La Ley Ómnibus es un autobús hacia el pasado. Entre las múltiples modificaciones que propone, se encuentran cambios en la Ley Nacional de Atención y Cuidado Integral de la Salud Durante el Embarazo y la Primera Infancia. Popularmente, se la conoce como Plan Mil Días.
Esta legislación se aprobó en 2020, como complemento a la Ley 27610, de Acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo. Su objetivo es acompañar el cuidado integral de la vida y la salud de las personas gestantes, y niñes en sus primeros 3 años.
Si bien no la deroga, el presidente Javier Milei incluyó en su terrorífico proyecto de ley textos distintos para algunos artículos de la Ley Mil Días. Cambiarían algunas denominaciones, como “niño por nacer” o “niños desde el momento de su concepción”. También, eliminaría oraciones que velaban contra la violencia de mujeres y diversidades.
Ahora todo depende del Congreso, que tratará el proyecto de “Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos” (como se llama en realidad la conocida como “Ley Ómnibus”). Esto será en enero. Mientras tanto, este sábado 30 de diciembre se cumplen 3 años desde que se aprobó el aborto legal en Argentina.
¿Dónde está la libertad, carajo?
Para les combatientes al lenguaje inclusivo, las modificaciones que el gobierno de la Libertad Avanza promueve en la Ley Mil Días demuestran que las palabras importan, y mucho. Milei y su gabinete lo saben, y lo confirmaron en este texto.
Los cambios que se proponen no cambian la esencia del Plan Mil Días, sino que afecta a sus destinataries. El proyecto de la Ley Ómnibus destina 30 artículos a las reformas que se planean para la Ley 27.611. De ellos, muchos solo suplantan la denominación actual de les beneficiaries de la política pública: “mujeres y otras personas gestantes, y de los niños y las niñas”.
En su lugar, quienes contarían con acceso a este plan serían: “madres en situación de vulnerabilidad” y “niños desde el momento de su concepción hasta los tres años”. Las personas gestantes de otro género: ¡afuera!.
Al momento de nombrar a las infancias, también se generan contradicciones.
Por una parte, en casi todos los artículos (salvo en dos: el 512 y 516), se hace referencia a los “niños”, en diferencia a la ley actual que menciona a “niños y niñas”. Otra vez, se vuelve al término genérico que quita años de lucha en cuanto a las formas de utilizar el lenguaje. ¿Esos dos artículos se les habrá pasado de largo?
Pero uno de los mayores problemas es la definición de la protección de lo que la ley actual refiere como “niños y niñas hasta los tres (3) años de edad”. La Ley Ómnibus plantea que debería ser “los niños por nacer hasta los tres años de nacidos”.
Esta nomenclatura choca directamente con la Ley 27610, de Acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo. ¿Se lo utilizará como una forma para generar un retroceso en este derecho adquirido por la lucha feminista en 2020?
Cabe recordar que tanto el presidente Javier Milei como la vicepresidenta Victoria Villarroel, están en contra del aborto legal. De hecho, durante la campaña electoral afirmaron en varias ocasiones que, en caso de ser electes, derogarían la ley.
¿Por qué importa el Plan Mil Días?
Tal como está ahora, esta ley tiene como objetivo “fortalecer el cuidado integral de la salud y la vida de las mujeres y otras personas gestantes, y de los niños y las niñas en la primera infancia”.
Asegura que se da para cumplir con “los compromisos asumidos por el Estado en materia de salud pública y derechos humanos de las mujeres y personas con otras identidades de género con capacidad de gestar, y de sus hijos e hijas”. Establece que su fin es reducir la mortalidad, la malnutrición y la desnutrición, proteger y estimular los vínculos tempranos, el desarrollo físico y emocional y la salud de manera integral, y prevenir la violencia.
Otros aspectos preocupantes de la modificación de la Ley Mil Días que propone Milei, son la eliminación en los primeros artículos de la “prevención de violencia”. Si bien sí se nombra la violencia por razones de género en el artículo 515, anteriormente se hablaba de mujeres embarazadas y niños en situaciones de vulnerabilidad.
¿Cuáles serán esos casos? Acaso la violencia por razones de género, ¿no es un modo de vulnerabilidad?
Por otra parte, la legislación actual asegura en su artículo 3 el “respeto a la identidad de género de las personas”. Pero…¿adivinen qué? El proyecto de la Libertad Avanza quitaría esa línea. Parece que no tienen puestos los anteojos violetas sino los de la binaridad.
Asimismo, cambiaría la autoridad de aplicación de la Ley 27611. Ahora pasaría a la Secretaría de Niñez y Familia, en el Ministerio de Capital Humano. Esa oficina está a cargo de Pablo de la Torre, que ¡oh sorpresa!, se declara abiertamente provida. Ocupé el mismo cargo en el municipio de San Miguel, uno de los dos que no asegura el acceso a la ILE en su territorio.
La importancia de mantener la ley como está, no solo radica en la ayuda que brinda a madres y niñes. También es un paso más para incluir en la legislación a todas las personas con capacidad de gestar, no importa cuál sea su género. Si bien no hay estadísticas de cuántas personas trans o no binarias cursaron embarazos en el año, cada vez son más quienes se animan a transitar el proceso sin negar su identidad de género, enfrentando al sistema que muchas veces discrimina.
Además, la prevención de la violencia por motivos de género debe mantenerse. Por ejemplo, desde el observatorio de Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá), se registraron, entre enero y noviembre de 2023, 338 muertes violentas de mujeres, travestis y trans. Es decir, una muerte violenta en Argentina cada 23 horas.
Ante la amenaza al aborto legal, pañuelazo
En las últimas semanas, Milei se especializó en dar malas noticias al pueblo argentino en fechas significativas. Hace tan solo 9 días, el DNU que deroga gran cantidad de leyes provocó una ola de cacerolazos, justo el 19 y 20 de diciembre. Se cumplían 20 años de la crisis de 2001, donde esa forma de protesta fue la que inundó las calles argentinas.
Ahora, el presidente se mete con la Interrupción Legal del Embarazo, justo tres años después de su aprobación. Por eso, desde la Campaña Nacional por el Aborto Legal aseguraron que “seguimos en campaña”.
Bajo el lema “en la calle la conquistamos, en la calle la defendemos”, convocaron un pañuelazo en todas partes del país este viernes 29 de diciembre. La intención es que se propague lo más posible y algunos de los puntos de concentración se encuentran en el siguiente post.