Esta semana comienza con un nuevo pago, en dos tandas, al Fondo Monetario Internacional por un valor de 1.400 millones de dólares. La primera se lleva adelante durante la jornada de hoy, con una cifra que asciende a 696 millones de dólares. El miércoles será el turno de la segunda tanda de pagos, en la que el Gobierno nacional entregará 710 millones de dólares al FMI. Este cumplimiento le permite al país recibir en marzo un desembolso de más de 5.000 millones de pesos.
Durante la presidencia de Mauricio Macri se contrajo una deuda por 45.000 millones de dólares, que fue refinanciada y se ha estipulado un cronograma de pagos para abonar. Además, el FMI realiza visitas periódicas al país para realizar revisiones sobre el pago. La próxima visita, la número cuatro, será en febrero, por lo que el Gobierno debe abonar lo pautado antes de esa nueva revisión, en la que se reanudarán las conversaciones técnicas.
Según analistes consultados por Télam, el Gobierno argentino cumplió con las obligaciones fijadas para el último trimestre del año con el FMI. Esto fue posible debido a la implementación del «dólar soja II» y a ajustes en las cuentas fiscales. También fue gracias a la decisión de que no haya más financiamiento directo del Banco Central al Tesoro.
La deuda contraída por Macri debe ser abonada en diferentes pagos con fechas de vencimiento. Para este año, la cifra a pagar en total es de unos 19.850 millones de dólares. Con este nuevo pago, en enero se han entregado 2.650 millones de dólares. Cabe destacar que este año el Gobierno tendrá que entregar más dólares que los que ingresarán, que estima en un déficit de 3.400 millones. Esto implica una presión a las reservas del Banco Central. A esto se le suma el cumplimiento de las metas de déficit, reservas y emisión monetaria.
Los pagos del nunca acabar
Dentro de los requerimientos estipulados por el FMI, la Argentina debía terminar el 2022 con una reserva de al menos 5 millones de dólares, un monto que logró superar. Por lo tanto, el Gobierno no necesitará solicitar un “waiver” (perdón) para aprobar la cuarta revisión del Fondo.
Pero las políticas llevadas a cabo para cumplir con la deuda, que llevaron a una elevada inflación, serían cuestionadas por el organismo internacional. Según explicó Claudio Caprarulo, director de Analytica, a Télam, los principales acuerdos se habrían cumplido. Esto incluye las metas de financiamiento monetario al Tesoro, de déficit fiscal primario, de stock de deuda flotante y de acumulación de reservas internacionales.
Para el especialista, «las primeras tres que refieren al ámbito fiscal encauzaron su camino a lograrse a partir del ajuste realizado por el cambio de gestión y la mayor capacidad de rolleo de la deuda en pesos».
«Luego del ajuste de la meta de 500 millones de dólares que se consideraron pertinentes por el mayor gasto en energía producto de la suba de precios internacionales, la meta se habría sobrecumplido por 495 millones de dólares”, explicó Caprarulo. Esto fue “gracias a un fuerte freno sobre las importaciones de la mano de las licencias no automáticas, incentivos de precio a las exportaciones mediante el «dólar soja» y préstamos de libre disponibilidad por parte de organismos internacionales».