Aquellas viviendas de la Ciudad de Buenos Aires que permanezcan sin ocupar por más de 90 días consecutivos podrían ingresar de forma obligatoria a un sistema de alquiler. El proyecto de ley N° 2563-P-2022 propone la prohibición de viviendas vacías por más de 90 días y la creación del Sistema de Alquiler Protegido. Fue presentado por la asociación Inquilinos Agrupados ante la Legislatura porteña. Debido al déficit habitacional y de inmuebles para la renta, esta propuesta busca brindar una solución.
Inquilinos Agrupados, una asociación que representa y defiende los derechos de quienes alquilan, lanzará una campaña de recolección de firmas para darle respaldo a la iniciativa. Con un mínimo de 38.000 adhesiones de vecines, les diputades estarán obligades a debatir el proyecto.
Viviendas vacías en alquiler
“Hemos decidido presentar un proyecto que soluciona en 90 días el problema de oferta de vivienda en la Ciudad. Toda ciudad moderna regula la vivienda vacía y es hora de que aquí también suceda”, explicó Gervasio Muñoz, titular de Inquilinos Agrupados.
Además, señaló que “cuando el mercado plantea que la demanda supera la oferta; nada dice de las 340.000 viviendas vacías, siendo esta la causa fundamental junto con el alquiler turístico”.
La “Mesa de Estudio de Viviendas Vacías”, impulsada por el Instituto de la Vivienda de la Ciudad, elaboró un informe en el que indican que casi una de cada diez viviendas de CABA permanece sin ocupar. La mayoría se encuentra en los barrios de Puerto Madero; Palermo y Recoleta.
La vivienda ociosa es “aquella que registre durante el lapso de tres meses consumos de servicios eléctricos por debajo de los 50 kwh/mes”. También incluye a las que “no hayan registrado su contrato de alquiler”.
En ese sentido, la propuesta presentada establece que “toda vivienda vacía por más de 90 días ingrese de forma obligatoria al Sistema de Alquiler Protegido”. Este sistema será administrado por el Instituto de la Vivienda de la Ciudad, que fijará un precio de renta equivalente al 1% del valor fiscal de la propiedad. En el caso de las viviendas con herencia vacante, deberán ingresar al Sistema de Alquiler Protegido.
Mucha demanda y poca oferta
Según el Censo de 2010 había 341.000 viviendas vacías. Esta cifra ubica a la ciudad primera en el ranking de cantidad de viviendas vacías por habitante.
Desde Inquilinos Agrupados explican que en la Ciudad de Buenos Aires se vive un fuerte proceso de inquilinización. En 2021 había un 22,1%; mientras que en la actualidad ese porcentaje asciende a más del 40%. Esto representa alrededor de 1 millón de personas que se encuentran alquilando unas 500 mil propiedades. Por otro lado, en los últimos 10 años se construyeron en forma récord más de 150 mil viviendas.
Siendo que hay una vivienda cada dos personas, aún son miles les vecines que no pueden alquilar. En la Ciudad existe una gran desproporción: alta cantidad de inquilines; bajo número de propietaries; y concentración de los bienes inmuebles.
Inquilinos Agrupados denuncia que esta situación generó una creciente asimetría en el poder de negociación de los distintos actores del mercado de alquileres. Mientras por un lado se encuentran los propietarios y las inmobiliarias que ajustan precios y condiciones para sus ganancias; por el otro lado están las familias que deben alquilar.
En este juego disparejo, como lo definen, quienes quieran alquilar en CABA deberán ahorrar entre 3 y 5 meses de alquiler para iniciar el contrato de locación. “Un mes de alquiler por adelantado; entre uno y dos meses de depósito; y gastos administrativos. Hasta hace muy poco pagaban uno o dos meses de comisión inmobiliaria”, indican. Además, si le inquiline no tiene garante, debe contar con dos meses más para contratar un seguro de caución.
Más allá de todo este tiempo destinado al ahorro, otro requisito es presentar recibo de sueldo en blanco. En muchos casos, no se aceptan niños. Y como si fuera poco, hay inquilines que son obligades a “pagar expensas extraordinarias; impuestos que gravan la propiedad; ajustes de precio que no respetan la ley de alquileres; se hacen cargo de todos los arreglos de la vivienda; y pagan tasas de interés usurarias por mora”.