Las carteleras de cine y los catálogos de las plataformas de streaming se llenan de producciones de terror con Halloween al final del calendario de octubre. En este sentido, Marvel Studios, con el lanzamiento del primer especial de Noche de Brujas en Disney+, se adentra en el territorio escabroso del género horror con Werewolf by Night; un licántropo interpretado por Gael García Bernal.
Conocido por sus vínculos con Moon Knight, Werewolf by Night, alias Jack Russell, es un personaje que no se trató mucho en los últimos años; ni en los cómics ni en la pantalla. Pero ahora está de regreso en una nueva aventura dirigida por el famoso compositor Michael Giacchino.
En sus 52 minutos de duración, Werewolf by Night brinda a la audiencia una noche completa en Bloodstone Manor. La misma, se tornará agitada con la reunión de un grupo de monstruos que competirán por la posesión de una gema rojo rubí con poderes sobrenaturales.
Una experiencia inmersiva en el terror de la década dorada del cine
Werewolf by Night es una producción filmada casi integramente en blanco y negro. Giacchino se basó en las primeras épocas del cine de horror para este especial, cuando Universal Pictures y Hammer Films tenían el control sobre el género terror. Así traslada a la audiencia a los ‘40, cuando los Monstruos Clásicos dominaban la pantalla.
Werewolf by Night renuncia al tono de los programas recientes de Marvel a favor de sumergirse en el misterio y brinda acción sin ningún tipo de preparación. Desde la primera escena, se le advierte al público que olvide sus expectativas, porque los superhéroes no se atreven a entrar en el mundo del horror.
La partitura, como era de esperar, evoca el apogeo del cine de terror en los 50, con Giacchino en una doble función: director y compositor. Esto último, es parte de lo que hace que este especial sea tan convincente en su ejecución, ya que se preocupa más por ofrecer una experiencia inmersiva, que entrelazar la pieza con el Universo Cinematográfico de Marvel (MCU).
La experiencia con el MCU de los coguionistas Heather Quinn y Peter Cameron, quienes trabajaron en los guiones de Hawkeye y Moon Knight, respectivamente, se materializa en el humor del programa, uno que Bernal y su coprotagonista Laura Donnelly llevan sin sentir como una carga.
Las performances actorales brillan
El personaje de Donnelly parece haber sido arrancado de las páginas de un viejo guion de Hammer, con la misma naturaleza de femme fatale y un aura de misterio que las heroínas del estudio.
Si bien se anuncia que es la heredera de una familia de locos cazadores de monstruos, no se ahonda en su pasado. El misterio de su personaje impulsa su oscura motivación para tomar Bloodstone Manor por sí misma.
Bernal, mientras tanto, se destaca sin importar lo que haga. De esta manera, encaja en la visión de Giacchino como si estuviera destinado al papel. El actor imbuye a Jack Russell de magnetismo, aún cuando tiene poco tiempo frente a la pantalla en su propio especial.
Un cambio en la fórmula marvelita
Más allá de lo mencionado antes, es el momento en el que se transforma lo que realmente vende al personaje. Es ahí donde queda plasmado que Werewolf by Night se preocupa más por evocar historias del pasado que en formar parte de la factoría marvelita. Giacchino renuncia al CGI para construir un licántropo de arte de carne y hueso, al estilo de la vieja escuela.
En este sentido, un fanático del MCU quizás pueda sentirse desorientado al sintonizar Werewolf by Night. El especial no tiene casi nada que ver con el universo construido por Marvel Studios y que hizo que recaudara miles de millones de dólares, cosechando seguidores por todo el mundo. Sin embargo, esta adición es un cambio de fórmula bienvenido, aunque inquietante.
Giacchino y sus guionistas se apoyaron en los estilos que influenciaron el cine de género en el pasado, cuando las películas debían ceñirse al Código Hays, para contar una historia lo suficientemente sangrienta sin tener que mostrar demasiada sangre.
Algunos de los elementos más tradicionales de Marvel no encajan muy bien con el lado horroroso de las cosas, el director logra revivir la estética del terror clásico, llevando a Marvel hacia el cine de género de una manera que solo fue anticipada por Sam Raimi en Doctor Strange in the Multiverse of Madness (2022).
Con este especial, Marvel Studios apaga las luces y comienza a bajar las oscuras escaleras del sótano del terror, algo que puede ser problemático si no se sabe manejar.