La tan prometida contraofensiva de Ucrania, alimentada por el armamento ofrecido por el Occidente atlantista, se puso en marcha esta semana. De esta manera, el régimen de Kiev, centrado en romper las líneas defensivas rusas tanto Zaporiyia como Donetsk, busca recuperar el terreno perdido en el plano militar.
Sin embargo, desde Moscú aseguraron que los primeros pasos del despliegue ofensivo ucraniano han sido un rotundo fracaso. Sin detalles ofrecidos por Kiev, las autoridades rusas afirmaron que, hasta el momento, la contraofensiva no sólo no cumplió con sus objetivos, sino que también le ha costado significativas bajas a Ucrania.
Las maniobras de Ucrania
A través de Telegram, el Ministerio de Defensa de Rusia señaló que la contraofensiva ucraniana comenzó en la mañana del 4 de junio cuando las fuerzas de Ucrania “lanzaron una ofensiva a gran escala en cinco sectores del frente en dirección al sur de Donetsk”.
En ese marco, de acuerdo al ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, en aquella jornada las fuerzas rusas acabaron con 300 militares, 16 tanques, 26 vehículos blindados e incluso 14 coches del Ejército ucraniano.
Los dos días siguientes las tropas rusas repelieron aún más embates de los militares ucranianos. Tal es así que, hasta el martes, día en el que Shoigú dio los primeros detalles, las pérdidas para Ucrania no hicieron más que aumentar hasta llegar a un total de 3.715 soldados, 52 tanques, 207 vehículos blindados, 134 coches, 5 aviones e, inclusive, 2 helicópteros.
En tanto, este sábado el Ministerio de Defensa de Rusia reveló en un informe que “las fuerzas armadas de Ucrania continuaron los intentos fallidos de realizar operaciones ofensivas en las direcciones del sur de Donetsk y Zaporozhia”.
Según lo detallado por la entidad rusa, sólo en las últimas 24 horas fueron dados de baja 300 militares, 9 tanques, incluidos cuatro Leopard, 11 vehículos de combate de infantería, 14 vehículos blindados de combate, 6 autos, junto a 1 unidad de artillería autopropulsada Caesar.
En este marco, mientras se esperan que los combates se profundicen con el correr de los días, desde Moscú aseguraron que los primeros pasos de la contraofensiva ucraniana fracasaron.
Por su parte, desde Ucrania confían en mostrar alguna victoria la cual le permita que Occidente siga financiando con equipamiento militar a sus fuerzas armadas.
Vladímir Putin se muestra confiado
El viernes, en declaraciones a la prensa, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, se refirió a las maniobras de Ucrania en el frente de batalla. Según indicó el mandatario, en base a lo que indica el uso de las reservas estratégicas de Kiev, “se puede constatar con certeza que la ofensiva ucraniana ha comenzado”.
No obstante, a pesar de aclarar que las tropas ucranianas aún conservan su potencial ofensivo, Putin afirmó que las maniobras “no han alcanzado objetivos en ninguna parte del frente”. En ese sentido, el Jefe de Estado adjudicó el fracaso ucraniano tanto al heroísmo como a la correcta organización de las fuerzas militares rusas.
“En estos días hemos visto pérdidas significativas de las tropas del régimen ucraniano”, aseguró el mandatario ruso.
En ese sentido, Putin detalló que, a pesar de que se sabe que en las operaciones ofensivas las bajas son aproximadamente de tres a uno, en el caso de la contraofensiva de Kiev, las pérdidas superan este indicador clásico.
Por su parte, en una rueda de prensa junto a Justin Trudeau, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, confirmó la contraofensiva, aunque sin brindar demasiados detalles. Sin embargo, en respuesta a Putin, el mandatario ucraniano indicó que los altos mandos militares “están ahora con un estado de ánimo positivo”.