Entre las primeras medidas económicas, anunciadas por Javier Milei, se destaca la derogación de la Ley de Alquileres que rige desde el 2020 y que luego fue reformada por el Congreso de la Nación hace pocas semanas. El proyecto, difundido en los últimos días, busca que los contratos se puedan pactar libremente y abonarse en cualquier moneda.
En el marco de los anuncios para su futuro plan de gobierno, el dirigente de Libertad Avanza, aseguró que “Lo único que ha hecho la Ley de Alquileres es generar daño. Terminó perjudicando a aquellos que pretendía proteger”.
Además, indicó que los contratos podrán ser pactados entre las partes en cualquier moneda: “La libertad monetaria es parte de las cosas en las que queremos avanzar”, remarcó el presidente electo en el balotaje del 19 de noviembre pasado.
La reforma que se introdujo a la normativa, durante el mes de octubre, establece un término de tres años para la duración de los contratos y una actualización de precios cada seis meses bajo la fórmula Casa Propia. Este indicador es un coeficiente, elaborado por el Ministerio Nacional de Desarrollo Territorial y Hábitat, basado en la evolución de los salarios y la inflación.
Los alquileres y la dolarización tan temida
Otro aspecto de la reforma legal, dispone que los contratos deben publicitarse en pesos. Es decir, que la ley 27737 prohíbe publicar los precios de los alquileres en dólares. Cabe recordar que el actual diputado y líder libertario votó en contra del proyecto de modificación de la Ley y pidió su derogación.
Al respecto, Gervasio Muñoz, integrante de Inquilinos agrupados, expresó para Nota al Pie que aquello que intenta Milei con su propuesta “es explícito”. “Que se pueda pagar los alquileres en cualquier moneda. O sea, la dolarización de los alquileres legalizada: lo que hoy sucede de hecho sin lugar a dudas”, subrayó el referente.
En efecto, uno de los temores en torno a la propuesta derogatoria está vinculado a las posibles consecuencias de las declaraciones de Milei. El sector inquilino teme que esos dichos alienten a que las ofertas en pesos de los alquileres pasen directamente a ser expresadas en dólares. En la práctica, la dolarización de alquileres es algo que ya sucede.
La fantasía de la ausencia de toda ley
Para Javier Milei, la norma actual hay que “derogarla y entender que es un contrato entre partes”. De esta manera, el futuro mandatario del país procura volver al sistema que se encontraba vigente hace unos años atrás: sin regulación estatal específica y acuerdos regidos por el Código Civil y Comercial.
Antes de la sanción de la ley y previo al año 2019, los alquileres se establecían por un plazo de dos años y la actualización de los precios se efectuaba cada seis meses. Los ajustes estaban pactados previamente entre propietario e inquilino y luego se los fijaba en el contrato.
Esa ausencia de una normativa específica generaba falta de previsibilidad en el tiempo y una asimetría que sufría la parte más débil: los inquilinos. En consecuencia, la situación demandaba un marco legal que estableciera, entre otras previsiones, métodos de cálculo para los aumentos y una duración mínima de los contratos.
El plan de acción de les inquilines
“Las organizaciones vamos a hacer lo que hicimos siempre: asambleas inquilinas. Vamos a hacer todo lo posible para evitar que en el Congreso derogue la ley”, aseguró Gervasio Muñoz al ser consultado acerca de la postura del colectivo.
Además, añadió que “Sobre todas las cosas, vamos a articular con todas las organizaciones de trabajadores y de trabajadoras que van a ser y que vamos a ser golpeados por el plan económico y político de Javier Milei”.
Ante este escenario, cabe preguntarse si la derogación y la falta de un marco regulatorio puede aportar beneficios para les inquilines. Los millones de personas que necesitan ingresar a una vivienda cuentan con pocos derechos y están obligados a enfrentar los altos precios de los alquileres.
“Creo que la etapa nos obliga a una articulación de todo el campo popular para enfrentar al gobierno de Milei. Pero, sobre todas las cosas para construir una alternativa real al fracaso que va a ser su gobierno”, concluyó el referente de Inquilinos Agrupados.
Mientras tanto, algunos actores que conforman las cámaras inmobiliarias estiman que la derogación propuesta por el espacio de Libertad Avanza puede resultar útil para dinamizar el mercado.
Sin embargo, otras voces pertenecientes a entidades que representan el interés de aquelles que alquilan, afirman que una medida como la que impulsa el libertario va a profundizar la crisis de ingreso a la vivienda, el hacinamiento y el retroceso de los derechos.