Un día como hoy, pero de 1967, Racing Club tocó el cielo con las manos al levantar la Copa Intercontinental. En aquella ocasión, la Academia derrotó por 1-0 al Celtic en el Estadio Centenario de Montevideo, con el gol de Juan Carlos Cárdenas. De esta manera se convirtió en el primer equipo argentino en conquistar el mundo. Sin embargo, la final fue un tanto polémica; hubo cinco expulsados y el encuentro fue denominado “La Batalla de Montevideo”.
En las primeras ocho ediciones de la Copa Intercontinental, Avellaneda representó a Argentina en tres oportunidades. Pero, mientras Independiente cayó en ambas finales frente al Inter en 1964 y 1965; Racing se adueñó del título. En lo que fue su única participación en la copa del mundo, la Academia se dio el gusto de lo que no había logrado en aquel momento su clásico rival.
De la mano de Juan José Pizzuti, Racing es uno de los 30 equipos que tiene en su vitrina la copa del mundo. Pero esta huella gigante que data de hace 55 años, lo inmortalizó como el primer club argentino en levantar este trofeo.
El año dorado de Racing
Sin dudas el año 1967, fue la época dorada en la historia de Racing, ya que logró traer a casa la Copa Libertadores y la Intercontinental. No obstante, antes de conseguir sus dos primeros títulos internacionales, la Academia sufrió una dura goleada por 3-0 en la final del Metropolitano frente a Estudiantes.
El equipo dirigido por Osvaldo de Zubeldia logró su primer título en la era profesional, y posteriormente dominó el fútbol sudamericano. La victoria cortó con la hegemonía de los gigantes, ya que desde el inicio del profesionalismo, solo fueron campeones los cinco considerados grandes.
Dentro de ese reinado, la Academia fue el tercero que más títulos conquistó, con un total de seis. Solo fue superado por River y Boca, quienes lograron 13 y 10 campeonatos, respectivamente.
Luego de consagrarse subcampeón en el fútbol argentino, Racing disputó por primera, y única vez, la final de la Copa Libertadores. Su rival fue Nacional de Montevideo, quien había perdido frente a Independiente en 1964 y también buscaba su primer título.
En Avellaneda y en Montevideo la Academia y el Bolso igualaron sin goles. De este modo, se disputó un tercer duelo en Santiago de Chile para definir al campeón de América. Racing se adueñó del título al imponerse por 2-1 con los goles de Joao Cardoso y de Norberto Raffo.
Los dirigidos por Pizzuti, lograron su primer título a nivel internacional y disputaron por única vez la Copa Intercontinental. Meses después, se cosió la estrella dorada en su camiseta.
La primera vez que la copa se quedó en Argentina
Tras ganar la Copa Libertadores, Racing buscaba levantar la copa del mundo. Del otro lado, estaba el Celtic, quien logró por única ocasión adueñarse de la Copa de Europa, hoy Champions League, tras vencer en la final al Inter.
El formato de la Intercontinental consistía en un ida y vuelta. En el caso de que ambos equipos ganaran un partido cada uno, se definiría en un tercer encuentro, sin importar la cantidad de goles anotados. Otra camino para llegar al partido de desempate era si los ambos duelos terminaban igualados.
Los escoceses se adelantaron en la serie al imponerse en Glasgow por 1-0 con gol de Billy McNeill. Racing tenía la obligación de ganar en casa para esforzar un tercer partido y evitar que Celtic festeje en el Cilindro de Avellaneda. Los europeos tomaron ventaja con el penal de Tommy Gemmell. Pero la Academia remontó con los gritos de Norberto Santiago Raffo y de Juan Carlos Cárdenas.
Con un partido ganado por lado, se disputó un tercer duelo para conocer al nuevo campeón del mundo. Este tuvo como escenario en Montevideo, apenas tres días después de la revancha en Avellaneda. Cabe destacar que en el Estadio Centenario, Racing jugó una de las finales de la Copa Libertadores frente a Nacional.
El Chango Cárdenas que fue héroe al marcar el 2-1 en Avellaneda para igualar la serie, también lo fue en Uruguay. Allí, el jugador marcó el 1-0 definitivo con un golazo de mitad de cancha, a los 11 minutos del segundo tiempo.
El encuentro tuvo a cinco expulsados y fue titulado como “La Batalla de Montevideo”. Entre los jugadores de Racing que se vieron obligados a abandonar el campo se encontraban: Alfio Basile y Juan Carlos Rulli. Mientras, por el lado del Celtic fueron sancionados Bobby Lennox, Jimmy Johnstone y John Hughes.