La provincia de Chubut continúa en vilo por el feroz incendio que avanza en el Parque Nacional Los Alerces y que ya registra más de 2.000 hectáreas quemadas. Hasta el momento, la mayoría del área afectada pertenece al Parque, aunque el fuego también avanzó hasta jurisdicción provincial. Según el intendente Danilo Hernández Otaño, las llamas se expandieron en un 70 por ciento dentro del parque y un 30 por ciento en provincia.
Asimismo, en diálogo con Télam Radio, Otaño indicó que el fuego sigue activo y que prevalece el peligro debido a su propagación. En este sentido, el alcalde detalló que el incendio tiene dos flancos -derecho e izquierdo- y un desarrollo longitudinal que ya supera los 8 kilómetros. En tanto, explicó además que el frente de avance es variable según la geografía entre 800 y 1200 metros.
Sin embargo, más allá del fuego, en las últimas horas la noticia también despertó la polémica entre la comunidad mapuche y el Gobierno provincial, luego de las declaraciones del propio gobernador, Ignacio Torres, quien acusó a integrantes de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) de ser quienes provocaron el incendio.
Las acusaciones de Torres tuvieron lugar este domingo, cuando el mandatario provincial llegó a Esquel para monitorear las tareas en el área afectada. Desde allí, el gobernador apuntó contra la RAM como los principales responsables y sostuvo que “hacen estas cosas” porque “tienen un negocio inmobiliario”.
No obstante, miembros de la comunidad mapuche-tehuelche repudiaron las imputaciones y denunciaron al gobernador por propagar un discurso nutrido de violencia racista. Además, desmintieron tener algún tipo de responsabilidad por el incendio y aseguraron que, detrás del fuego, en realidad están los intereses extractivistas de personajes como Joe Lewis, el poderoso empresario británico dueño de miles de tierras de la Patagonia.
El repudio a las declaraciones del gobernador
“Queremos dejar en claro que el pueblo mapuche lleva una lucha histórica en defensa de la ñuke mapu, los bosques son una parte esencial de nuestro itrofil mongen y nunca le haríamos daño”, empieza el comunicado que este lunes difundieron desde las comunidades mapuches y tehuelches.
En el escrito, los miembros de los pueblos originarios apuntaron contra “intereses extractivistas” dentro del Parque Los Alerces y advirtieron que el fuego tuvo lugar luego de que se anunciara la construcción de una represa hidroeléctrica.
“Esto no es algo nuevo: recordemos que hace poco intentaron iniciar un foco de incendio en la entrada al lof Paillako y pu lamuen que viven allí junto a brigadistas pudieron darle fin y no dejar que creciera”, indicaron.
Además, se pronunciaron contra las acusaciones del gobernador de Juntos por el Cambio (JxC) al considerar que sirven como “intento de división” para establecer la idea de “mapuches buenos y malos”. “No dejaremos que nos intenten separar como che”, agregaron.
“Se está instalando una dictadura racista y los costos pueden ser un genocidio”
Por su parte, desde el Movimiento de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir también emitieron su propio comunicado, en el que además respaldaron a Moira Millán, la activista mapuche que fue acusada de ser “la nueva jefa de la RAM” y la “autora intelectual” del incendio.
“Estas declaraciones no son al azar, le hacen el juego a los vecinos más rancios e históricamente antimapuche de algunos barrios de la Patagonia, muchos miembros de la Sociedad Rural Argentina que necesitan un enemigo interno para justificar el odio y el despojo territorial contra la población mapuche y también hacia la no mapuche que acompaña la lucha por la recuperación de la tierra robada y contra el terricidio”, explicaron desde el Movimiento.
En tanto, este martes por la mañana, el lof Pillañ Mawiza convocó a una conferencia de prensa en la ciudad de Esquel, de la que participó la propia Millán. Desde allí, la activista mapuche sostuvo que los discursos propagados por el gobierno provincial y por medios de comunicación “intentan criminalizar la lucha territorial mapuche como así configurar un enemigo interno”.
De esta manera, la referenta confirmó que tomará medidas legales al advertir que las acusaciones contra el pueblo mapuche se tratan de actitudes racistas. “Las injurias y las calumnias tienen que tener un límite”, expresó Millán, al mismo tiempo en que advirtió que en Argentina “se está instalando una dictadura racista y los costos pueden ser un genocidio si no lo paramos a tiempo”.