Cada 13 de diciembre, en Argentina se celebra el Día Nacional del Petróleo. La fecha se eligió en conmemoración al descubrimiento del primer yacimiento petrolero en Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut, en 1907.
A pesar del cambio de gobierno y la incertidumbre política, la industria de hidrocarburos está próxima a cerrar el mejor año de la historia. Tanto el yacimiento Vaca Muerta como la empresa con participación estatal YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales) registraron récords de producción, inversiones y ganancias.
En este contexto, el gobierno recién asumido de Javier Milei incluyó la venta de las acciones estatales de YPF en su programa de ajuste fiscal, denominado “Plan motosierra”. Sin embargo, el ministro del Interior, Guillermo Francos, sostuvo que primero se debe “poner en valor” la empresa para que luego pase a manos del sector privado.
Por esta razón, el Movimiento para la Recuperación de Nuestro Petróleo realizó un abrazo simbólico a YPF, en la sede de la calle Talero Eduardo, en la provincia de Neuquén. La organización comunicó que “entregar YPF es como entregar nuestra bandera” y que hay que defenderla por su valor “estratégico, económico y político”.
El desempeño de YPF y la industria del petróleo
La actividad productiva en Vaca Muerta se encuentra batiendo récords históricos, sobre todo en lo que respecta a la explotación de hidrocarburos no convencionales. La producción nacional se ubica en 662 mil barriles diarios, un 10.58% mayor a lo que se registró en 2022. El yacimiento recibió casi 8 mil millones de dólares en inversiones.
Por otro lado, el balance de YPF también fue positivo en el último año. El principal competidor del mercado de combustibles recibió más de 5 mil millones de dólares en inversiones y en lo que va del 2023 duplicó el nivel de ganancias del 2022.
Desde el Movimiento recordaron que “en el periodo que YPF fue 100% privada y extranjerizada (1998-2011), la producción de petróleo cayó un 42,9% y la de gas un 18,4%. En cambio, en el periodo de gestión estatal, ésta creció un 24% en petróleo y un 25,1% en gas”.
Además, sostienen que sin la estatización de YPF “no se podría entender el desarrollo de Vaca Muerta, porque fue YPF la que llevó sobre sus espaldas la curva de aprendizaje para llegar a dominar la técnica y su proyección actual”.
El futuro del sector en la gestión Milei
A pesar de la iniciativa del presidente de poner en venta las acciones estatales de YPF como medida necesaria para lograr el objetivo de recortar el gasto público lo más posible, otros funcionarios de su gobierno son conscientes de la importancia del sector energético y ponen en duda la privatización.
Según algunos especialistas, la designación del ex presidente de Tecpetrol, Horacio Marín, al frente de YPF es una señal positiva. La elección de un especialista en el sector petrolero podría demostrar la intención de promover el desarrollo de la industria.
En este sentido, el ministro del Interior reconoció que «dependemos mucho de que seamos capaces de encarrilar todos esos recursos enormes que tenemos hacia una producción que genere los dólares que necesita la economía argentina para moverse”.
Por su parte, desde el Movimiento recordaron que luego de la privatización en la década de 1990, “quedó en evidencia la gravedad de haber perdido el control de la política petrolera, de haber entregado el conocimiento fehaciente de nuestros reservorios frente a la voracidad de los intereses extranjeros que disputan nuestros recursos”.
Como consecuencia, además de los puestos de trabajo que se perdieron, “se produjo mucho petróleo y gas, pero nos empobrecimos, perdimos el autoabastecimiento y las reservas descubiertas”.