El pasado martes, la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos, realizó un importante anuncio sobre la volatilidad y vulnerabilidad de las criptomonedas durante este año. Con el apoyo de la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal y la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC) advirtieron a los bancos. A través de un comunicado, resaltaron los grandes riesgos.
De este modo, el escrito anticipó que “es muy probable que los principales criptoactivos que se emiten, almacenan o transfieren en una red abierta, pública y/o descentralizada sea incompatible con las prácticas bancarias seguras y sólidas”. En consecuencia, resaltó que se exponen a un alto grado de peligro al trabajar con los “challenger banks”.
Por esta razón, señalaron la necesidad de prestar principal atención ante los cambios constantes en el mercado de criptomonedas. “Es importante que los riesgos vinculados al sector de criptoactivos que no pueden ser atenuados o controlados, no migren hacia el sistema bancario”, ratificaron los organismos.
Asimismo, detallaron que los fraudes y estafas se instalaron como los peligros más comunes durante el último año. “Los riesgos importantes quedaron en evidencia tras las dificultades recientes de varias grandes firmas de criptoactivos”, argumentaron a través del comunicado. Una clara referencia a la firma FTX, que quebró en noviembre y ocasionó grandes pérdidas.
La mirada de la FED
En Washington, Estados Unidos, la FED junto a otros organismos sentaron una postura clara ante la inclusión de criptomonedas en el sistema financiero-bancario. Ante la caída de la exchange FTX, la segunda más importante a nivel mundial, la Reserva Federal afirmó que “las organizaciones bancarias deben ser conscientes».
De esta forma, certificaron una serie de factores que influyen en forma directa en los bancos y su funcionamiento. La posibilidad del riesgo a fraude y estafa entre participantes del sector, incertidumbres legales y divulgaciones inexactas o engañosas por parte de empresas de cripto activos son algunos ejemplos.
Además, el mercado volátil e inestable que representaron las criptomonedas durante el 2022 generaría complejidades en el sistema bancario. En consecuencia, detallaron que “habrá impactos potenciales sobre flujos de depósitos asociados con empresas de cripto activos y susceptibilidad de las monedas estables a correr riesgos”.
El propósito del comunicado conjunto no fue impedir o reducir la prestación de servicios bancarios asociados al uso de esta nueva moneda. Sin embargo, resaltaron que resulta esencial prestar suma atención a los altos y bajos de las cripto. De hecho, la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, determinó que se necesita una “vigilancia más eficiente”.
FTX: Un caso testigo
La plataforma de criptomonedas quebró en noviembre y su fundador, Sam Bankman-Fried, enfrenta un juicio por fraude electrónico y lavado de dinero. El joven afronta hasta ocho cargos por el cierre de su compañía y el congelamiento de 8 mil millones de dólares depositados en la plataforma. No obstante, ayer se declaró inocente ante un tribunal federal de Nueva York.
Este caso puso en tela de juicio el funcionamiento del sistema de criptomonedas y su regulación a nivel mundial. Ante este escenario, las senadoras estadounidenses Elizabeth Warren y Tina Smith, exigieron al presidente de la FED, Jerome Powell, un informe sobre los vínculos entre bancos y la empresa.
La inversión de 11,5 millones de dólares realizada por Alameda Research, firma hermana de FTX, en el banco Moonstone de Washington generó incertidumbre. Y ahora su fundador podría recibir hasta 115 años de cárcel si recibe una condena por todas las acusaciones en su contra. A partir del 2 de octubre, comenzará el juicio.