Desde la destitución de Pedro Castillo, el 7 de diciembre, por decisión del Congreso Nacional de Perú, la nación vive un complejo presente. Luego, la llegada de Dina Boluarte al poder revolucionó aún más el país. Según la Defensoría del Pueblo, se confirmaron al menos 17 muertes y más de 40 herides en la región de Puno.
En este contexto, Nota al Pie dialogó con Hernando Cevallos Flores, médico, ex congresista y ex ministro de Salud del país. “La decisión de la policía de reprimir es absolutamente irracional, no hay ninguna justificación”, aseguró el entrevistado. Asimismo, ratificó que “la policía usó municiones que generan graves daños”.
Tras una manifestación de más de 2 mil personas en la ciudad de Juliaca, en la provincia de San Román, se registró un elevado saldo de víctimas. El pueblo peruano exige la salida de su presidenta y una renovación institucional integral. “Se solicita la renuncia de Dina Boluarte y el cierre del Congreso en forma inmediata o la renovación de la directiva”, confirmó.
Estos episodios de violencia se cobraron muchas vidas, porque hay al menos 45 muertes en sólo 33 días de gobierno. Por esta razón, se declararon tres días de duelo y varias movilizaciones en todo el país. “El reclamo es para que se convoque a un adelanto de elecciones y una profunda reforma de la constitución”, certificó Cevallos Flores.
Las protestas en el resto del país
La región de Puno es una de las zonas más afectadas por la represión policial y 6 de los 24 departamentos contabilizan cortes de ruta. De hecho, el propio ex ministro de Salud afirmó que “la situación es sumamente inestable, sobre todo en el sur del país, y ya se anunció que hoy empieza una paralización en Cusco, Ayacucho y Arequipa”.
Dentro de las fronteras de Perú, la tensión social es muy fuerte. Las protestas en Ayacucho ya comenzaron y los disturbios se adueñaron de la zona. De acuerdo con el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, el aeropuerto permanecerá cerrado por tiempo indeterminado. Esta situación podría replicarse en toda la nación.
“Muy probablemente esto se va a extender a otras regiones del país, donde ya han habido bloqueos de carreteras”, explicó Cevallos Flores. Sin embargo, el ministerio anunció que el aeropuerto de Cusco sí estará abierto, pese a las noticias falsas que anticiparon un posible cierre.
Las protestas iniciaron con el propósito de certificar el adelanto de las elecciones para este año. Además, se sumó la salida de Boluarte y José William Zapata, presidente del órgano legislativo. “Este Congreso tiene más de un 90% de rechazo por parte de la población”, argumentó el ex congresista.
Por esta razón, el mayor temor del pueblo es la resolución que tomará el Gobierno frente a las próximas manifestaciones. Según el ex ministro de Salud, “hay riesgo de que hoy la represión sea mucho más importante que la de ayer”.
Una fuerte crisis institucional en Perú
El golpe contra el presidente Castillo y la ratificación de Boluarte expuso la grave crisis institucional que vive Perú. A su vez, las decisiones de la nueva mandataria y la represión policial incrementaron la tensión social. El gobierno no tiene el apoyo de su pueblo, que exige una salida inminente.
“Prácticamente estamos hablando de una dictadura militar, porque está clara la presencia de las Fuerzas Armadas en la decisión del Gobierno”, enfatizó Cevallos Flores. Así, el 7 de diciembre se firmó la destitución del presidente, asunción de Boluarte y el establecimiento de un gobierno excepcional con supresión de garantías.
Asimismo, la detención de Castillo complejizó las circunstancias y la población solicita que sea liberado con rapidez. En consecuencia, Alberto Otárola, primer ministro peruano, confirmó que hoy viajará una delegación hacia la zona de Puno para dialogar con les manifestantes.