La edición n° 28 de la Conferencia de las Partes (COP) o Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático se aproxima. La misma tendrá lugar en Dubái, Emiratos Árabes Unidos, del 30 de noviembre al 12 de diciembre.
Allí, de forma anual, 198 Estados partes se reúnen para abordar la amenaza global que representa el cambio climático. Uno de sus hitos más importantes fue el Acuerdo de París, firmado en 2015, mediante el cual los países se comprometieron a limitar el calentamiento global para este siglo a 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales.
Argentina participa de las COP desde 1995 como Estado Parte, y este año no será la excepción. Sin embargo, la política nacional con respecto al medio ambiente entra en duda al asumir el 10 de diciembre (mientras se celebra la COP 28), el nuevo presidente electo, Javier Milei.
Para profundizar en cómo se prepara la nación ante la próxima Conferencia de las Partes, y por qué es importante participar de las mismas, Nota al Pie dialogó con Victoria Rocío Laguzzi. Ella es miembro del área de Política Climática de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), y próxima asistente al evento.
Argentina y las COP: una larga historia
Laguzzi destacó la importancia de que nuestro país participe de esta congregación. “Las COP representan el principal espacio a nivel internacional de encuentro y revisión del estado de implementación de los compromisos climáticos vigentes”, explicó. También agregó que es el lugar donde los Estados Parte toman decisiones para impulsar una mayor ambición climática.
Argentina no es nueva en el espacio, sino que cuenta con una larga trayectoria. La integrante de FARN recordó que la nación participa como Estado Parte desde la primera COP en Alemania, 1995. Asimismo, “ha sido sede en dos oportunidades, en 1998 (COP4) y en 2004 (COP10)”.
La joven remarcó otro punto donde nuestro país resalta: la composición de las delegaciones argentinas en las COP. Aseguró que, además de la participación de los equipos técnicos y negociadores tanto del Ministerio de Ambiente como de Cancillería, sobresale la presencia de representantes de la sociedad civil, organizaciones no gubernamentales, representantes del sector privado y empresaries, legisladores nacionales y de distintas provincias, y jóvenes.
“Esta postura, de apertura e inclusión, no es común en todas las delegaciones a nivel internacional”, afirmó Victoria Rocío Laguzzi. Aseguró que es posible gracias a que las distintas administraciones de los gobiernos argentinos acreditaron a “todos aquellos actores” que deseaban seguir el proceso de las COP.
Dubái, la sede de este año, ya poseé su propia polémica, por pertenecer a uno de los 10 Estados que más petróleo produce en el mundo. En la COP28, el tema central será la aprobación y publicación del primer Balance Mundial. Dicho documento “es la herramienta más importante de evaluación y transparencia sobre la observancia de los objetivos y metas del Acuerdo de París”, aclaró la integrante de FARN.
Argentina participó de ese pacto, por lo que deberá rendir sus cuentas. Además, otros temas relevantes para el país según la especialista serán el financiamiento climático y el acceso a medios de implementación (esto implica tanto transferencia de conocimiento como de tecnología); la Meta Global de Adaptación; transición justa; agricultura y seguridad alimentaria; y el seguimiento de la implementación del fondo de pérdidas y daños clave para los países en desarrollo.
La delegación nacional asiste a la COP con un largo camino recorrido. Por ejemplo, el pasado martes 14 de noviembre, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible puso en marcha la Estrategia Nacional para el uso de los Mercados de Carbono.
La importancia de un Ministerio de Ambiente
El movimiento Embajadores Verdes realizó una encuesta a 10 mil argentines entre junio y julio de este año. Como resultado, obtuvieron que un 81% de les interrogades afirmaron que les moviliza el ambientalismo. A su vez, en un paneo general, la crisis ambiental se encontró en tercer lugar de las problemáticas que atraviesa Argentina.
Así y todo, todavía no se sabe quién será el o la nueva ministra de Ambiente en el país. Aún más, no hay seguridad que esa cartera continúe siendo un Ministerio. El presidente electo Javier Milei, aseguró durante su campaña en una entrevista a Radio Mitre que “Medio Ambiente va a ser una Secretaría que dependa de Jefatura de Gabinete”.
“El derecho a un ambiente sano se encuentra consagrado en el artículo 41 de la Constitución Nacional”, contrarrestó Victoria Rocío Laguzzi en diálogo con Nota al Pie. “En función de esto, cualquier gobierno, sin importar su ideología partidaria, deberá velar por garantizar dicho derecho al pueblo argentino”.
De cara a la COP 28, destacó los compromisos que adquirió la nación y que hacen importante su participación en la Conferencia. “Mediante la Ley 27.270 nuestro país ratificó el Acuerdo de París”, recordó. “Asumió un compromiso ante la comunidad internacional de luchar contra el cambio climático y trabajar para alcanzar el objetivo de no superar los 1.5 C de temperatura global”.
También trajo a colación la Ley 27.520 de Presupuestos Mínimos de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático Global, que se promulgó en 2019. “Dicha ley brinda el marco jurídico para la elaboración e implementación de políticas climáticas en todo el territorio nacional”, explicó.
Esas son algunas de las razones por las que desde FARN consideran que no se puede prescindir de un Ministerio de Ambiente. “Consideramos que es fundamental sostener la institucionalidad ambiental existente”, afirmó Laguzzi.
“Es y será clave trabajar de manera coordinada entre la Nación, las provincias, el sector privado y la sociedad para no retroceder en lo alcanzado hasta acá”, compartieron desde la organización que integra.
Y así, “garantizar el cumplimiento de las normas ambientales existentes (como las de Cambio Climático y Bosques), así como dotar de recursos a los planes y estrategias necesarios para transformar el modelo productivo”.