Esta semana, llegó al catálogo de Disney+ la primera versión del clásico cuento infantil Las aventuras de Pinocho, de Carlo Collodi. Una remake casi calcada de la película animada que Disney lanzó en 1940; pero adaptada a la tecnología moderna y con detalles más atractivos para captar a las nuevas generaciones.
Bajo la dirección de Robert Zemeckis, y con la participación de Tom Hanks, esta versión suma cuadros musicales y pequeños giros interesantes a la ya tan conocida trama. No obstante, su final abierto, que busca invitar a la reflexión, ha dejado insatisfecho a una fracción importante del público. Parece que la moda de las remakes solo vale si aportan algo interesante. Mientras, la platea calienta motores para la tan esperada versión de Guillermo Del Toro. Con un estreno estimado para fin de año, el director prometió explorar un lado más oscuro y fiel del personaje.
Desde que su historia original, escrita por Collodi en 1882, Pinocho ha tenido muchas versiones. Sin embargo, ninguna hasta ahora ha logrado superar la original de Disney de 1940. Esta no solo resultó ser la primera película de animación en ganar un Oscar; sino que también significó un triunfo fue doble al ganar otra estatuilla por mejor canción, la inolvidable “When You Wish Upon a Star (La estrella Azul)”. En la nueva adaptación, Cynthia Erivo, además de dar vida al Hada Azul, reversiona este clásico en inglés. En español, la podemos escuchar en la voz de la carismática Chanel, la cantante española participante de la última edición de Eurovisión.
La difícil tarea de ser humano
La versión de Zemeckis transita mejor este camino que los demás remakes. La versión se mantiene bastante fiel a lo que se vio en dibujos animados. Aunque esta vez Pinocho, en la voz de Benjamin Evan Ainsworth, no es tan rebelde sino más conciliador y reflexivo.
Su viaje de travesuras lo ayudará a aprender a ser valiente, sincero y desinteresado. El nuevo film está narrado por Pepito Grillo, interpretado por Joseph Gordon-Levitt, quien se interna en una relojería de un pueblo italiano para buscar refugio. Esta pertenece a Geppetto (Tom Hanks), un talentoso carpintero, maestro en la construcción de relojes cucú. Desde ese punto de partida la historia ya es conocida. Un detalle a destacar son los relojes colgados que, si se presta atención, representan escenas algo oscuras de otros personajes de Disney y Pixar; como Simba, Roger Rabbit, el vaquero Woody o Maléfica.
Marcando diferencias
En Pinocho 2022, el personaje principal está muy bien logrado al llevarse a la versión digitalizada. La marioneta de madera tallada es muy expresiva y les animadores incorporaron movimientos de lo más simpáticos. También se destacan otros personajes, como el gatito Fígaro, compañero del viejo carpintero, y la pequeña pececita dorada Cleo. La primera gran diferencia es la aparición del Hada Azul, quien anima a la marioneta. Esta vez, el Hada no tiene el aspecto principesco tradicional de sus antecesoras, sino que es una mujer negra, robusta y de pelo muy corto.
Otros cambios a mencionar son el zorro Honest John, en la voz de Keegan-Michael Key; y el empresario bigotudo llamado Stromboli, en la voz de Giuseppe Battiston. Estos personajes pierden su lado más cruel, para sumar comicidad y hasta cierta complicidad. El personaje de Geppetto presenta cambios en su esencia e historia. En esta versión ha perdido a su esposa y construye los relojes en homenaje a ella.
Para hacer más espectacular la acción en el film hay escenas y personajes más exagerados, los chiques que visitan la Isla del Placer son totalmente malvados y rompen todas las reglas y éticas morales. Fuman, se emborrachan y rompen símbolos culturales e instrumentos musicales, antes de hacer su transformación en burros. La ballena, que se traga a los personajes principales en la clásica escena, ahora es un monstruo marino. Una especie de cetáceo mutante con tentáculos, hija de Godzilla.
Un soundtrack renovado
Un detalle que puede resultar desconcertante es que las clásicas canciones, como «Give a Little Whistle» y «Little Wooden Head», han sido completamente desechadas. Para reemplazarlas, se incluyeron cuatro nuevas melodías bastante sencillas, a cargo de Alan Silvestri y Glen Ballard. Cada una de ellas detiene el ritmo de la trama. Al principio, Hanks se encarga de dos de estos cuadros musicales. Es el recurso al que Geppetto recurre para contar su trágico pasado y las pérdidas que lo han llevado a una vida de soledad.
Por suerte, hacia el final las canciones mejoran y se convierten en unos números musicales mucho más ágiles. La nueva cara de Pinocho tiene con qué encantar a todas las edades; es una película de buena estética y diseño de producción, con un final adaptado a las nuevas generaciones. Por el momento, sin embargo, ninguna versión logra superar a la clásica de 1940.