Lali Espósito volvió de Qatar el pasado miércoles y habló con la prensa. Tras las preguntas de les periodistas, la cantante argentina se refirió al episodio de acoso que vivió en la final del Mundial de Fútbol. Al respecto, sostuvo que hay que repudiar todas las situaciones de este tipo, más allá de su caso puntual por se una persona conocida.
La diva del pop argento viajó al país árabe para cubrir los últimos partidos del Mundial junto a Alejandro Marley. Fue en su programa “Por el Mundo” donde vivió la situación de acoso.
Junto al conductor esperaban frente a la cámara la definición del último penal en los pies de Gonzalo Montiel. Mientras tanto, un hombre que se ubicaba detrás de Lali colocó las manos en su cintura y apoyó su cuerpo sobre el de la cantante desde atrás.
Si bien en el momento el acto pasó desapercibido, les espectadores que luego vieron el show notaron la situación. Además, un hombre llamado Mariano Díaz se atribuyó el hecho en las redes. “Yo apoyé a Lali cuando salimos campeones del mundo”, afirmó; y se jactó: “Se llevó la apoyada de su vida”.
El repudio al desagradable hecho fue viral. Tanto que luego, quien asegura ser el verdadero hombre de la tribuna se comunicó con el programa “Los Ángeles de la Mañana” para desmentir la situación. Justificó el contacto de su cuerpo con la falta de equilibrio al momento de festejar el gol.
Lali VS el acoso
Al retornar a la Argentina, periodistas de diferentes magazines de espectáculos hablaron con Lali Espósito. Ella no quiso darle entidad al acto: “Fue tan groso lo que viví y lo que me pasó con la convocatoria para cantar el himno que no quiero empañar esta situación hablando de eso”.
Sin embargo, aprovechó su lugar de figura pública para hacer una reflexión. “Mirá, mis amigas se suben al bondi para ir a laburar y lamentablemente también les pasa”, puntualizó. En este sentido, agregó: “Acá lo que sucede es que yo soy conocida, entonces llama la atención el hecho”.
“Repudiemos todo lo que vemos todos los días, no solo lo que le hacen a una Lali Espósito en un video viral”, pidió. De esta forma, la estrella del pop argentino volvió a expresar su fuerte militancia contra diversas situaciones que promueven el machismo.
Cabe recordar una de sus últimas declaraciones, en el programa español “El Hormiguero”. Allí, la artista dió cátedra sobre cómo reconocer el acoso. Un hombre se contactó con el ciclo y describió la siguiente situación: “Estoy enamorado de mi vecina Blanca. ¿Qué me recomiendas que haga para atraerla? Me denunció por acoso el año pasado y gané el juicio, por eso no sé qué hacer. Por favor, ayúdame. Solo le envié 18 rosas amarillas y un peluche. Buena onda, Raúl”.
Lali respondió: “Nos regalás a todos en el programa más visto de España el claro ejemplo de lo que es ser un acosador”. A su vez, hizo alusión a la denuncia al decir que el hombre “se jacta de haber ganado el juicio, que no me sorprende para nada que la Justicia no apoye a las mujeres”. Para finalizar, remarcó: “Un ramo de flores no justifica la violencia que es el gesto de insistirle a alguien. Querido Raúl, no es no”.
La artista argentina también muestra una fuerte militancia a favor de los derechos de las disidencias sexuales. En la última Marcha del Orgullo participó en el desfile de una de las carrozas, y allí estrenó su canción “Motiveishon”.
El mundial terminó pero la violencia de género sigue
Si bien en Argentina todo es felicidad por el resultado del seleccionado masculino de fútbol, la violencia no frena. El mismo domingo al culminar el partido, un hombre asesinó a sangre fría a su expareja en Córdoba. Ella regresaba de ver la final del Mundial de Qatar 2022.
Según señaló el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), cuando hay partidos de fútbol, hay picos de violencia de género. Los casos que aumentan son los que se dan en las relaciones de pareja.
Por ejemplo, en Colombia se observó un incremento de un 25% en los registros de violencia doméstica en los días en los que la selección tuvo partidos en el mundial de 2018. En Inglaterra, en los torneos de fútbol de 2002, 2006 y 2010, se identificó un aumento de un 26% en los casos en días de empate o victorias, contra un 38% en días de derrota.
Las causas son varias. El BID resaltó que el deporte en sí no es el problema, sino los comportamientos machistas que circundan al mismo. Esto se agrava por el consumo de alcohol y los patrones de masculinidad hegemónica.
Por eso, es importante mantener la alerta. Ni Lali ni nadie debe sufrir una situación de acoso o violencia de género. Que la alegría de obtener la Copa del Mundo no quite la mirada de las situaciones de fondo.