Noé Jitrik permanecía internado en Colombia tras sufrir un accidente cerebrovascular, y este jueves falleció en dicho país a los 94 años. Además de ser escritor, fue ensayista, crítico literario y ejerció la docencia en universidades de Argentina; Francia; Colombia; Estados Unidos; Puerto Rico; Uruguay; Chile y México. De esta manera, se convirtió en uno de los intelectuales más respetados de las letras argentinas.
Nacido el 23 de enero de 1928 en la ciudad de Rivera, partido bonaerense de Adolfo Alsina, en el límite con La Pampa, dedicó su vida a la literatura. Fue autor de obras como La fisura mayor, Llamar antes de entrar, Citas de un día, Long Beach, El río de las terneras atadas, Terminal , Tercera fuente y este año lanzó Un círculo.
En una entrevista brindada a la agencia de noticias Télam, habló sobre la escritura y expresó: “Escribir a los 30 o 40 años y luego pasando los 90 no tiene demasiada diferencia, salvo que ahora, porque la mano y la cabeza se han ejercitado, todo, cuando ha empezado, fluye más mansamente, antes era Iguazú, ahora el Delta”.
Los adioses a Noé
Mempo Giardinelli, amigo de Noé y escritor chaqueño, confirmó la noticia: “Acaba de morir Noé Jitrik, cofundador del MA y compañero y maestro mío de más de cuatro décadas, camarada del exilio e irrepetible intelectual argentino”.
Por su parte, la municipalidad que lo vio nacer despidió a su ciudadano ilustre con la leyenda “su obra y legado trascenderán por siempre”.
En las redes sociales escritores, libreros y editoriales comienzan a manifestar la tristeza por su partida. Ejemplo de ello fue el mensaje del Fondo de Cultura Económico Argentina, editorial que, entre otras cosas, lo describió como un “docente generoso”. Desde este espacio brindaron un “abrazo apretado” a sus cercanos y recordaron uno de sus poemas: “Adioses”.