En distintas ocasiones, les legisladores intentaron modificar la actual reglamentación sobre los alquileres habitacionales a nivel país. En este momento, hay dos dictámenes aprobados por alguna de las dos Cámaras. Sin embargo, les congresistas no lograron crear una reforma que beneficie tanto a propietaries como inquilines.
En relación a esto, representantes del rubro inmobiliario de la provincia de Chaco expusieron sus principales puntos de vistas sobre la legislación actual, y las dos posibles reformas.
Los cambios sobre la legislación ya se debatieron en ambas Cámaras, pero los bloques no lograron consensuar por un solo proyecto. De esta forma, Juntos por el Cambio (JxC) y el Frente de Todos (FDT) presentaron sus propias tratativas.
La primera iniciativa fue aprobada en Diputados y modificada por el oficialismo en el Senado, por lo que debió regresar al primer escalón legislativo. Ahora quedará la aprobación de la mayoría del FDT en la Cámara baja para que se oficialice lo dictado por les senadores.
Es preciso remarcar que la medida planteada por JxC consistía en una vigencia de contratos por dos años con actualizaciones hasta cada cuatro meses y tomando un índice de incremento acordado por las partes; es decir, propietario-inquilino.
Por otro lado, el oficialismo en rechazo de su contraparte presentaron un nuevo proyecto. Si bien mantiene ideas planteadas por JxC, modifica lo que sería el tema nodal, los índices de aumentos y los períodos de actualización.
Desde la vereda oficialista, plantean que los contratos sean de 3 años, con un aumento cada seis meses como mínimo y con una actualización según el coeficiente de “Casa Propia”.
Frente a esto, el dueño de Inmobiliaria Caravaca Pazos, Emilio Caravaca Pazos reflexionó sobre los proyectos. “El dictamen de minoría flexibiliza algunos puntos que podrían reactivar y recuperar parte de la oferta, lo cual sería el inicio de un camino a mediano y largo plazo que debería complementarse con créditos hipotecarios y otras herramientas de acceso a la vivienda” comentó en una entrevista con Diario TAG.
Respecto a lo presentado por el oficialismo señaló que tiene coincidencias con lo presentado por la oposición, pero que incluye un índice alejado de la realidad. “Tiene la particularidad de incluir un índice alejado de la variación de salarios utilizada hasta hoy (RIPTE) y de la inflación (IPC) que conforman el actual índice al Contrato de Locación vigente que representa la realidad económica de manera bastante fiel”, argumentó.
“El índice Casa Propia que se propone se encuentra alejado de esos parámetros, y tal como hemos manifestado, todo lo que se imponga que se aleje de la economía real, posiblemente no traiga condiciones favorables en cuanto a la generación de oferta y la distorsión de los precios”, siguió.
José Luis Cramazzi, propietario de Cramazzi Propiedades expuso la diferencia entre los contratos comerciales y los habitacionales. “Cuando interviene el Estado siempre ocurre este tipo de problemas. En ningún momento estamos hablando de las locaciones comerciales porque ahí el Gobierno no se metió a regular nada, entonces no hay ningún problema con los locales comerciales entre las partes”, expresó
En la misma línea, especificó que cuando las partes pueden negociar no hay inconvenientes marcados a la hora de las actualizaciones. “Se arregla entre locador y locatario que es lo que se tendría que hacer. Eso nadie lo dice, pero es una diferencia abismal. Nadie habla o nadie está disconforme con el tema comercial, sí con el tema de viviendas porque la política quiso meter la mano y la metió mal”, explicó el referente del sector.
En sintonía, Gastón Orcola, titular de Estudio Orcola, reflexionó sobre la situación inmobiliaria y explicó que, debido a la baja cantidad de departamentos puesto en alquiler y la gran demanda, los lugares con mejores prestaciones ya se encuentran todos alquilados. A esto se le suma la baja rentabilidad del rubro que hace que les propietarios tomen opciones como el “alquiler temporario” o directamente la venta del inmueble.
Estas dos opciones planteadas reducen la cantidad de alquileres disponibles para nuevos inquilines y a la vez, aquellos que tienen las propiedad, elevan el costo de alquiler inicial para ganarle a la inflación por el primer año, explicaron desde el sector.
“Es importante esto que los propietarios nos dicen: puedo sacar $ 150.000 pesos por un alquiler de dos dormitorios, un lindo departamento, pero el problema es que la propiedad vale más de 90 mil dólares, entonces para el valor de la propiedad es muy baja la renta que deja el alquiler convencional. Ese es el motivo por el cual muchos prefieren venderlo e invertirlo en otra cuestión”, finalizó Orcola.
Esta problemática no es propia de Chaco, sino que también se replica en otras provincias del país. Frente a esto, Adrián Cantero, director de la Asociación de Inquilinos de Corrientes, -que también tiene incidencia en Chaco- argumentó en una entrevista con N9 que “la iniciativa aprobada en Diputados es un gran retroceso, una forma muy superficial de tratar una crisis que tiene una profundidad impresionante”.
En referencia a dicha superficialidad, sostuvo que la misma “aumenta la crisis habitacional que es muy previa a la Ley de Alquileres”. A ello agregó que esta “tiene como principales víctimas a la clase trabajadora, a los jóvenes que no pueden independizarse, a las familias en estado de vulnerabilidad que son básicamente las que alquilan”.
Por último, en un reciente posteo en redes sociales, Cantero expuso: “Es momento de que la clase gobernante deje las excusas y las medias tintas, y tome medidas audaces y decididas, que garanticen el acceso a la vivienda digna en lo inmediato y a futuro por parte de los diez millones de Inquilinos e inquilinas en todo el país”.