La provincia de Buenos Aires arrancó el año con la puesta en vigencia de la Ley N° 15.402 de Tolerancia cero. La misma tiene por objetivo sancionar a les conductores que manejen con un grado de alcohol en sangre mayor a 0.
Aunque las provincias de Chaco, Chubut, Córdoba, Entre Ríos, Jujuy, La Rioja, Río Negro, Salta, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Tucumán ya tenían establecidas normas de alcohol cero, vale destacar su implementación en la provincia más grande del país.
En este marco, Nota al Pie dialogó con Mariana Siena, integrante de la ONG rosarina Compromiso Vial, cuyos principios se basan en pensar la seguridad vial más allá de una norma.
Sobre la aplicación de la ley, Siena expresó: “Que la provincia más habitada de nuestro país se exprese y se apegue al mensaje de disociar el acto responsable de conducir con el acto de consumir alcohol, es una medida absolutamente alentadora”.
Según el Servicio Nacional de Seguridad Vial el parque vehicular de la provincia de Buenos Aires representa el 38% de los vehículos y el 28% de las motos que circulan por Argentina. En esta línea, según datos de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), casi 5 millones y medio de bonaerenses tienen la Licencia Nacional de Conducir vigente.
De este modo, en todo el territorio nacional ya son 13 provincias y más de 40 municipios adheridos a la norma de alcohol cero al volante. Esta medida busca reeducar a les conductores, disociar el consumo de alcohol con el manejo de vehículos y lograr un proceso de transformación social y cultural.
Cabe destacar que, según la ANSV, al menos 1 de cada 4 siniestros viales graves son ocasionados por conductores que manejan alcoholizades.
Alcohol Cero, más que una ley
Durante 2021, la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe, fue una de las últimas en implementar la norma. La ordenanza municipal demostró que de a poco y cada vez más, les conductores adhieren a no consumir alcohol si deben manejar.
Por su parte, la Secretaría de Control y Convivencia de la ciudad relató que en los 23.667 controles realizados, sólo dieron positivo 1.700 conductores. Dicha cifra representa el 7%. Como parámetro de la baja significativa, aseguraron que, previo a la sanción, se detectaban por fin de semana un promedio de 30 positivos. Es decir, casi el doble.
En este sentido, Mariana Siena habló de la lucha de muchas ONG que trabajan desde hace años para brindar un contexto social a la cuestión del tránsito. “Alcohol Cero es más que una Ley, es una política de Estado que trae uno de los grandes temas en el tránsito: la responsabilidad individual ante un hecho colectivo como es el tránsito”.
Sobre esto, subrayó que se trata de cambiar el foco de las políticas para entender el tránsito más allá de un tema meramente administrativo. “El tema vial es, ante todo, un tema de derechos; justicia; salud pública; educación; prevención; seguridad social e infraestructura. De allí la administración debe operar sobre ello”, enfatizó.
En referencia a la implementación de la norma, señaló: “Estos cambios culturales llevan su tiempo y demandan de posturas firmes, constantes con el fin de lograr que estas medidas de cuidado se internalicen. Los datos que se van obteniendo son muy esperanzadores”.
Operativo De Sol a Sol: primer verano bajo la normativa
El pasado 27 de diciembre comenzó el Operativo De Sol a Sol realizado por el gobierno bonaerense. El mismo busca garantizar la seguridad vial en las rutas provinciales y en los destinos turísticos. Por ello, desde enero de este año, les conductores deben estar atentes a la nueva ley.
En este sentido, desde la provincia de Buenos Aires informaron que realizarán testeos de alcoholemia con 50 alcoholímetros. Además enfatizaron que en conjunto la Superintendencia de Policía Vial, dependiente de la cartera de Seguridad provincial; la Agencia Nacional de Seguridad Vial; y el personal de Transporte bonaerense buscan generar un tránsito seguro y consciente con 24 puntos operativos de control.
Para Siena educar sobre la responsabilidad al volante se vincula con varias aristas. De este modo, consideró que en este tema complejo se cruzan múltiples intereses sociales. Sin embargo, según la entrevista, una de las formas de trabajar en ello es insistir en la necesidad de separar el acto responsable de conducir un vehículo y el acto de consumir alcohol.
Por último, resaltó la importancia de ”incentivar políticas de cuidado como conductor designado, desarrollar acciones, programas y campañas de prevención de adicciones, controlar la venta de alcohol y trabajar por un transporte público, seguro y eficiente”.