Tobuna es la primera ejemplar de yaguareté en pisar suelo correntino tras 70 años de extinción. Fue donada por el Bioparque Batán, de Mar del Plata, a la Fundación Rewilding Argentina para formar parte del Proyecto Yaguareté. Su traslado implicó la esperanza de comenzar a repoblar la provincia. Si bien nunca tuvo crías en libertad, su descendencia nacida en cautiverio hoy se está reproduciendo en Iberá, por lo que los genes de Tobuna ya habitan Corrientes.
Para conocer más acerca de la fascinante historia de esta yaguareté tan querida por les correntines, Nota al Pie dialogó con Catalina Mancedo, miembro del Centro Aguará, y con el Dr. Gustavo Solís, veterinario de la Fundación Rewilding Argentina.
Al comenzar con problemas de salud debidos a su avanzada edad, a finales de 2019 fue trasladada al Centro de Conservación Aguará. Allí permanece con cuidados veterinarios a diario para tratar sus patologías. Hace unas semanas empezó a tener problemas para caminar y, luego de varios estudios, detectaron una alteración en su columna. Por ello, la yaguareté será operada en breve y de la cirugía se encargarán veterinarios especializados que viajarán desde Buenos Aires.
De un zoológico a repoblar el Iberá
El traslado de Tobuna desde el Bioparque Batán de Mar del Plata hasta Corrientes significó todo un desafío. Fue la primera yaguareté que se incorporó al proyecto de reintroducción de la especie en Iberá. “Después de evaluar varias opciones, decidimos trasladarla por tierra, en una camioneta, con una caja de transporte especialmente diseñada para el traslado. Contaba con cámara de monitoreo y termómetro, entre otros detalles que harían muy cómodo y seguro su viaje. El traslado llevó unas 18 horas”, explicó el Dr. Solís.
“Elegimos a Tobuna por ser la mejor hembra reproductora que había en el país. La que más descendencia había dejado hasta ese momento. Además, los propietarios del Bioparque Batán fueron los primeros en demostrar interés en sumarse al Proyecto Yaguareté, y así lo hicieron, donando a su mejor hembra de yaguareté”, comentó.
Pero los permisos iniciales llevaron mucho tiempo para poder sumar a Tobuna y Nahuel, los primeros yaguaretés en incorporarse al Proyecto, por lo que ninguno dejó descendencia allí. Sin embargo, Tania, hija de Tobuna y también proveniente del Bioparque Batán, fue la primera yaguareté en reproducirse en Iberá.
Los únicos yaguaretés en edad reproductiva que se encuentran en cautiverio en distintas instituciones zoológicas de Argentina son todos descendientes de Tobuna. “En el Parque Iberá ya tiene nietos y bisnietos. Y, en el Parque Nacional Impenetrable, se encuentra Tania con sus crías y Mabareté, hija de Tania y nieta de Tobuna, con dos crías también. Próximamente, Mbareté y sus crías vendrán a Iberá”, señaló con esperanza el Dr. Solís.
El estado de salud de Tobuna
Tobuna es una yaguareté de 22 años que padece problemas de salud propios de un animal geronte, aunque su estado general es bueno. Hace unas semanas comenzó con problemas para caminar, por lo que se le realizaron varios estudios para determinar la causa.
En la resonancia magnética “se observó que tiene estenosis del espacio intervertebral T2-T3 con engrosamiento del ligamento amarillo. Esta es una lesión crónica focalizada, que genera compresión y dolor en la columna. Este tipo de contusión ocasiona debilidad en los miembros posteriores”, informó el parte médico.
En ese sentido, para poder revertir esta situación “la opción es realizarle una cirugía de columna llamada ‘hemilaminectomía’. Es una intervención poco invasiva y con un post quirúrgico sencillo, que mejoraría su cuadro y le generaría mucho alivio”, detalló el documento.
Tobuna permanece en un recinto diseñado exclusivamente como un santuario de yaguareté. Es amplio, con muchas instalaciones y enriquecimientos para que pueda estar activa. “Ahora está en su área de manejo, un recinto interno porque no puede movilizarse mucho”, indicó Mancedo. A través de una técnica de entrenamiento, se la puede medicar o aplicar inyecciones sin necesidad de someterla a ningún estrés.
“Ella siempre esperaba las visitas en el Centro, espléndida en su recinto. Es como la gran vedette, la gente siempre va en busca de verla. Ahora no abrimos al público, ya que estamos cerrados momentáneamente, pero si estuviésemos abiertos tampoco estaría en exhibición hasta que se recupere o mejore las condiciones en las que se encuentra”, agregó.
El emblema de Corrientes
“Ahora está respondiendo bien a los tratamientos y es la mimada del Centro. Hacemos todo lo que está a nuestro alcance, pero somos conscientes de su edad. Trataremos siempre de darle bienestar y calidad de vida hasta su último momento”, expresó Mancedo.
“Sabemos lo que Tobuna representa para la provincia de Corrientes. En las publicaciones se puede ver los mensajes de la gente, que muchos no tuvieron la posibilidad de verla, pero la sienten parte de nuestro patrimonio natural y eso a nosotros nos incentiva para hacer todo para lograr la mejor calidad de vida”, concluyó.