Después de que se aprobara en Diputados la modificación del impuesto a las ganancias por parte del Frente de Todos, el oficialismo retomó el proyecto de reducción de la jornada laboral junto a un sector del sindicalismo. Este martes, la Comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara Baja, presidida por la diputada del FdT Vanesa Siley, se reunió para trabajar los siete proyectos presentados sobre las horas laborales.
En Argentina, la jornada laboral legal está fijada en 48 horas semanales como máximo, según la Ley 11.544, legislada en 1929. Al respecto, la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, aseguró que “la Argentina ha quedado muy retrasada”. Pero, con un “planteo que sea escalonado, debería ir reduciéndose y tendiendo a converger con lo que hoy está vigente en el resto de los países”. En este marco, el oficialismo busca una reducción aproximada a 40 horas de trabajo semanales.
A nivel internacional, desde 2015 hay países que comenzaron a implementar por ley la reducción de horas laborales. Particularmente en América Latina, en 2021 Colombia sancionó una ley que redujo la jornada de 48 a 42 horas semanales de forma escalonada hasta el 2026. En abril de este año, Chile sancionó una ley que reduce el máximo legal de 45 a 40 horas semanales de manera escalonada, con la posibilidad de aplicar la modalidad de cuatro días de trabajo y tres libres.
Qué proyectos se trabajaron
La Comisión de Legislación de Trabajo de la Cámara de Diputados trabajó en esta sesión siete proyectos. Cinco de ellos fueron presentados por les diputades oficialistas del Frente de Todos: Hugo Yasky, Claudia Ormachea, Eduardo Valdés, Mónica Litza y Sergio Palazzo. Mientras tanto, los otros dos pertenecen a Nicolás Del Caño, por la Izquierda, y al socialista Enrique Estévez.
Desde el sindicalismo, Yasky propone que la jornada laboral no exceda las 8 horas diarias o las 40 horas semanales, sin la disminución del salario que les trabajadores estén percibiendo en el momento que se fije la nueva ley. Por su parte, Palazzo, secretario de la Bancaria, propone que se mantenga en 8 horas diarias, pero que se trabaje solo cuatro días a la semana.
También desde el oficialismo, Ormachea y Valdés pretenden que la jornada de trabajo se reduzca a 6 horas o 30 horas semanales, al igual que Del Caño en su proyecto. Mientras tanto, Litza y Estévez sostienen que la jornada laboral no debería exceder las 36 horas semanales.
Objetivos de la Comisión de Trabajo
En primer lugar, según informó la Comisión, antes de avanzar en un dictamen de consenso con texto unificado, buscarán impulsar un “diálogo tripartito con las instituciones invitadas a participar”.
De este primer encuentro participaron representantes gremiales, especialistas y la ministra de Trabajo, Kelly Olmos. Además, el acompañamiento de representantes de la Confederación General del Trabajo de la República Argentina (CGT), CTA de los Trabajadores y CTA Autónoma fue fundamental. También fue invitada a la discusión Cristina Faciaben, de la Secretaría Internacional, Cooperación y Migraciones de Comisiones Obreras de España.
Frente a los medios y trabas empresariales, desde los bloques que impulsan la reducción de horas laborales aseguraron que las empresas no se verán afectadas. Según la experiencia internacional, está modificación disminuiría el ausentismo y los accidentes, mientras que aumenta la producción laboral.
Posición del Gobierno y los gremios sobre la jornada laboral
En más de una oportunidad, Kelly Olmos se posicionó a favor de la reducción de la jornada laboral, considerando que debería ser llevada “alrededor de las cuarenta horas” a partir de una disminución gradual.
Además, aseguró que si “progresivamente” pasamos de 48 a 44 horas, luego de 44 a 40 horas, “por lo menos avanzaremos en algo en donde es una de las pocas áreas del mundo laboral en la que Argentina tiene un retroceso importante”.
En este marco, Olmos remarcó qué hay una gran posibilidad de que se logre emitir un despacho de consenso para aprobar la reducción de la jornada laboral. Según indicó, la iniciativa está alcanzado “importantes niveles de acuerdo”.
Por otro lado, en el marco de la conmemoración del Día Internacional de los Trabajadores que se celebra en mayo, la CGT se pronunció a favor de la reducción de la jornada de trabajo semanal, y trataron al actual sistema como “una antigüedad”. Para el gremio es necesario avanzar en su legislación “como medio de generar más empleo y distribuir mejor el beneficio extraordinario del capital”.