Bolivia y Chile inauguraron una nueva etapa en sus relaciones bilaterales. Ambos pueblos pactaron un objetivo común en la ciudad de La Paz, en abril de 2021. Por medio de un comunicado conjunto, se informó que esta reactivación bilateral fue consensuada por les cancilleres Antonia Urrejola (Chile) y Rogelio Mayta (Bolivia).
El comunicado fue difundido por el Vicecanciller de Bolivia, Freddy Mamani. Esto se produjo luego de su reunión con el Cónsul General de Chile, Fernando Velasco, el último lunes. Ambos diplomáticos tuvieron un encuentro con la finalidad de avanzar en las metas acordadas entre los mandatarios nacionales Luis Arce y Gabriel Boric.
La reactivación de la Hoja de Ruta entre ambos países es de vital importancia para el comercio y las inversiones; así como también para el desarrollo socioeconómico de las dos partes involucradas. Tanto Mamani como Velasco expresaron, tras su reunión, la necesidad de dialogar.
Una historia de confrontaciones
El acercamiento de las dos carteras diplomáticas fue llamado como “conversaciones en materia de Complementación Económica”. La relación entre Chile y Bolivia había quedado en tensión debido al juicio internacional por la salida al mar que reclamaba el segundo país. Y que quedó a cargo del arbitrio de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya.
Durante octubre de 2018, la corte internacional falló contra Bolivia. Y determinó que Chile no tenía obligación de honrar sus compromisos para negociar una salida soberana al Pacífico para su país vecino. Más tarde, durante el Gobierno de Evo Morales en el 2013, Bolivia presentó una demanda por la misma cuestión marítima.
El actual presidente boliviano Luis Arce reafirmó, en un discurso oficial, que “el derecho al Mar de Bolivia, es un derecho irrenunciable». Esta afirmación se sustenta sobre el ineludible hecho histórico de la Guerra del Pacífico desarrollado en el siglo XIX (1879). En este enfrentamiento bélico, Bolivia perdió, a manos de Chile, 120 mil kilómetros cuadrados de territorio, con un recorrido de más de 100 kilómetros de costa marítima.
A pesar de estas tensiones entre ambos pueblos, los gobiernos de los dos países consideraron necesario iniciar una nueva relación diplomática con el objetivo de conseguir beneficios. La llegada del presidente chileno Gabriel Boric facilitó un nuevo escenario de diálogo.
Sin embargo, el origen del acuerdo con vistas a la normalización de las relaciones bilaterales se remonta al último período del ex presidente Sebastián Piñera tras un lapso de confrontaciones entre ambas partes.
Se cierra un ciclo de enfrentamientos
Pocos días atrás, el Viceministro de Comercio Exterior e Integración de Bolivia, Benjamín Blanco, declaró que, con el nuevo presidente electo de Chile, Gabriel Boric se espera una mejor aproximación entre ambas naciones. Tanto Boric como Arce proceden de un espacio político de centro izquierda.
Blanco destacó la necesidad de lograr acuerdos con Chile para eliminar el contrabando que se genera en el puerto de Iquique (región de Tarapacá, en la costa norte chilena y frente al Pacífico). “Requerimos el apoyo de Chile, necesitamos de la voluntad política para luchar contra el contrabando», afirmó el funcionario boliviano.
Otro aspecto que puede lograr vías de resolución es facilitar el libre tránsito en el puerto de Arica (dársenas chilenas situadas a 2 mil kilómetros al norte de Santiago). Dicha zona portuaria viene sufriendo varios obstáculos en los últimos años. Estas son las áreas de interés que afectan, especialmente, al comercio boliviano.
Cabe destacar que estas demandas son fundamentales y estratégicas para el intercambio internacional de Bolivia, Por el océano Pacífico, Bolivia, mayormente exporta e importa por los puertos de Arica, Iquique y Antofagasta, en Chile; y por Ilo y Matarani, en Perú.