Durante el verano, entre otras problemáticas, los perros y gatos pueden sufrir un golpe de calor debido al aumento de la temperatura ambiental. En ocasiones se quedan en patios sin sombra ni ningún otro refugio, o salen a pasear en horas más calurosas y a pleno sol.
También, muchas veces, son dejados dentro de autos, con las ventanillas cerradas y sin aire acondicionado. Todas estas situaciones pueden afectarlos gravemente, por lo que hay que tomar las medidas necesarias para prevenir consecuencias futuras.
El golpe de calor es una condición de salud que puede llegar a ser muy severa e incluso puede ocurrir muy rápidamente, por ejemplo en el término de una hora. Para conocer qué es y cómo evitar el golpe de calor, Nota al Pie dialogó con el veterinario Dr. Leonardo Mauro.
¿Cómo saber si un animal tiene un golpe de calor?
En el golpe de calor todos los sistemas del organismo se ven afectados. El Dr. Mauro explicó que los signos más frecuentes son respiración acelerada, jadeos constantes y temperatura elevada. También aumenta el ritmo cardíaco, puede variar el color de la lengua, así como tener vómitos y diarreas con o sin sangre. Además, pueden aparecer signos de incoordinación, tambaleos, salivación abundante, y síntomas más graves como pérdida del conocimiento, shock y muerte.
Según el entrevistado “los desenlaces fatales pueden existir si no se modifican las condiciones del animal”, quien debe recibir, lo antes posible, “cuidados caseros adecuados, y, en casos más graves, cuidados veterinarios de urgencia”.
Cualquier persona o animal puede sufrir un golpe de calor, pero en los animales es más común que en humanos. “La experiencia indica que en proporción los gatos sufren menos este padecimiento que los perros. Una de las causas es que poseen mejores estrategias que los perros para ubicarse en sitios donde estén menos expuestos al calor”, señaló Mauro.
En este contexto, el profesional destacó que, si se nota un comportamiento raro en perros o gatos, es necesario establecer un nexo con las causas predisponentes de golpe de calor. “Si es un día muy caluroso, se da en un horario en donde hace más calor, el animal no tiene donde resguardarse, lo dejamos encerrado en el auto debajo del sol, etcétera. Eso obviamente es clave para pensar en un golpe de calor”, indicó.
Las dos situaciones más frecuentes en las que se producen golpes de calor son cuando un animal es dejado encerrado dentro de un automóvil sin ventilación y cuando hace ejercicios en día caluroso y húmedo.
Guía de cuidados
Cuando un animal está sufriendo un golpe de calor, en primer lugar hay que llevarlo al lugar más fresco al que se tenga acceso. Al respecto, Mauro recomendó “mojar todo el cuerpo, cabeza, zonas sin pelos como panza y axilas. Podemos aplicar elementos fríos cuidando que no provoquen daño. También podemos darle agua fresca de beber”.
No obstante, el doctor hizo hincapié en que “siempre se debe llevar a un veterinario para que lo revise, aún en casos leves y recuperados, para atender el problema si la situación lo amerita. También para que nos diga si hay alguna enfermedad subyacente que pueda haber predispuesto al animal al golpe de calor, y la forma de cómo podemos modificarla”.
Algunos perros tienen un mayor riesgo de sufrir un golpe de calor como por ejemplo los de edad avanzada, de “nariz chata” o braquicefálicos, como el bulldog. En esta misma línea, corren un peligro más elevado “los que tienen problemas cardíacos, parálisis laríngea, obesidad y colapso traqueal”.
Para prevenir el golpe de calor, el veterinario enumeró una serie de cuidados básicos. “Los animales siempre deben tener agua fresca a disposición, la que se debe renovar varias veces al día. Si está afuera el bebedero debe estar a la sombra”, señaló.
Al mediodía, en las horas pico, en lo posible los animales deben quedar dentro de la casa o, en su defecto, tienen que tener buenos lugares bien ventilados donde protegerse del calor. Respecto del paseo, aconsejó sacarlos a pasear temprano a la mañana o a la noche. Por último, Mauro especificó nunca dejar animales en el coche bajo el sol, ya que la temperatura interior puede subir muchísimo.