El ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, planteó que su equipo económico se propuso bajar la inflación a 3 puntos de cara al final del primer cuatrimestre de 2023. La cifra del mes de octubre fue de 6,3%, de las más altas del año.
Nota al Pie consultó con Isaac Rudnik, director del Instituto de Investigación Social Económica y Política Ciudadana (ISEPCi), en relación al escenario venidero: la tendencia inflacionaria y los desafíos gremiales de les trabajadores.
Objetivos y herramientas de Sergio Massa
En una entrevista con la radio Futurock, Massa sostuvo: “Es un camino de dos vías que incluye tener una conducta muy firme en la lucha contra la inflación y otro en la recuperación por vía de la paritaria”. Si bien a partir de la asunción del Frente de Todos se retomaron las negociaciones paritarias, la realidad es que no hubo tal recuperación del ingreso.
Según un informe de CIFRA-CTA publicado en noviembre de 2022, en 2015 el Salario Mínimo representaba el 58% de la Canasta Básica Familiar, hoy tan solo el 39%. “Nuestro peor enemigo es la inflación”, sentenció el ministro.
A su vez, señaló que la recuperación en el sector público es una realidad y reconoció que en lo que respecta al sector privado y a monotributistas hay mayores dificultades. El titular de Hacienda confía en una franca recuperación salarial de acuerdo al alza de precios, considerando que proyectan una “merma” inflacionaria en los próximos meses. “Podemos recuperar gran parte de lo perdido en los últimos 5 años”, definió.
Massa también se pronunció sobre la posibilidad de lanzar una suma fija, una herramienta que vienen reclamando los trabajadores movilizados en las calles, sobre todo para los de ingresos más bajos. “Puede ser parte, ni lo descarto ni lo asevero”, planteó el ministro.
De todos modos, aseguró que están evaluando cuál es el mecanismo más apropiado para mejorar el ingreso, teniendo en cuenta el escenario de paritarias.
El escenario de cara a abril para les trabajadores
Por otro lado, Isaac Rudnik desarrolló un planteo contrario al del ministro de Economía. “Por ahora no hay ningún elemento que indique de aquí a los próximos meses que la inflación entre en una tendencia descendente”, cuestionó el director del ISEPCi.
El quiebre en la escalada inflacionaria que comenzó a partir del despliegue del conflicto en Ucrania y su impacto en la inflación internacional parece no haberse detenido en Argentina. Desde aquel entonces, jamás se ubicó por debajo del 5% mensual, cifra que genera un piso del 60% anual, en el mejor de los casos.
Sin embargo, Rudnik refuerza el protagonismo gremial de les trabajadores para combatir el desfavorable escenario salarial. “Tampoco hay elementos para pensar que los trabajadores van a dejar de reclamar aumentos que vayan equiparando la dinámica inflacionaria”, como sucedió con el Sindicato del Neumático.
De hecho, este martes, la Unidad Piquetera se movilizó hasta el Ministerio de Trabajo para presionar por un importante aumento del SMVyM mientras se reúna el Consejo del Salario presidido por Raquel “Kelly” Olmos. Será una manifestación encuadrada en el proceso de lucha que viene desarrollando este espacio, que entre otras cuestiones viene planteando también el congelamiento del precio de los alimentos y las tarifas.
Situación económica y salarial
La deteriorada situación salarial de les trabajadores expresa la incapacidad del Gobierno de revertir los índices negativos que se pronunciaron a partir de 2017 con la gestión de Cambiemos.
La variación interanual del Índice de precios al consumidor (IPC) se ubica en un 88%, pero si la comparamos con la inflación en el rubro alimentos, escala por encima del 100%. Asimismo, el acumulado anual es de 76,6%, 25 puntos por encima de la de 2021 y restando aún dos meses sensibles del año.
Además, el panorama en los últimos años es adverso. Desde 2016 hasta la actualidad, la participación de les trabajadores en el ingreso nacional cayó 6,5 puntos, según un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA).
Durante la gestión macrista, la participación de las empresas creció de forma exponencial en la conformación del Producto Bruto Interno (PBI). La mayor parte de esta caída (4,5%) se dio entre el primer semestre de 2016 y el primer semestre de 2019, mientras que los otros dos puntos se dieron en los últimos tres años durante el gobierno actual.