“Salvaje Sur”, la Revista Pulp de ficción patagónica creada por el escritor y editor rosarino Matías Castro Sahilices, ya cuenta con 8 números. Se trata de una publicación periódica que reúne a escritores de todo la Argentina para homenajear y recrear las revistas del género.
La revista es editada en San Martín de los Andes, Neuquén, lugar donde Castro Sahilices reside desde 2010. Con su diseño, maquetación y propuesta estética bien definidos y cuidados, cada número tiene entre 40 a 60 páginas (formato 21 cm por 14,8 cm), con un papel de poco gramaje al estilo clásico del Pulp y con portada y contratapa a todo color. Además, los ejemplares son de distribución nacional.
“Salvaje Sur” combina varios relatos breves de géneros clásicos de diversos autores que emulan aquellas narraciones al estilo Pulp de los siglos XIX y XX. Los dibujos a mano también intentan recrear la época y los ilustradores –Diego Fiorucci, Javier Mattano, Emmanuel Pérez y Omar Hirsig– hacen un trabajo muy pertinente. Las correcciones de los números se encuentran a cargo de Costarasanti, Potenza & Co.
Cabe resaltar que en 2023, por su nivel de detalle y calidad, el proyecto recibió una mención destacada dentro del Concurso de Diseño aplicado a temáticas del Arte y la Cultura. El mismo fue organizado por el Fondo Nacional de las Artes.
¿Qué es el Pulp?
Sin dudas, para poder reseñar “Salvaje Sur” primero hay que brindar algo de contexto. Para quienes no se encuentran familiarizades con el Pulp, este se trata de una serie de publicaciones que comenzaron a realizarse a finales del siglo XIX en Estados Unidos. Su época de apogeo correspondió a la primera mitad del siglo XX, principalmente a la década del 20.
El nombre Pulp surgió de las publicaciones en sí mismas, las cuales se imprimían en un papel bastante grueso y sin tratar, algo así como una “pulpa” que se volvía amarilla rápidamente. Eran publicaciones muy económicas que se conseguían en puestos de diarios y revistas. Tuvieron, y aún tienen, una gran influencia en la cultura popular; no solo dentro del mismo género literario o los comics, sino inclusive en otros medios como la radio y el cine.
La primera revista Pulp de la que se tiene registro fue “The Argosy”, de 1882. Editada por Frank A. Munsey, circuló en la ciudad de Nueva York. Aunque al principio este tipo de producciones eran seriadas y estaban dedicadas al público juvenil, luego comenzaron a desarrollar otro tipo de contenidos destinados a un público más adulto.
En 1905, Munsey inició un nuevo proyecto llamado All-Story, en el que podían encontrarse historias completas y también seriadas que continuaban en otros números. Fue en All-Story donde se publicaron por primera vez las series de “Tarzán de los Simios” y de las “Aventuras de John Carter”, de Edgar Rice Burroughs. En esa misma revista también, 4 años más tarde, se publicó “The Curse of Capistrano”, la primera aventura donde apareció el emblemático Zorro.
Los caminos del Pulp
Desde 1915 y hacia fines de la Primera Guerra Mundial se diversificaron los temas y géneros dentro del Pulp. Se volvieron populares las revistas de detectives, Western, romance, y principalmente la ciencia ficción en revistas como “Amazing Stories”, “Weird Tales”, “Marvel Tales” y “Astounding Stories”. En esta última se serializó el Capitán Futuro y las aventuras de Flash Gordon.
El auge del Pulp abrió las puertas a muchísimes escritores jóvenes, quienes tuvieron la oportunidad de publicar sus historias ya que las exigencias por parte de las revistas no eran muchas puesto que se pagaba muy poco. Entre les autores que surgieron en el género se destacan Isaac Asimov y Ray Bradbury.
“Salvaje Sur”, una revista Pulp del siglo XXI
En pleno siglo XXI, en tiempos en los que todo pasa muy rápido y reinan las pantallas, tiene lugar el proyecto de “Salvaje Sur” desde la Patagonia Argentina. Se trata de una revista que solo tiene distribución en formato físico, en un papel que, sin dudas, supone un perfecto homenaje a las publicaciones de principios del siglo pasado.
Desde la portada hasta cada una de sus páginas impresas en color negro, con una impronta muy patagónica, “Salvaje Sur” se vuelve una experiencia cargada de nostalgia, completamente inmersiva y única.
Aunque en general la estética recuerda en todo momento al Western (Lejano Oeste), cada uno de sus números aborda diversos géneros como el gauchesco y bandolero, al Noir, el terror y el Japón Feudal.
Se trata de una revista que propone un recorrido y una lectura que exige tomarse su tiempo y dejar ese multitasking que caracteriza a nuestra época para volcarse a una dinámica alejada de la inmediatez. En un mundo efímero, en el que un día la tendencia en redes sociales es una película taquillera y al otro un episodio específico de una franquicia, “Salvaje Sur” invita a volver a los orígenes con historias que abordan temas transversales de la humanidad que parecen escapar al espacio y tiempo.
Si bien la Patagonia tiene una impronta dentro de “Salvaje Sur”, es un proyecto abierto a que participen escritores e ilustradores de todo el país, por lo que se trata de relatos de lo más variados dentro de cada número temático y hay historias para todos los gustos.
La estética se encuentra muy cuidada y cada uno de los números no deja afuera un solo detalle. Además de las ilustraciones típicas que acompañan los relatos breves, al recorrer las páginas se pueden ver desde anuncios y marcas de la época, como así también esas letras mayúsculas muy grandes y fileteadas al estilo Western (¿o más bien porteño?) al comienzo de cada párrafo.
Esa es probablemente la magia de “Salvaje Sur”: hacer viajar a les lectores a través del espacio y el tiempo. Además de todo lo dicho, vale agregar que se proyecta como una propuesta única en su género en la actualidad y resulta una perfecta oportunidad para que les escritores del país se den a conocer, tal como ocurría a principios del siglo XX.