Villa Epecuén desde 1920 hasta 1970 con 1.500 habitantes fue auge del turismo termal, recibía 25.000 personas por temporada en su mayoría de un gran poder adquisitivo. Un sitio preferido de todas las personas que concurrían en búsqueda de salud y conocer la Laguna de Epecuén. La misma, se encuentra ubicada en el partido Adolfo Alsina (Provincia de Buenos Aires), a seis horas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Forma parte de la localidad de Carhué (a 8 Km de Epecuén) y reconocida por ser el Mar Muerto argentino debido a la salinidad de sus aguas, lo que hace que se produzca el fenómeno de flotación.
En este paradisíaco lugar todos los hoteles empezaron a tener piscinas termales con agua de la laguna y un gran complejo termal era el sitio más concurrido de la región. En Villa Epecuén se desarrolló un importante polo turístico donde se encontraban: escuelas, jardines de infantes, carnicerías, confiterías, iglesias, sitios para bailar, panaderías, pizzerías, fábrica de alfajores, estaciones de servicios, bancos, restaurantes y espacios recreativos para todas las edades.
En cuanto al complejo termal era imponente y había bañeras individuales y médicos termalistas que controlaban cuánto tiempo les visitantes tenían que estar en el agua termal, así como la correcta temperatura del agua. Además hubo un servicio que ofrecían embarradores en la playa con tratamientos con barro medicina, extraído de la profundidad del lago y que en la actualidad se puede encontrar a personas que hacen este histórico oficio.
La historia dejó a Villa Epecuén en Ruinas
La vida de un excepcional atractivo turístico y comercial, cambió abruptamente un 10 de noviembre de 1985 cuando la ciudad se inundó, perdiendo todo lo que se había edificado. No se registraron muertos pero sin duda mucha gente padeció crisis de depresión y tristeza por tener que abandonar su terruño. La gran mayoría se radicó en la localidad bonaerense de Carhué, cada día está en auge y es visitada por cientos de extranjeros y turistas de diversos rincones de Argentina.
Producto de esa fatal tragedia, solo quedaron las Ruinas de Epecuén, las cuales se pueden visitar y en 2014 fueron declaradas como Patrimonio Cultural de la Provincia de Buenos Aires. Es una atracción para les turistas y lugareños que recorren a pie cada uno de los rincones que quedaron de las diversas casas y construcciones.
Las imágenes son conmovedoras al ver paredes destrozadas, azulejos llenos de humedad, árboles cubiertos por la sal y en medio de todo eso la laguna de Epecuén, esa parte maravillosa de la naturaleza con su esplendor y debajo de sus aguas, gran cantidad de barro terapéutico y medicinal.
Las Ruinas de Villa Epecuén han sido escenario de importantes rodaje de películas, cortometrajes, videos de cantantes, recitales y una tradición deportiva de aventura muy concurrida, la carrera Vuelta Al Lago de Epecuén en su sexta edición se llevará a cabo el próximo domingo 26 de noviembre.
Una muestra con historia
‘Epecuén Infinito’ es la exposición artística que se llevará a cabo el día de hoy a las 19:30, en la Casa de la Cultura en Carhué, situada en la Avenida Mitre 1351 y Urquiza, por el 38° aniversario de su inundación. La Municipalidad de Adolfo Alsina, a través de la Secretaría de Cultura y Educación, hizo posible el evento para todes les turistas y personas interesadas. Se podrá visitar hasta la temporada de verano del 2024.
La misma cuenta con infografías y fotografías de los momentos de esplendor de la Villa a través de décadas e imágenes del avance del agua sobre la zona urbana. Trabajos de recuperación de objetos, tareas de instituciones de bomberos y voluntarios. El público podrá apreciar el pasado y presente de Villa Epecuén, un lugar en el mundo tan atractivo en su esplendor como en su desaparición bajo las aguas del lago y su resurgimiento como Ruinas.