Desde el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, el Jefe del Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, presentó este miércoles el calendario del año lectivo 2023. En ese marco, la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) presentó un comunicado institucional donde expresa el rechazo a esta decisión de fijar el calendario escolar “sin acuerdo del Consejo Federal de Educación”.
Durante su discurso, Larreta anunció que les alumnes de la Ciudad cursarán 192 días de clases; doce días más de los 180 obligatorios. “En 2023, en la Ciudad, las clases van a empezar el 27 de febrero y terminarán el 22 de diciembre. Tanto inicial como primaria y secundaria van a respetar ese mismo cronograma educativo”, informó el Jefe de Gobierno desde el Barrio Padre Mugica.
Además, acusan a la administración gubernamental de “utilizar a la educación y el hostigamiento a la docencia como eje central de su campaña política”.
La crítica de UTE y los gremios docentes
Uno de los puntos más controversiales que produjo la reacción de los gremios se trata del traslado de las jornadas de capacitación docente. Para lograr la extensión de clases, la gestión del Gobierno de la Ciudad reducirá los cursos de Espacios para la Mejora Institucional (EMI) durante los días de semana.
Normalmente, se suspendían las clases en días hábiles para dar lugar a estos cursos. Sin embargo, Larreta explicó que, durante el año próximo, tres de las cinco jornadas previstas se llevarán a cabo durante los días sábados. “Esta decisión implica una inversión adicional de la Ciudad para afrontar el pago extra a todos los docentes”, anunció.
En tanto, desde el sindicato UTE expresaron su oposición al traslado de los EMI por fuera del horario laboral. Además, es cuestionado por la docencia, ya que va en contra de lo establecido en el Estatuto docente, “que plantea que estos espacios se realizan en servicio”.
“Desde UTE rechazamos y repudiamos este nuevo ataque del Gobierno de la Ciudad que pretende desconocer el Estatuto y los derechos conquistados por lxs docentes, y seguiremos luchando en defensa de la capacitación gratuita y en servicio”, indicaron en un comunicado de prensa.
Previo a los anuncios del miércoles, los sindicatos habían solicitado al Ministerio de Educación porteño que revea la decisión de “recuperar” el día de clases del feriado decretado luego del atentado a Cristina Fernández de Kirchner. El día previsto para la “recuperación” está fijado para el próximo 31 de octubre, fecha en la cual se iba a dictar la próxima jornada EMI.
Política educativa y campaña electoral
La aspiración presidencial del Jefe de Gobierno de la Ciudad se apoya en gran medida en la promoción mediática de sus decisiones en educación. El discurso que privilegia la necesidad de asistencia y recuperación de las clases de estudiantes se repite en sus habituales conferencias de prensa.
Una de las estrategias para destacar su gestión educativa es haber perpetrado dispositivos previstos para el período de pandemia y trasladarlos a la nueva fase pos pandémica. Muchas de estas medidas fueron contradictorias y continúan siendo polémicas.
Por otro lado, las internas que tiene que sortear Larreta dentro de su propio espacio político obligan al aspirante a la presidencia a exhibir una imagen eficiente de su gestión frente a sus rivales.
La realidad de la educación muestra otra cara
En contraste con esta voluntad de la administración actual respecto de la educación; se registran una serie de paradojas y contradicciones que tuvieron lugar en los últimos tiempos. El antecedente más reciente fue la reforma del Estatuto docente, en mayo de 2022, rechazada por la mayoría de los trabajadores de la educación.
En dicha oportunidad, la gestión metropolitana de gobierno protagonizó una represión en contra de los docentes, quienes realizaron una masiva marcha para expresar su disconformidad. Además, en ese momento, la comunidad educativa logró concretar un contundente paro general en las escuelas de CABA.
Los grises dentro de la política educativa de Larreta
Entre otros aspectos contradictorios de la política educativa del actual gobierno se pueden mencionar tanto la falta de vacantes para miles de estudiantes. Así como también días de clases suspendidos por el mismo gobierno a causa de la desinversión en infraestructura escolar. Hubo casos de falta de calefacción, agua o caída de techo y mampostería.
Las denuncias sobre la insuficiencia calórica y mal estado de las viandas del sistema alimentario escolar es otro de los puntos cuestionados. Hace un mes, trascendió el fallecimiento de una alumna menor de edad. En este caso, el Equipo de Orientación Escolar solicitó para la niña un refuerzo calórico por razones de salud. La atención alimentaria nunca fue suministrada.
Cabe recordar, que un buen número de trabajadores de la educación murieron a causa de contraer el Covid-19. El factor más influyente que favoreció estas muertes fue la decisión del Ministerio de Educación; a cargo de Soledad Acuña, del retorno a la presencialidad cuando aún el programa de vacunación era insuficiente.