Días atrás se llevó a cabo el 78° Congreso Ordinario de la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL). El mismo se desarrolló en Luque, Paraguay, y contó con la presencia de Gianni Infantino, presidente de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA).
En la previa de la asamblea se firmó el acta para la organización del Mundial 2030, con tres partidos que tendrán lugar en Sudamérica. Precisamente en Uruguay, Argentina y la mencionada Paraguay, mientras que el resto de la competición se disputará en España, Portugal y Marruecos.
Sin embargo, un detalle pasó inadvertido para muchos de los presentes como para los medios de comunicación, y fue el pedido explícito de Alejandro Domínguez, presidente de la CONMEBOL, a Infantino. El dirigente de origen paraguayo le solicitó a la FIFA la posibilidad de que Brasil organice el Mundial Femenino 2027.
Brasil y el sueño de organizar el Mundial 2027
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) tiene serias intenciones de convertirse en sede de la cita mundialista programada para el 2027. Las expectativas son tan grandes que el propio Lula da Silva, presidente del país limítrofe con Argentina, tomó cartas en el asunto.
Según trascendió, el mandatario le solicitó a André Luiz de Carvalho, titular de Deportes en el Gobierno, que despliegue sus habilidades de negociación para convencer a los dirigentes de la FIFA sobre que Brasil es la mejor opción para recibir el evento, el cual tendría lugar por primera vez en Sudamérica en caso de concretarse.
Asimismo, Lula se refirió de forma pública a esta oportunidad que atraviesa en su mandato. «Estoy seguro de que nuestro país, por su tradición futbolística y por la estructura de los estadios ya construidos, tiene plena capacidad para albergar el evento, en un momento de ascensión del fútbol femenino en Brasil y en el mundo», expresó a través de sus redes sociales.
Las candidaturas restantes y la decisión final
Por otra parte, la nación sudamericana compite con otras tres candidaturas. En conjunto, Alemania, Bélgica y Países Bajos buscan ser los anfitriones del evento en representación de la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (UEFA). No obstante, el evento ya se organizó en Europa durante la edición Francia 2019, por lo que es poco probable que vuelva a desarrollarse allí.
Quién también presentó su candidatura de forma oficial fue Sudáfrica, país que organizó el Mundial de fútbol masculino en 2010. En este sentido, al igual que el territorio sudamericano, África nunca fue anfitrión del evento, por lo cual también cuenta con chances.
Por último, también compite la doble candidatura norteamericana, conformada por Estados Unidos y México. Ambas naciones, junto a Canadá, recibirán la Copa del Mundo masculina en 2026, por lo que resultaría extraño que la FIFA les otorgue otra competición ya que durante los últimos años se caracterizó por distribuir las sedes de forma equitativa.
Con las inspecciones ya en marcha en cada uno de los países candidatos, el ente rector del fútbol dará a conocer su veredicto final mediante una votación de los miembros de la FIFA. La misma se llevará a cabo el viernes 17 de mayo en un congreso que tendrá lugar en Bangkok, Tailandia.
Específicamente en el caso de Brasil, en caso de convertirse en el país organizador, ya designó sus ciudades sede a través de un documento que envió a la FIFA: Porto Alegre, Belo Horizonte, Río de Janeiro, San Pablo, Brasília, Recife, Salvador, Cuiabá, Manaos y Fortaleza.