Este mes llegó al barrio de Urquiza un divertidísimo musical basado en las memorias del famoso modista Paco Jamandreu. Bajo el nombre Paquito (La cabeza contra el suelo) de igual manera que la autobiografía de quien supo conquistar el corazón de Evita, llegando a ser su amigo íntimo. Juanse Rausch su director, transforma parte de este revelador texto en un show transgresor, mágico y colmado de figuras históricas de mediados del siglo XX. Las funciones son los viernes y sábados de noviembre a las 21 hs. en la Sala Redonda del Centro Cultural 25 de Mayo, Av. Triunvirato 4444, CABA.
A lo largo de la hora y diez que dura el espectáculo, se repasa de manera atrapante entre cuadro y cuadro, la historia de vida del reconocido y vanguardista vestuarista y actor argentino. Como en un nostálgico y dinámico viaje, subrayado de mucho humor y música, enmarcado por momentos amargos y difíciles de la historia de nuestro país. Donde Natalia Casielles la dramaturga de esta exquisita puesta, desarrolla un cuento de elevada creatividad. Al plasmar momentos maravillosos y representativos del entorno del homenajeado artista, con figuras del ambiente artístico y político de entonces. Así dan el presente en escena Azucena Maizani, Fany Navarro, Isabel Sarli y Evita, entre otres.
Una obra de teatro musical dotada de una elegante puesta en escena, muy cuidada a nivel estético. Con una escenografía sencilla pero muy bonita, además de funcional ya que es móvil, creación del dúo de Laura Copertino y Marcos Di Liscia. Además cuenta con un magnífico diseño de luces de Facundo David que brinda calidad a cada escena. Sumado a unos bustos de la figura de Jaumandreu, obras de la mano de Axel Caponi.
Prestigiosas composiciones
Si hay algo que se puede señalar en este musical es la calidad artística de todos. A la hora de llevar a escena un musical basado en “Paquito (La cabeza contra el suelo)”. Una obra de la propia pluma del artista, editada por primera vez en 1975 y reeditada en 2014. Era clave la elección del actor protagonista, ya que no era nada fácil interpretar a Paco Jamandreu. Pero Nicolás Martin con una entrada entre sutil y temerosa va ganando soltura y brillantez durante la trama. Metiéndose al público en el bolsillo con su infinito abanico de muecas y gestos. Así permite resucitar la esencia de esta compleja figura, rescatando a la perfección su excentricidad, su cinismo y su locura.
Otro de los puntos claves del casting era escoger el resto del elenco que pueden acompañar a tal carismático personaje y se desdoblan en múltiples personalidades. Uno de los primeros transgresores del mundo del espectáculo nacional. En este caso son cuatro los que cumplen el reto con alta nota de profesionalidad y talento. Matías López Barrios con audacia se alterna en la piel de todos los amantes que no pudo ni supo mantener a su lado el modista. Paola Medrano encarna a una de las tías, y logra una actuación muy convincente. Pero, eso sí, su momento de brillantez es cuando hace de Azucena Maizani, derrochando desparpajo y singular voz.
Excelencia pura, derroche de talento
Y nos adentramos a los puntos de explosividad escénica, Maiamar Abrodos también cumple muy bien el rol de su otra tía. Pero la magia llega con su Coca Sarli, es un deleite, entre sensual e ingenua. Además se da el permitido de revelar sin tapujos en escena parte de su propia infancia, y revalorizar la sensibilidad y bravura de una persona trans.
Esta obra no sería lo mismo sin la presencia de Lucía Adúriz Bravo. Es difícil de explicar pero cada vez que pisa el escenario encuentra la manera perfecta de transmitir todas sus cualidades: la gracia, la simpatía, y su total poderío vocal. Revela así todo su potencial histriónico y performativo. Y solo por ver su increíble trabajo, merece la pena ver el musical.
Otro detalle a señalar es la música en directo, a cargo del talentoso pianista Sebastián Sonenblum. Quien además también juega un papel interactivo con parte del elenco. Y hasta permite que el protagonista la llame “maestrolo”, juegos de palabras de Paquito con el idioma y el ambiente gay.
Este musical es una verdadera joyita dentro de la cartelera porteña. No solo esta parte de la vida de este extravagante modisto, que vistió a Eva Perón y a las grandes estrellas del cine argentino. Sino también revela sus partes más ocultas, su mundo mordaz y crítico. Imperdible.