; quizás por momentos podemos tener encontronazos, pero siempre tienen que ver con la búsqueda de lo mejor para el material. Hay admiración mutua. Es un placer contar con ella. No solo en el elenco; sino en la adaptación y en la traducción del material.
–Al hablar de la muerte, conlleva a pensar en el dolor emocional. Es un tema que moviliza y muchas veces el público tiene miedo de profundizar.
La vida también es sufrimiento y es dolor. El asunto es lo que cada uno de nosotros puede hacer con ese dolor y encausarlo. Hay personas similares en la vida, y eso también tiene de bueno la obra. No habla de personajes que no existan en la vida real. Me parece que cada uno de ellos, tiene su propio mecanismo de supervivencia, vamos a llamarlos así, entre comillas, todos nos podemos identificar si es hablar del alcohol, drogas, si es la negación, si es la esperanza o la falsa esperanza. Todos coinciden que es una obra fuerte, pero lo que también nos deja muy tranquilos y contentos es que el público que la ve, sale justamente reflexionando sobre esto que hablábamos al principio. No es una obra que a uno le sea indiferente.
–“Entre sombras” tiene mucho drama, pero también una cuota de humor.
Claro que sí, porque además eso también tiene que ver, con lo bien escrita que está la obra. En los momentos más trágicos, más duros de la vida humana, también podemos encontrar situaciones donde se estalla de la risa. En ese sentido la gente por lo menos a mí, demostró, la noción de que el público, quiere consumir teatro y una cultura diversificada en términos de no solo la comedia, sino que el drama también puede coexistir y tener una excelente temporada como la que estamos teniendo en el Galpón de Guevara. Con la gran convocatoria del público que ha venido y con las maravillas que dicen de la obra, y los comentarios que escriben en las Redes Sociales. Es fundamental también en nosotros, como hacedores de cultura, poder traer y plantear materiales que sean distintos a los que más o menos casi siempre se ven en el teatro comercial. En ese sentido, somos muy felices.