Santiago Peña asumió la presidencia de Paraguay tras consagrarse en las elecciones del 30 de abril por la Asociación Nacional Republicana, también conocido como el Partido Colorado (ANR-PC).
El nuevo mandatario sucedió en el cargo a Mario Abdo Benítez y dirigirá los destinos del país hasta el 15 de agosto de 2028, los cinco años que dura el mandato.
Peña se impuso con el 42,74% de los votos sobre Efraín Alegre, proveniente del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), por la coalición Concertación Nacional, que recibió el 27,48% de los sufragios. En tercer lugar quedó Paraguayo Cubas por el Partido Cruzada Nacional (PCN) con el 22,91% de adhesión.
En consecuencia, el pasado martes, desde la explanada del Palacio de López, sede de la Presidencia, Peña dio su primer discurso como mandatario. “El éxito es lograr que todos los paraguayos estén mejor y que el mundo sea testigo del resurgir de un gigante”, expresó.
Asimismo, explicó la posición que se encuentran: “A nivel internacional, tres desafíos globales generan tensiones geopolíticas: acceso al agua, seguridad alimentaria y suficiencia energética”, indicó el mandatario. Peña destacó que “al ser Paraguay una potencia en esos tres grandes temas, estamos llamados a ser protagonistas en el concierto de las naciones”.
En tanto, prometió generar “500.000 nuevos empleos de calidad para atender la demanda de la población y el crecimiento anual de nuevos ingresantes a la fuerza laboral”, según publicó Télam.
Por otra parte, Paraguay es país miembro del Mercado Común del Sur (MERCOSUR) junto a Argentina, Brasil y Uruguay.
En este sentido, se refirió al acuerdo de libre comercio que mantienen con la Unión Europea (UE): “Paraguay seguirá negociando con Bruselas, pero sin comprometer su soberanía, territorio, valores o cultura”, informó la agencia AFP.
Por último, Peña le agradeció al presidente del Partido Colorado, Horacio Cartes, de polémico pasado y acechado por denuncias de corrupción. Entre los presidentes que presenciaron el discurso estuvo Alberto Fernández, además de Luiz Inácio Lula da Silva, de Brasil; Luis Lacalle Pou, de Uruguay; Luis Arce, de Bolivia y Gabriel Boric, de Chile.
Continúa la hegemonía del PC
Las elecciones del 30 de abril coronaron nuevamente a un miembro del Partido Colorado, en este caso a Santiago Peña, quién con 44 años es el mandatario más joven en ejercer el cargo en democracia.
El Partido Colorado es un espacio derechista que ostentó el poder de forma ininterrumpida desde la década del 50 hasta el 2008, cuando Fernando Lugo, del Partido Demócrata Cristiano ganó las elecciones con la Alianza Patriótica para el Cambio.
Pese a ello, Lugo no llegó a completar su mandato de cinco años debido a que en 2012 fue destituido por un polémico juicio político.
Ya en 2013 el PC retomó el poder de la mano de Horacio Cartes, quién es presidente del partido desde enero del 2023. Desde entonces no volvió a gobernar otro espacio: Mario Abdo Benítez entre 2018 y el pasado domingo, Santiago Peña desde ayer hasta 2028.
Peña y su recorrido político
El flamante presidente Santiago Peña es una figura relativamente nueva dentro de la política de Paraguay. El economista de 44 años, con pasado de profesor en universidades, se destacó durante una década en el Banco Central del Paraguay (BCP), donde llegó a ser director del mismo.
Ingresó a la arena política en 2015, aunque en principio estaba afiliado al principal partido opositor del PC, el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA).
Su ingreso al Partido Colorado fue de la mano de Horacio Cartes, quién lo asignó como ministro de Hacienda durante su gobierno desde 2015.
Para 2017, y tras ya adherir al movimiento interno de Cartes, Honor Colorado, Peña se presentó a elecciones internas dentro del PC. En su primer intento perdió ante quién resultaría presidente, Mario Abdo Benítez.
Finalmente, se impondría en las recientes internas ante Arnoldo Wiens, candidato de Benítez ante la imposibilidad de reelección en el sistema democrático paraguayo.
Tras superar las internas, Peña triunfó en las elecciones generales por quince puntos de diferencia frente al opositor Efraín Aguirre, representante del espacio al que en sus inicios supo estar afiliado, el PLRA.
El rol de Cartes en la política y su amistad con Macri
Detrás de Peña se encuentra su mentor político, Cartes, quien además es buen amigo de Mauricio Macri, según citó el propio ex mandatario argentino. El paraguayo es el empresario más rico de su país.
El expresidente Cartes estuvo involucrado en un sinfín de hechos delictivos que nunca se pudieron comprobar a través de la Justicia. Pese a ello, en enero de este año, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos sancionó al empresario y lo catalogó como “corrupto”.
Según publicó el sitio oficial de la Embajada de los Estados Unidos en Paraguay, Cartes, al igual que Hugo Velázquez, vicepresidente de Benítez en el período anterior, fueron parte de una “corrupción desmedida que socava las instituciones democráticas en Paraguay”.
La OFAC también está abocada a Tabacos USA Inc., Bebidas USA Inc., Dominicana Acquisition S.A. y Frigorífico Chajha S.A.E., empresas bajo el control de Cartes.
Según comunicaron, “Cartes incurrió en actos de corrupción antes, durante y después de su mandato como presidente de Paraguay”. También destacaron que “la carrera política de Cartes se basó y continúa dependiendo de medios corruptos para el éxito”.
Además, acusaron al exmandatario de sobornos por intentar que el PC elimine el requisito de estar afiliado durante diez años para postularse como presidente. A su vez, ya como presidente, lo mencionaron en “pago de efectivo a funcionarios a cambio de su lealtad y apoyo”.
También afirmaron que “mantuvo su control sobre la formulación de políticas a través de sobornos mensuales en efectivo, pagados a legisladores leales”, y lo señalan por intentar comprar votos para reformar la constitución que le permitiera postularse para una reelección en 2018.
Entre otras de las causas en las que apareció el nombre del poderoso empresario se encuentra la denominada Lava Jato en Brasil, donde fue acusado del delito de lavado de dinero.