El pasado fin de semana se vivió la consagración de la Selección Argentina, con Lionel Messi a la cabeza, en la Copa América 2024 de Estados Unidos. La Scaloneta venció en la final a Colombia por 1-0 en el Hard Rock Stadium de Miami, una ciudad que el rosarino conoce más que bien. Resulta que el capitán argentino cumplió un año del debut con el Inter de David Beckham en un fútbol que se revolucionó por completo desde su llegada.
Un 21 de julio de 2023 se concretó el bautismo de Messi en el fútbol estadounidense al vestir la 10 de Las Garzas en la League Cup. El compromiso en cuestión tuvo de rival al Cruz Azul de México y cerró la gran velada con broche de oro gracias a un gol del argentino. De hecho, el duelo contra el cuadro azteca tuvo un gran impacto en Norteamérica, donde el fútbol nunca fue el deporte por excelencia y de a poco se inculca con grandes estrellas.
Un inicio soñado
Más allá de que en tiempos modernos los focos futboleros estarán sobre Estados Unidos, la realidad es que nunca hubo un fuerte vínculo entre el país y la disciplina. Con el certamen continental en el pasado, el territorio estadounidense será una de las tres sedes, junto a México y Canadá, de la próxima Copa del Mundo de 2026. Asimismo, el arribo de Messi al fútbol con la bandera de rayas y estrellas también fue un importante factor para atraer miradas.
Luego de un más que exitoso paso por Barcelona de España y una poca destacable estadía en el París Saint-Germain de Francia, el futuro deportivo de Messi era una incógnita. Pese a su enorme argentinidad y la ilusión de muchos hinchas de Newell’s para que vuelva al club de sus amores, la Pulga viajó a Miami. Tras quedar libre del cuadro parisino, el argentino acordó su fichaje con una de las más recientes franquicias estadounidenses.
El equipo de Florida se fundó en 2018 y 5 años más tarde se dio el lujo de contratar al mejor futbolista en actividad. La expectativa fue enorme y en una época en que los eventos deportivos son grandes generadores económicos, su bautismo provocó un revolucionario impacto mediático. Para empezar, el cruce que inició su travesía en el país norteamericano captó 12.5 millones de espectadores mediante la transmisión en vivo y directo.
Esa enorme estadística reflejó que fue el partido de fútbol más visto en la historia de la televisión de aquel país. Además, el cotejo representó por primera vez que el fútbol supere al básquet y fútbol americano, los cuales ostentaron picos históricos cercanos a 11 millones de televidentes. Cabe recordar que hay millones de latinos que habitan en esas tierras.
Por el lado de lo deportivo, el equipo no tenía una buena actuación hasta el ingreso del rosarino, quien le cambió la cara con exquisitas jugadas individuales. La cereza del postre fue la importancia que tuvo al anotar el 2-1 de su equipo con una pincelada de tiro libre sobre el final del encuentro. La agónica victoria sirvió para cortar una racha negativa de 11 partidos y dos meses para los dirigidos por Gerardo Martino, quien dirigió al rosarino en dos ocasiones previas.
Paso a paso
A pesar de ya tener 37 años, Messi continúa con su magnetismo sobre la gente aficionada al fútbol, como aquellos que siguen otras disciplinas. De hecho, en su primer mes en el Inter Miami disputó 7 partidos y marcó 10 goles. Su sola presencia permitió que varios estadounidenses ajenos al fútbol se interesen y que diversos argentinos sigan de cerca la liga de ese país.
Por otro lado, en ese lapso de tiempo con la camiseta del club de Florida se alzó con la Leagues Cup, el primer título de la institución y el 44° en su carrera. Esa consagración le permitió posicionarse como el futbolista con más coronaciones en la historia del profesionalismo. Sin una certeza sobre su techo deportivo ni su horizonte cercano, Messi se transformó en la cara de la Major League Soccer (MLS) en poco tiempo.
Pese a ser colista de la Zona A en la liga doméstica, llegó el momento de iniciar el camino en el certamen que reúne equipos de toda Norteamérica. Por el Grupo Sur 3, Inter Miami derrotó a Cruz Azul con Messi como artífice del gol ganador y luego aplastó 4-0 al Atlanta United con doblete del rosarino. Tras dos triunfos en un grupo de tres equipos, Messi se encaminó a los 16avos para marcar otra vez por duplicado en el triunfo 3-1 sobre Orlando City.
En la siguiente instancia superaron 5-3 por penales a Dallas, tras igualar 4-4 en el tiempo reglamentario con dos goles de Messi, donde uno fue sobre el final. Para los cuartos de final anotó solo un gol en la goleada 4-0 ante Charlotte FC y en semifinales aportó otro tanto en el 4-1 frente Philadelphia. Por último, en la final generó su mejor tanto con el equipo para el 1-1 final frente al Nashville, quien cayó luego 9-8 por penales. Más allá de la histórica consagración, Messi fue el máximo artillero del torneo.
Situaciones que no sorprenden
Desde el primer momento en que Messi llegó a Miami, hubo grandes elogios desde otros ámbitos al quedar perplejos con su habilidad. “¡Bienvenido, hermano! Siempre es lindo ver y estar en presencia de la GRANDEZA”, posteó LeBron James en su Instagram tras presenciar el debut del rosarino. Asimismo, poco a poco varios otros apellidos importantes se unieron a las sensaciones de la estrella de la NBA.
“Messi. Respeto”, escribió Giannis Antetokounmpo, figura del baloncesto estadounidense y candidato al trono de Jamesrt, durante la final ante Nashville. De hecho, el jugador de los Milwaukee Bucks es copropietario del club subcampeón y no pudo esconder su admiración por el argentino tras su golazo. Otro aspecto que sufrió un fuerte impacto por la presencia del ex Barcelona fueron los ingresos de cada partido.
Dallas como Philadelphia comunicaron que las entradas para los cruces contra el equipo de Messi se agotaron en menos de media hora. La presencia del capitán argentino en un campo de juego ocasionó que los tickets para verlo lleguen a cifras astrológicas. En ese sentido, los valores para la final rondaron entre 484 y 2.136 dólares. Mientras que, los boletos más caros para la final de la Champions League 2023 entre Manchester City e Inter costaron 750 dólares.
Por su parte, se informó que la venta de camisetas del Inter Miami con el apellido de Messi superó a otras grandes estrellas deportivas. La Pulga logró que su indumentaria sea más buscada que la de Tom Brady en las primeras 24 horas tras unirse a Tampa Bay Buccaneers o la de James al sumarse a Los Ángeles Lakers. Incluso, en Argentina se generó una masiva compra de su camiseta en sus dos primeros meses en Estados Unidos por encima de otros modelos.
En busca de todo
Una vez concluida y festejada su actuación en el torneo internacional, era tiempo de que Messi intente encaminar al equipo en el torneo local. En medio del objetivo local, estuvo a nada de abrocharse otro título con el club estadounidense. A fines de septiembre de 2023 quedó como subcampeón de la US Open Cup tras caer contra Houston Dynamo. En tanto, no pudo lograr el milagro en la MLS y su revancha será en este 2024.
Con un panorama deportivo difícil, el equipo finalizó anteúltimo en la tabla de la Conferencia Este tras 9 triunfos, 7 empates y 18 caídas. Esas estadísticas dejaron al equipo en la colocación 27° de 29 clubes en la tabla general y no le permitieron llegar a los playoffs de la MLS Cup. Asimismo, Inter Miami quedó eliminado en cuartos de final de la Copa de Campeones de la Concacaf en manos de Monterrey de México.
Luego de una exigente gira por Asia con partidos amistosos que no dejaron buenos resultados, la actual temporada entrega una prometedora realidad. Las Garzas se ubican segundos en su zona con 47 unidades, a una del líder Cincinnati y esperan con ansias el regreso del rosarino tras la Copa América. Pese a la ausencia de Messi en los últimos encuentros, el equipo se pudo mantener a flote en lo más alto.
Por otro lado, los vigentes números de Messi apuntan a que podrá hacer historia en el club de Florida. Con pocos años de existencia, su máximo artillero histórico cosecha solo 29 goles en 70 partidos y es de manera casual otro argentino, Gonzalo Higuían. Messi se ubica tercero con 25 tantos en 29 compromisos, por debajo de Leonardo Campana que acumula 28 en 87 duelos.
Un apellido con peso propio
El fútbol ha cambiado en la modernidad y los negocios mueven al deporte rey en las mejores ligas del mundo. No obstante, hay países en pleno resurgimiento que pretenden acoplarse con el sustento económico a la enorme competitividad europea. Arabia Saudita y Estados Unidos son los dos claros ejemplos de lugares exóticos que buscar un pronto crecimiento futbolístico.
El destino asiático tiene grandes estrellas en la actualidad, con Cristiano Ronaldo como estandarte, pero no logró convencer al argentino. Messi fue una aclamada incorporación por muchas instituciones a nivel mundial cuando se conoció su salida de Francia. Sin embargo, el Diez priorizó lo deportivo por sobre lo monetario y orientó su destino en Norteamérica. Tras posicionarse como gran figura del fútbol estadounidense, inició el armado de su “Dream Team”.
Messi logró orquestar un grupo de amigos en Miami con ex compañeros suyos durante la etapa dorada del club catalán. El primero en aterrizar fue Sergio Busquets, amigo íntimo del rosarino por fuera de las canchas. Luego fue el turno de Jordi Alba, su mejor y más eficaz asistidor en España. Luis Suárez fue la última pieza que trajo Messi para completar su pequeña plantilla blaugrana.
El uruguayo estaba en Gremio de Brasil cuando el argentino llegó a la MLS, lo que retrasó el esperado reencuentro. Asimismo, Messi también quiso convencer a Neymar y Ángel Di María pero el brasileño se fue a territorio árabe y Fideo continuó en Europa. Será cuestión de tiempo para ver si este mágico cuarteto logra posicionar a Inter Miami en lo más alto del país.