Esta semana comienza una etapa clave en el juicio por el crimen de Rafael Nahuel. Para los días 5 y 6 de septiembre, se espera el testimonio de los siete peritos que intervinieron en las diligencias realizadas sobre las armas y proyectiles con las que los prefectos mataron al joven mapuche, en noviembre de 2017. Las audiencias tendrán lugar en el Tribunal Oral Federal de General Roca.
Según informaron, sus testimonios serán claves en las definiciones del proceso judicial porque se expondrán las contradicciones de las tres pericias balísticas hechas durante la instrucción de la causa. En tanto, el primero en declarar será Leonardo Saccomanno, el perito médico que realizó la autopsia. Para las querellas, su declaración testimonial servirá para determinar la ubicación de Rafael al momento de recibir el disparo y la distancia con sus agresores.
Luego se espera que declaren como testigues Roberto Nigris, Karina Uribe y Silvia Bufalini: les tres peritos que participaron de la primera pericia balística. Esta fue la única realizada sobre el proyectil que dio muerte al joven, sin intermediación entre el cuerpo y el microscopio.
Les otres tres peritos citados para esta semana son les responsables de la pericia llevada adelante por Gendarmería. En representación de esta fuerza asistirán Martín Moreno y María Mastreti; de la misma manera que Jorge Delgado lo hará por Prefectura.
¿Qué pasó con Rafael Nahuel?
Rafael Nahuel era un joven que pertenecía a la comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu de Bariloche. Tenía 22 años cuando el 25 de noviembre de 2017 fue asesinado por efectivos del grupo Albatros. El crimen ocurrió dentro del territorio ancestral ubicado en el km 2.006 de la ruta nacional 40, cerca del lago Mascardi, en el Parque Nacional Nahuel Huapi.
Los prefectos acusados por el homicidio son Sergio Guillermo Cavia, Francisco Javier Pintos, Carlos Valentín Sosa, Sergio Damián García y Juan Ramón Obregón. Todos eran miembros de Albatros, la unidad de operaciones especiales que responde a la Prefectura Naval Argentina.
El asesinato ocurrió luego de que los prefectos ingresaran al predio que la comunidad mapuche reclamaba como propio. El objetivo era detener a quienes huyeron a las montañas dos días antes, cuando la Policía Federal y la Prefectura les desalojaron.
Ese 25 de noviembre, les efectivos dispararon primero con marcadores de pintura y después con armas cargadas con balas de plomo. El operativo se dio en el marco de una campaña contra las comunidades mapuches que la entonces ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, fomentaba. Meses antes, ocurrió el asesinato de Santiago Maldonado en manos de miembros de la Gendarmería.
En el territorio se encontraron evidencias que confirmaron que hubo cerca de 130 disparos mortales. Según las pericias, Rafael Nahuel murió de inmediato. El proyectil que lo mató ingresó de atrás hacia adelante y de abajo hacia arriba, por la cadera izquierda, atravesándole varios órganos vitales. En ese mismo episodio de represión, otras cuatro personas resultaron heridas.