La migraña es una de las enfermedades neurológicas más frecuentes del mundo. Una nueva droga, Rimegepant, fue aprobada para su tratamiento por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). La misma demostró ser efectiva para calmar el dolor en los episodios agudos. También contribuye a disminuir la incidencia de futuros ataques.
La medicación se administra por boca y ya está disponible en Argentina. Reduce los días de episodios a la mitad en el 50% de les pacientes que padecen migraña moderada a severa luego de 3 meses de tratamiento.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la migraña es una de las 10 enfermedades médicas que más años perdidos por discapacidad genera. Se estima que en Argentina afecta al 9.5% de la población, lo que representaría más de 5 millones de personas. Se presenta en una relación de 3 mujeres por cada varón. Aunque se estima que un 85% (4,7 millones) tienen acceso a atención médica, solo 1,8 millones contarían con un diagnóstico preciso.
Nuevo tratamiento para la migraña
La nueva medicación disponible está indicada para el tratamiento de personas mayores de 18 años con migraña aguda, con o sin aura. Esto sin importar la cantidad de episodios que presentan al mes. También se prescribe en forma preventiva en adultes con migraña de tipo episódica, es decir, que aparece en hasta 15 días al mes.
Rimegepant es la primera medicación aprobada tanto para el tratamiento del dolor causado por la migraña como para la prevención de los episodios. Con solo una dosis se puede aliviar el dolor a las personas con migraña. En muches pacientes este dolor puede llegar a durar hasta 72 hs. La importancia de esta droga es su efectividad tanto para disminuir la intensidad de los episodios como para prevenirlos.
“La llegada de nuevas medicaciones que entienden el origen genético y biológico de la migraña nos permite que el individuo deje de culparse y de atribuir el dolor a una situación de estrés”, explicó la neuróloga Fiorella Martín Bertuzzi. La dra. es integrante de la Sección Cefaleas del Hospital Italiano de Buenos Aires.
A través de un comunicado, sostuvo que “abre un montón de puertas para tratar a pacientes que estaban desatendidos por falta de alternativas efectivas. Por otro lado, este doble mecanismo de terapia de rescate y a la vez preventiva, representa un antes y un después. Nos alienta a pensar que estamos comenzando a ganarle la batalla a la migraña”.
La migraña, mucho más que un dolor de cabeza
Se cree que la migraña se debe a una actividad cerebral anormal, que puede desencadenarse por múltiples factores. En la mayoría de las personas es un tipo de dolor de cabeza que se manifiesta como dolor agudo sólo de un lado de la cabeza. Se caracteriza por ataques debilitantes que duran de 4 a 72 horas. Los síntomas pueden ser múltiples, como, por ejemplo, dolores de cabeza pulsátiles de intensidad de moderada a severa. Estos dolores pueden estar asociados con náuseas o vómitos. También sensibilidad al sonido (fonofobia) o a la luz (fotofobia).
“Cuando hablamos de migraña nos estamos refiriendo a una enfermedad compleja y en algunos casos invalidante. La persona repentinamente sufre un episodio con un dolor muy intenso y debe cancelar jornadas laborales, académicas, actividades sociales o deportivas. Tiene que tomar medicación, aislarse en reposo y esperar a que los síntomas remitan”, afirmó el dr. Buonanotte en el comunicado. Es profesor titular de Neurología de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Córdoba.
“El impacto en la calidad de vida es enorme. La carga de la enfermedad la ubica como uno de los 3 principales motivos de discapacidad entre los 25 y los 45 años. Es una enfermedad que hace que el paciente pierda muchas horas y muchos días por discapacidad con el correr de los años y en una de las etapas más activas y productivas de su vida”, completó la dra. Martín Bertuzzi.
Cabe aclarar que el aura es el término utilizado para referirse a uno o varios síntomas reversibles, que duran entre 5 y 60 minutos. Aparecen poco antes del inicio del dolor de cabeza junto a otros síntomas como náuseas o fotofobia. Por ejemplo, pueden ser síntomas visuales como alteraciones de la visión en un solo ojo, puntos brillantes, destellos de luz. También sensitivos, como hormigueos y/o adormecimiento de un lado del cuerpo, de la cara o de la lengua. Además pueden ser del lenguaje, con dificultad para expresarse, del movimiento, con debilidad muscular en un lado del cuerpo, y/o vértigo.