La misión Crew-5, perteneciente a SpaceX, debió postergarse por un error en el comienzo del operativo espacial realizado en Florida, Estados Unidos. El 5 de octubre un cabello humano se alojó en el sello del pestillo del cohete e impidió el despegue. Sin embargo, tras retirarlo y limpiar la zona afectada, la tripulación partió hacia la Estación Espacial Internacional (ISS).
El hallazgo de este pelo representó un grave problema por el posible ingreso de aire al Falcon 9. Les tripulantes del Crew Dragon Endurance debieron abandonar la nave y se demoró el despegue pactado en horas del mediodía. Tras el contratiempo, les científiques de la empresa de Elon Musk ingresaron al cohete para inspeccionarlo.
Luego de dar con la hebra de cabello dentro del pestillo, debieron analizar posibles fallas, limpiar la zona y sellar la escotilla. “Algo como el cabello, dependiendo de su tamaño y orientación, puede resultar en una vía de fuga”, explicó John Posey; quien se desempeña como ingeniero principal de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) para Crew Dragon.
Por último, les especialistas rectificaron este inconveniente, detectado a los 90 minutos de la cuenta regresiva, y la misión Crew-5 inició el despegue, evitando un grave problema en el operativo espacial.
De acuerdo con la NASA, lápices, polvo, herramientas de trabajo o clips representan un serio riesgo porque podrían causar la filtración de aire al cohete.
Houston, tenemos un problema
La detección de este pelo humano significó la definición de un FOD (Foreign Object Debris), un término utilizado para el hallazgo de objetos extraños. De forma inmediata, detuvieron el vuelo, les cuatro tripulantes descendieron de la nave y comenzó la revisión del cohete. Para ello, reabrieron la escotilla, inspeccionaron la zona y luego, la sellaron.
Una vez resuelto el problema, la misión Crew-5 se realizó con normalidad y finalizó con éxito. Nicole Aunapu Mann, Josh Cassada, Koichi Wakata y Anna Kikina, astronautas del Falcon 9, arribaron a la Estación Espacial Internacional. Les compañeres de viaje permanecerán por 150 días en el laboratorio orbital, a 420 kilómetros de la Tierra.
De este modo, el vuelo logró su cometido, pero vivió una situación compleja antes del despegue. “Todos hemos sido entrenados desde el primer día cuando tratamos con sistemas de vuelo para tener cuidado con los FOD”, detalló Tom Simon, subgerente de naves espaciales del Centro Espacial Jonhson de la NASA.
La misión Crew-5 determinó que esta es la quinta tripulación a la ISS realizada en una nave de SpaceX. La empresa de cohetes comenzó a enviar astronautas al espacio desde mayo de 2020.
SpaceX y una misión con contratiempos
El despegue del Falcon 9 partió desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA, en el Cabo Cañaveral, en Florida. El cohete con nueve motores y su cápsula, Crew Dragon, llegaron a una órbita preliminar. Tras 150 días, regresará a la Tierra y aterrizará en una nave de recuperación de drones que flota en el mar.
La NASA acordó con SpaceX 14 misiones tripuladas a la ISS por un monto cercano a los 4.900 millones de dólares. Crew-5 fue la última bajo este contrato y tuvo una particularidad. Anna Kikina, de 38 años, es la única mujer astronauta activa de la agencia espacial rusa Roscosmos en protagonizar un despegue en Estados Unidos.
A través de un acuerdo entre la firma estadounidense y esta compañía de Rusia, la tripulante intercambió su rol con una colega de la NASA. El pacto sellado en julio permitió que la ocupante del sitio de Kikina viajará a la ISS en el vuelo ruso Soyuz.