En los últimos días, se dieron a conocer distintas denuncias por abuso sexual a menores de edad. Más allá de los casos puntuales, la alta exposición de los acusados fue fundamental para que los medios de comunicación trataran el tema y tanto famosos como influencers opinaran, aunque no siempre desde la información.
Primero detuvieron a Marcelo Corazza, productor del programa Gran Hermano, por corrupción de menores. A partir de ahí, salieron varios detalles a la luz, incluída la palabra de Lucas Benvenuto quien denunció por abuso sexual al conductor Jey Mammón.
🔴Tener sexo con niñas o niños:
— Amnistía Internacional Argentina (@amnistiaar) March 27, 2023
❌ No es un "tema de la vida privada".
❌ No es una "calentura momentánea".
❌ No "hay dos vidas destruidas".
‼️ Hay un niño o niña víctima y un adulto que comete un delito.
Sin embargo, lejos de informar sobre Educación Sexual o los derechos de las infancias, los programas televisivos se llenaron de palabras como “calentura”; “orientación sexual”, “escándalo”, “vida privada” y “consentimiento en menores”.
Al respecto, en diálogo con Nota al Pie, el psiquiatra y activista Enrique Stola cuestionó que el tema es tratado “de forma inadecuada”. Del mismo modo, criticó que “no se lleva a profesionales” sobre el tema y “no se hacen análisis sociales”.
El problema de la desinformación
Uno de los invitados que circuló por distintos medios fue Roberto Piazza, quien años atrás impulsó una ley para que los delitos por abuso no prescribieran. Sin embargo, aseguró que “en el caso que lo de Jey haya sido una calentura momentánea, son dos vidas destruidas”. Ante esta declaración, Diego Ramos lo cuestionó y dejó en claro que se trata de un delito.
Frente a estos dichos, Stola aclaró que no solo son “incorrectos”, sino que se trata de una “aberración”. También mencionó la falta de preparación de conductores y periodistas.
Al ser consultado sobre la decisión de las productoras televisivas de invitar a personajes como Piazza o Tomas Suller en lugar de a especialistas u organizaciones que trabajen con el tema, Stola trajo un ejemplo relacionado con los abusos en la Fundación Felices los Niños.
El experto recordó que años atrás un conductor decidió entrevistar a Julio César Grassi, cuando ya estaba procesado por el delito de abuso sexual. Ante los cuestionamientos de parte de la audiencia por darle la oportunidad de hablar en lugar de brindarle el espacio a las víctimas, el conductor respondió con un tweet agresivo: “Es el rating pelotuda”.
Para Stola la motivación al momento de llamar personajes famosos o generar titulares con la palabra “escándalo”, está impulsada por el mismo patrón, el de generar rating.
Cabe remarcar que abusar sexualmente de un menor no tiene nada que ver con una “orientación sexual”, ni una “calentura pasajera” ni un “asunto de la vida personal”. Es un delito y está tipificado en el código penal argentino.
Con menores siempre es abuso
Más allá de la mediatización del caso, Stola aseguró que los abusos en las infancias “no son casos raros, ni aislados”. En la misma línea, el especialista detalló que “hay muy pocas denuncias”, ya que solo el 10 o 15% de los casos son denunciados y menos investigados y condenados.
Consultado sobre qué debe quedar en claro al momento de hablar de abuso sexual en las infancias, el psiquiatra mencionó que “es una practica frecuente” y que “muchas veces ocurre en la propia casa”. La mayoría de los casos el agresor es el progenitor, el padrastro, o alguien de su círculo de conocides.
Por último, destacó que “no se debe diferenciar entre pederastia y pedofilia, tampoco mencionar que es una orientacion sexual, esas son formas de defender a los agresores”. En cuanto a cómo se aborda y acompaña el tema, cuestionó que “como sociedad estamos sosteniendo el abuso y después nos escandalizamos”.
— Enrique Stola (@Stolae) March 27, 2023
Por su parte, la abogada Raquel Hermida Leyenda también se refirió al tema. “El delito más habitual en Argentina es el abuso sexual infantil”, afirmó. También hizo hincapié en que les niñes no pueden consentir un vínculo sexual, siempre se trata de un abuso.
Otro tema mencionado fue el de la imprescriptibilidad, la cual supone que un hecho delictivo no puede invalidarse por el paso del tiempo. En Argentina existen dos leyes que amparan a quienes vivieron estas violencias. Sin embargo, y a pesar de dichas normas, estos delitos continúan prescribiendo.
Por un lado, la Ley 26.705 establece la suspensión de los plazos de prescripción hasta que la víctima cumpla 18 años. Por otro, la 27.206, sancionada en 2015, suspende los plazos hasta que habiendo cumplido la mayoría de edad formule por si la denuncia.
La importancia de la ESI
Enrique Stola también destacó a la Educación Sexual Integral como posible salida, y apuntó a quienes se oponen a ella. “Muchas veces las personas que se escandalizan son las mismas que se oponen a la ESI”, sostuvo.
En esa línea, explicó que la educación podría, entre otras cosas, ayudar a les niñes a respetar tanto su cuerpo como el de los demás, y a defenderse. Si bien la ley fue aprobada hace más de 15 años, en muchos lugares aún no se ha puesto en práctica.
Para ello, reclamó que “debería existir la educación sexual integral en todos los colegios, sin importar si son públicos o privados”, en todos los niveles de educación. “En la UBA hay médicos y abogados que no se están formando con perspectiva de género”, cuestionó.
Por otro lado, apuntó contra el Estado. “Ningún gobierno se ha puesto firme, al no producirse la ESI se defiende a los agresores, después se asustan cuando se conocen estos casos”, declaró. Además, mencionó que “es necesario reforzar la perspectiva de género en el Poder Judicial”, ya que “la única ideología de género es la machista”.