Tras varias semanas de celebradas las elecciones en Brasil, el Partido Liberal (PL) presentó una demanda a las autoridades electorales por el resultado de los comicios. En aquella jornada democrática, Luiz Inácio Lula da Silva fue electo para ser el próximo presidente del país. Cabe mencionar que el líder del Partido de los Trabajadores ganó con el 50,09% de los votos.
La demanda para la impugnación de los votos fue ante el Tribunal Superior Electoral (TSE). Desde el Partido Liberal piden que se anulen las votaciones realizadas en urnas electrónicas con modelos antiguos, porque consideran que esos votos son imposibles de auditar.
Argumentos para la impugnación de los votos
Según la autoría contratada por el PL, Jair Bolsonaro habría sido el que reunió más votos con las urnas que tienen un modelo nuevo. Los votos contabilizados en las urnas modernas fueron 51.05%. Es decir, un porcentaje superior al 49,1% que lo llevó a la derrota de una reelección.
La demanda llevada a cabo por Bolsonaro y su partido se focaliza en el 61% de las 577,125 urnas usadas en las elecciones de octubre. Las cuales fueron fabricadas entre 2009 y 2015.
Según el ingeniero Carlos Rocha, responsable de la auditoría realizada por el Partido Liberal, las máquinas de sufragio antiguas tienen indicios de errores graves. Por lo tanto, generan incertidumbre y hacen que no sea posible validar los resultados. En este marco, desde la fracción reclaman que los votos sean anulados.
En una reunión de prensa gestionada por el PL, el ingeniero explicó que la demanda busca “contribuir al fortalecimiento de la democracia” de la mano de un “perfeccionamiento del sistema electoral”.
Por su parte, el abogado que representa al Partido Liberal, Marcelo Bessa, solicitó que “en razón de ese informe técnico, de las inconsistencias y los datos relevantes” se verifique el mal funcionamiento por parte de las autoridades electorales.
En tanto, el presidente del TSE, Alexandre de Moraes, informó que la demanda deberá ser completa, lo que implica que el querellante realice una solicitud por las dos vueltas electorales que se realizaron. Además, comunicó que el partido solo contará con 24 hs para realizar la nueva demanda.
Protestas después de las elecciones
A tres semanas de las elecciones en Brasil, el actual presidente Jair Bolsonaro, continúa sin reconocer su derrota de forma pública.
La misma noche de la jornada electoral los simpatizantes del partido ultraderechista se manifestaron en las calles en apoyo al mandatario. Estos también sostienen que hubo fraude en las elecciones.
En ese clima, y con el correr de los días, las protestas no tardaron en llegar. Los miles de seguidores de Bolsonaro acamparon en las puertas de cuarteles en las ciudades de São Paulo, Brasilia y Río de Janeiro con la exigencia de un golpe de estado. Hasta el momento los militares ignoraron el pedido.
Antecedentes en contra del sistema electoral
El sistema de elecciones en Brasil mediante las urnas electrónicas se realiza desde 1996 y desde aquella época no tuvo problemas. Sin embargo, Jair Bolsonaro cuestionó el sistema en reiteradas ocasiones. Es por eso que el actual presidente defiende que las votaciones se realicen de manera analógica con boletas impresas.
Es tal su descontento con las urnas digitales que durante el 2021 amenazó con no realizar las elecciones si el Congreso Nacional no aprobaba el cambio de sistema. Durante ese año, el Tribunal Supremo Federal investigó a Bolsonaro a raíz de la difusión de noticias falsas que atacaban el actual sistema de voto con urnas electrónicas e instalar que en las elecciones del 2022 habría fraude.