Un equipo de investigadores de la Universidad Nacional de Córdoba colabora con un programa de investigación internacional para crear nuevos sistemas de bioimágenes que permitan diagnosticar, tratar y prevenir enfermedades. Se trata de Micro4Nano, cuyo eje central son las nanopartículas.
Acerca del proyecto Micro4Nano
En diálogo con Télam, Franco Ambrosioni, integrante del programa, comentó detalles del proyecto. De origen santiagueño, el actual miembro del equipo de investigadores, explicó que el proyecto “está enfocado en la generación de nanoportadores multifuncionales para la microscopía de dos fotones y la administración de fármacos para el control en tiempo real de células y tejidos vivos”.
A su vez, detalló que el mismo desarrolla “nuevos enfoques y métodos para la visualización en 3D de tejidos biológicos, combinando imágenes de especies fluorescentes con información estructural, funcional y química”.
“Básicamente, está enfocado en la creación de nuevos sistemas químicos con utilidad en la obtención y visualización de bioimágenes que pueden ser de utilidad en el diagnóstico, tratamiento y prevención de enfermedades”, indicó sobre el proyecto.
Cabe mencionar que “Micro4Nano” ha sido seleccionado por el Programa Research Innovation Staff Exchange (RISE, por sus siglas en inglés), el cual reúne a especialistas de todo el mundo.
En tanto, el mismo es financiado por la Unión Europea. Esto último con el fin de “promover la colaboración internacional mediante el intercambio de conocimientos e ideas entre la investigación”, detalló Ambrosioni a Télam.
El proyecto durará hasta el 2025 y está conformado, principalmente, por varios países de Europa. Un dato no menor es que Argentina es el único país de América en formar parte del proyecto “Micro4Nano”. En ese marco, la colaboración permite ampliar nuevos conocimientos y especialidades, ya que cada representante aporta lo propio de su país de origen para sumar nuevos métodos al proyecto.
El objetivo: adquirir nuevos conocimientos internacionales
El profesional destacó que el objetivo del programa es que “de los integrantes de nuestro grupo de investigación, todos podamos tener esta experiencia, de poder viajar a otras universidades y colaborar con este proyecto”. En ese sentido, puntualizó que buscan “incorporar nuevas habilidades en campos que por ahí no son los habituales”.
“Por ejemplo, en Córdoba, yo trabajo en el área de la tecnología farmacéutica, tratando de buscar alternativas farmacoterapéuticas para enfermedades desatendidas como la Leishmaniasis”, comentó Abrosini. En tanto, en Polonia, país en el que se desarrolla la investigación, está a cargo del área química orgánica que es “un campo totalmente diferente”.
En ese marco, lo que permite el programa es la amplitud de conocimientos y especialidades. Es decir, que todos los miembros aporten y se nutran del proyecto.
Ambrosioni es uno de los tantos postulados a la beca que, además de entrar en contacto con nuevos conocimientos, también les permite visitar países con escenarios especializados para desarrollar las pruebas.
¿Qué son las nanopartículas?
Las nanopartículas son partículas extremadamente pequeñas e invisibles al ojo humano, es decir, solo pueden ser identificadas por un microscopio. En la actualidad, las mismas se producen de diferentes materiales. En el ámbito farmacéutico, su uso tiene gran potencial como vehículo para transportar fármacos que mejoran los tratamientos.
Gracias a su pequeño tamaño pueden incorporar sustancias que faciliten el reconocimiento de las células y tejidos. Su idea central es mejorar los tratamientos contra el cáncer.
A pesar que la medicina se mantiene en un constante avance, existen ciertas patologías que no han encontrado solución parcial o total de su problema. Por ello, las nanopartículas prometen en el futuro cercano tener respuestas rápidas para los tratamientos de las enfermedades o fácil localización del problema.