El Estadio Único “Diego Armando Maradona” de La Plata volvió a ser la sede del rock argentino, gracias a Los Fundamentalistas del Aire Acondicionado. En la noche del sábado, sorprendió el “regreso” del Indio Solari, creador de la banda, a través de las pantallas dispuestas en el escenario.
Las luces se apagaron y la orden de largada sonó en todo el estadio: “Damas y caballeros: los Fundamentalistas del Aire Acondicionado”, la frase enunciada por Solari en una voz en off. “Alien Duce adornó tu esclavitud y en un edificio en llamas te encanó”, fueron las primeras estrofas que sonaron de una canción originaria de Último bondi a Finisterre, el penúltimo disco de Patricio Rey y Los Redonditos de Ricota, y dio al público una idea sobre la noche ricotera que se vendría.
A puro rock
Con un setlist de tres horas, Los Fundamentalistas se fueron alternando frente al micrófono. Deborah Dixon fue la encargada de poner su voz titánica a canciones como “Blues de la libertad” y una icónica versión de “Un tal Brigitte Bardot”. Por su parte, Luciana Palacios impresionó al público con “Perdiendo el tiempo” y “Ya nadie va a escuchar tu remera”. El saxofonista Sergio Colombo se encargó de “La hija del fletero” y “Etiqueta negra”.
Mientras que las demás canciones se repartieron entre el bajista Fernando Nalé, encargado de una destacada versión de “La Bestia Pop” (tocada por última vez en 1999) y “El blues de la artillería”; el tecladista Pablo Sbaraglia que tomó el micrófono para “To Beef or Not to Beef”; el guitarrista Gaspar Benegas puso su voz en “El charro chino” y “Fusilados por la Cruz Roja”; y Baltasar Comotto con “¡Todos a los botes!”.
La banda se completa con Miguel Ángel Tallarita en trompeta y Ramiro López Naguil en la batería. El show fue una verdadera misa ricotera y un homenaje al icónico Carlos Alberto “Indio” Solari.
Un setlist con tintes políticos
Ante el contexto actual de un gobierno que va en contra de los intereses del pueblo, la lista de la banda se planteó desde una perspectiva crítica. “Todo preso es político”, “Música para pastillas” (por primera vez desde 1992), “Queso Ruso”, “Masacre en el puticlub” y “Scaramanzia” fueron las canciones destacadas de la noche en una profunda declaración de principios.
A destacar la remera de Arsat de Pablo Sbaraglia, la empresa nacional de telecomunicaciones del Estado que Javier Milei busca desfinanciar. Además, se escuchó “La Patria no se vende” entonada con el acompañamiento de López Naguil desde la batería. Antes de “Juguetes perdidos”, Gaspar Benegas expresó: “En estos tiempos que tanto esfuerzo ponen en dividirnos, cuidemos mucho esta oportunidad de unidad, esta hermosa unión que nos da la música; defendamos eso”.
Un mes atrás, el Indio había expresado en declaraciones radiales: “Independientemente de que le vaya bien, hay un loco de Presidente. No sé si es un loco, o es mascarón de proa de un interés. Nunca pensé que un tipo con una motosierra pueda llegar a Presidente y pasara todos los filtros”.
El emotivo momento que todos esperaban llegó y el Indio Solari, ex líder de Patricio Rey y Los Redonditos de Ricota, apareció virtualmente en las pantallas para cantar “Nuestro amo juega al esclavo” del álbum ¡Bang! ¡Bang!… Estás liquidado. Sus presentaciones virtuales fueron en “Amar… sanar”, “Un ángel para tu soledad”, “Encuentro con ángel amateur” y “Flight 956”.
El recuerdo del Indio y el desempeño de Los Fundamentalistas movilizan a diversos sectores de la población desde la previa hasta el desarrollo del show, teñido de “Banderas rojas, banderas negras de lienzo blanco en tu corazón” que flameaban entre el público.