Frente a la decisión del Gobierno de Javier Miliei de ajustar al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), más de 1200 trabajadores y becaries del mismo se manifestaron en el edificio central del organismo en repudio del desfinanciamiento.
En el Polo Científico-Tecnológico, del barrio de Palermo, les científiques concretaron una permanencia pacífica. Les mismes se reunieron en el piso 11 del edificio central del CONICET al grito de “No al Vaciamiento”.
Además, reclamaron una resolución del Directorio respecto al plan de vaciamiento de Milei. Pese a recibir los reclamos, las autoridades del organismo no brindaron una respuesta satisfactoria. Un detonante que preocupa a todos
En un contexto que abarca medio centenar de despidos y más de 200 trabajadores que no perciben su salario, Nota al Pie conversó con Gonzalo Sanz Cerbino, investigador adjunto del CONICET y delegado de ATE CONICET CABA.
Para comenzar, señaló lo vital que resultan las becas para el cuerpo laboral del CONICET: “Son un mecanismo por el cual el organismo va renovando anualmente su planta de investigadores e investigadoras”.
En esa línea, explicó que “las becas doctorales son el primer ingreso al CONICET. Todos los años se convocan a nuevos concursos de becas”. Además, aclaró que “los concursos presentan una cantidad de puestos asignados y una exigente demanda para los postulantes”. A su vez, mencionó que “las nuevas camadas becarias no representan nuevos cargos laborales, sino que reemplazan a aquellas que ya terminaron sus estudios”.
Todos los años, los concursos otorgan cerca de 1600 becas nuevas. Sin embargo, en este 2024 aún no hay resultados ya que el CONICET no cuenta con el presupuesto para la renovación.
La resolución debía conocerse en enero, pero el organismo informó que estará recién a fines de febrero. Además, anunció que solo cuenta con presupuesto para 900 becas, por lo que se mantiene una constante discusión para que garantizar todas las becas.
Más de una problemática
A pesar de que ayer se visibilizó el reclamo por las becas, Cerbino enfatizó en que ese no es el único problema. “A mediados de enero se despidieron a 50 empleados de distintos puntos del país”, aseguró. “Eran trabajadores que cumplían funciones sumamente importantes para mantener el funcionamiento del organismo”, agregó.
Asimismo, el investigador adjunto detalló que la planta administrativa es muy chica y que hubo una gran diferencia con el “Macrismo” en 2016, ya que ahora sí recurrieron a los despidos.
También remarcó que “tampoco han obtenido resultados del concurso de promociones de investigador científico por falta de presupuesto”.
Por otra parte, sostuvo que estando a mediados de febrero “más de 200 trabajadores no cobraron aún su sueldo”. En esa línea, afirmó que otros 100 investigadores y becaries del CONICET tuvieron inconvenientes con el banco que depositaban sus cobros.
Ante estas problemáticas, Cerbino indicó que “el problema madre de toda esta situación es que CONICET está funcionando con el presupuesto que fue aprobado para el 2023”.
Al respecto expresó: “Está prorrogado por la actual administración y es un presupuesto pensado para un CONICET y para un país con 200% menos de inflación”.
En ese sentido subrayó que las consecuencias “ya se empiezan a ver en institutos del organismo que tienen dificultades para afrontar gastos corrientes como luz, gas o internet”. Por tal motivo, sostuvo que “es una situación general que nos lleva al vaciamiento del CONICET y las becas es uno de los reclamos que tenemos”.
Incluso, mencionó el conflicto que se genera por licuación salarial al presentar una actualización en enero de 16% contra una inflación de 20% en ese mes y de 25% en diciembre. A este ritmo, les profesionales también especulan un vaciamiento por renuncias ya que no podrán vivir con el salario del CONICET y deberán buscar empleo en otro lado.
Ante todos los problemas, Cerbino sostuvo que “lo importante es evitar la política que está más que clara por parte del Gobierno Nacional, que es el vaciamiento del CONICET”.
La respuesta
A pesar de la presencia policial, les trabajadores y becaries se mantuvieron firmes para hacer oír sus demandas. “No nos retiraremos hasta obtener al menos una respuesta sobre la publicación de los resultados de la convocatoria de becas doctorales y de finalización”, sostuvieron.
Bajo esa línea, insistieron en que se garantice un presupuesto acorde para los salarios, permanencia en los puestos de trabajo y el desarrollo y continuidad de la investigación científica en el país. Tras varias horas de incertidumbre, el Directorio pasó a cuarto intermedio pero con una resolución.
Las autoridades se comprometieron a entregar las 300 becas de finalización y solo 600 de doctorado con fecha de inicio para agosto. No obstante, con el lúgubre panorama laboral que proyecta el nuevo Gobierno, ATE CONICET Capital advirtió que se mantendrá en alerta ante cualquier posible cambio.