«Anda a lavar los platos» es un podcast de tres episodios que aborda el tema de la violencia vial desde una perspectiva de género. Esta producción es realizada por la ONG Compromiso Vial, con sede en la ciudad de Rosario, y tiene como objetivo sensibilizar a la audiencia acerca de la importancia de considerar el género en la planificación de políticas de seguridad vial, así como concientizar sobre las situaciones de violencia y desigualdades en este ámbito.
Nota al Pie tuvo la oportunidad de dialogar con Verónica Palacios, vicepresidenta y conductora del podcast de Compromiso Vial, para conocer más detalles sobre esta iniciativa. «Con esta producción, buscamos no solo abrir, sino ampliar una discusión pública urgente acerca de cómo el género se relaciona con la seguridad vial», expresó Verónica.
Es sabido que la calle es un espacio donde se manifiestan y perpetúan desigualdades, incluida la violencia hacia las mujeres. En este contexto, la comunicadora Verónica destacó: «Es relevante mencionar que 8 de cada 10 conductores particulares siguen siendo varones».
Una herramienta para erradicar la violencia vial
La frase que da nombre al podcast se repite a diario entre bocinazos y el ruido de la ciudad. Aunque cada vez son más las mujeres al volante, «anda a lavar los platos» parece ser un signo que relega a la mujer al ámbito doméstico y también delimita el espacio de los conductores como exclusivo para varones.
Continuando con los datos proporcionados por la ONG, se destaca que 9 de cada 10 personas que han causado siniestros viales fatales son varones. Además, casi el 40% de las personas heridas son mujeres y el 80% de las personas fallecidas en incidentes de tránsito son varones jóvenes de entre 15 y 35 años.
Por su parte, Micaela Notz, presidenta de la ONG, participa en el primer episodio y hace referencia a cómo las diferencias de género afectan la movilidad de las mujeres. Dentro de este episodio inicial, además de reflexiones y una mirada crítica, se presentan algunas situaciones y conductas que podrían cambiar.
Por ejemplo, a pesar de que las mujeres son las principales usuarias del transporte público (lo cual está ligado al hecho de que aún son quienes se encargan principalmente de las tareas de cuidado), la mayoría de los conductores son varones. En cuanto al acceso a vehículos particulares, en 2022 solo se otorgó el 28% de las licencias de conducir a mujeres.
«La violencia vial sigue siendo una de las principales causas de muerte entre los jóvenes y causa un daño irreparable en todo el tejido social. Es un problema que debe ser abordado, identificado, deconstruido y reconstruido para lograr una mejor calidad de vida», expresó Palacios.
Derribando prejuicios y construyendo más igualitaria
La producción tiene como objetivo colaborar en la construcción de una seguridad vial más equitativa y en la reducción de los siniestros. Por ello, el formato elegido se pensó para llegar a diferentes públicos de diversas edades y lugares. De hecho, lograron compartir datos, experiencias y herramientas en menos de 15 minutos de duración en cada episodio.
Verónica subrayó: “El apego a las normas y la prudencia son conductas y acciones que están constantemente amenazadas”. Esto se debe a una sociedad en la que “se pretenden imponer prácticas riesgosas, acciones individuales por encima de las conductas colectivas de cuidado”.
Aunque las mujeres y las identidades feminizadas también se ven afectadas por esta cultura de la violencia, es importante tener en cuenta sus razones. “La empatía, el cuidado y especialmente el sentido de pertenencia colectiva, continúan siendo condiciones y características ajenas o desvinculadas al universo machista”, sostuvo.
Para concluir, Verónica consideró: “Desde la perspectiva de género, es posible identificar, deconstruir y transformar estas relaciones para erradicar las violencias, especialmente la violencia machista que está tan fuertemente marcada y arraigada en la movilidad”.