El gobierno de Javier Milei es consciente de que su programa económico basado en el ajuste está perjudicando severamente a la sociedad. Sin embargo, el mandatario pretende instalar la idea de que la economía ya muestra signos de recuperación.
El problema es que basó esas afirmaciones en fake news. En contraste con la información falsa que analizó, las ventas minoristas de Pequeñas y Medianas Empresas (PyMEs) se siguen contrayendo y la actividad de la industria y la construcción sufre la recesión más fuerte desde la crisis de comienzos de siglo.
¿Mentiras, noticias falsas o confusión?
El principal dato de la economía que mantiene desvelada a toda la población es la inflación. En diciembre, el primer mes de gestión del anarco-capitalista, la cifra se disparó al 25,5% y, aunque registró una desaceleración en los meses siguientes, no baja de los dos dígitos.
Estamos en la previa de conocer la inflación de marzo, lo que da lugar a muchas conjeturas y predicciones. Durante una reciente entrevista, Milei afirmó que los precios están cayendo basándose en un “bot” de la red social X, el cual resultó ser una cuenta falsa que simulaba un seguimiento de los precios.
Incluso el ministro de Economía, Luis Caputo, usó como referencia este bot para sostener que se registró un proceso de deflación; es decir, de contracción de los precios. Por supuesto, todo estaba fundamentado con información falsa.
La variación de precios de la canasta básica en el mes de Abril al día 8 es del -4.52%.
— Jumbot (@Bot_Jumbo) April 8, 2024
Yendo aún más lejos, el mandatario aseguró que la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) registró una mejoría de las ventas minoristas, lo cual demostraba una recuperación de la economía. Sin embargo, la entidad tuvo que salir a desmentir esos datos.
Los números de la recesión
“La mirada de la macroeconomía del Gobierno no es la misma que la de la economía real”, aseveró el titular de CAME, Alfredo González. Es que las ventas minoristas cayeron un 12,6% en marzo.
A pesar de que significa una desaceleración de la caída respecto a enero y febrero, el contexto es distinto al de la temporada de verano. Ahora, a la contracción del consumo por la pérdida del poder adquisitivo se le suma la crisis en los pequeños comercios por los tarifazos.
Cabe destacar que dos de los sectores con mayor derrumbe del consumo fueron los alimentos (-28,7%) y los medicamentos (35,6%), ambos rubros desregulados por el ministro Caputo, a pesar de que estos aumentos impactan de lleno en las clases populares.
Además, dos indicadores claves para la marcha de la economía sufren la recesión más fuerte desde el 2002. Se trata del Índice de Producción Industrial Manufacturero (IPI manufacturero), que cayó un 9,9% interanual y el indicador sintético de la actividad de la construcción (ISAC), que sufrió un desplome interanual del 24,8%.
Cabe mencionar que quince de las dieciséis divisiones de la industria manufacturera presentaron caídas interanuales. “Maquinaria y equipo”, con el 33,6%; “Industrias metálicas básicas”, con un 23,1%; “Otros equipos, aparatos e instrumentos”, con el 32,6%; y “Productos minerales no metálicos”, representó el 18,6%; son algunas de ellas.
En el caso de la construcción, si se analizan las variaciones del acumulado durante el primer bimestre de 2024 en su conjunto en relación a igual período del año anterior, se observan bajas de 63,4% en asfalto; 42,3% en hierro redondo y aceros para la construcción; 34,2% en yeso; 31,6% en hormigón elaborado; entre otros.
Esto se debe, por un lado, a la caída del salario de les trabajadores, cuyo consumo es cada vez más limitado. Por otro lado, se están comenzando a sentir las consecuencias de la eliminación de la obra pública en todo el país.