Este viernes, Magdalena Espósito Valenti, madre de Lucio Dupuy, y Abigail Páez, su pareja, fueron condenadas por el tribunal de la ciudad de Santa Rosa, La Pampa, a la pena de prisión perpetua por el asesinato del niño de cinco años en noviembre de 2021.
Las mujeres habían sido declaradas culpables del homicidio del chico el pasado 2 de febrero. El Tribunal de Audiencia de Santa Rosa, integrado por Alejandra Ongaro, Andrés Olié y Daniel Sáez Zamora, dio a conocer la pena. No hizo lugar al pedido de la familia de la víctima que solicitó la aplicación del “tiempo indeterminado” como accesoria a la cadena perpetua.
Las palabras del abuelo de Lucio previo a las sentencias
Esta mañana, Ramón Dupuy, el abuelo de Lucio, manifestó: “Esperemos que sea prisión perpetua como todos dicen”, algo que se terminó por confirmar pasado el mediodía.
El abuelo de la víctima habló sobre el pedido de las defensas sobre que la pena a las ya condenadas Magdalena Espósito Valenti y Abigail Páez sea como máximo a 28 años de cárcel y no perpetua: “Yo diría que no hay coherencia para ese pedido. Esperemos que no sea así”.
Por otra parte, sentenció que estos “son días interminables con mucho sufrimiento y muchas ansias” por conocer finalmente la sentencia. Y apuntó contra las acusadas por no estar presentes en el juzgado: “Si ellas cometieron ese delito, deberían afrontar en la cara recibir la sentencia”.
Además, reiteró que ambas acusadas “deberían ser separadas” en el penal, como ellos pidieron desde “desde el día uno”.Por último, cuestionó nuevamente la actuación de la jueza de Familia que dispuso la tenencia de Lucio a su madre y la pareja, y, que actualmente, enfrenta un pedido de juicio político. “A Lucio se le podía haber salvado la vida si la jueza Ana Clara Pérez Ballester no hubiese firmado la sentencia de muerte en el expediente”.
El delito de abuso sexual, la polémica del fallo
Les perites judiciales constataron, en fases tempranas del juicio, que Lucio había sufrido distintos tipos de abusos sexuales antes de ser asesinado. El equipo de fiscales conformado por Walter Martos, Verónica Ferrero, Mónica Rivero y Máximo Paulucci, había acusado a Espósito Valenti y Páez del delito de “abuso sexual gravemente ultrajante con acceso carnal, agravado por haber sido cometido por la ascendiente, con el concurso de dos personas y aprovechando la convivencia con la víctima menor de 18 años, todo como delito continuado; en concurso real con homicidio calificado por ser la ascendiente, por ensañamiento y alevosía”.
Para sorpresa de la querella y la fiscalía, la progenitora de Lucio, Magdalena Espósito Valenti, fue absuelta de este delito. Aunque los demandantes presentaron un recurso para que se revisara este punto, el fallo se mantuvo igual.
Por lo tanto, solo Abigail Páez fue condenada “por la comisión del delito de homicidio doblemente calificado por alevosía y ensañamiento, en concurso real con el delito de abuso sexual con acceso carnal por vía anal, ejecutado con un objeto fálico, agravado por tratarse de la guardadora y por haberse cometido contra un menor de 18 años de edad, aprovechando la situación de convivencia preexistente, como delito continuado”, según especifica la sentencia.
En cambio, se encontró culpable a Magdalena Espósito Valenti de cometer el delito “homicidio triplemente calificado por el vínculo, alevosía y ensañamiento”. Aún así, ambas recibieron la condena de prisión perpetua.
“Es una pena de por vida”
Verónica Ferrero, una de las fiscales que participó del juicio, aclaró que, por más que el tribunal no haya dispuesto la accesoria por tiempo indeterminado, la prisión perpetua impuesta para las condenadas “es una pena de por vida”. Argumentó a la salida del juzgado que debido a la gravedad del delito, las acusadas “no tendrán la posibilidad de pedir la libertad condicional”.
Tras la lectura de la imposición de penas, Ferrero afirmó: “Fiscalía y querella habían pedido también la imposición del artículo 52 que es la accesoria por tiempo indeterminado, pero lo que tienen que saber es que esta prisión perpetua que acaban de disponer los jueces es una pena de por vida, no tienen posibilidad de salir en libertad”.