El pasado martes, Twitter demandó a Elon Musk para obligarlo a cumplir su oferta de adquisición de la empresa. El empresario había cancelado el acuerdo el viernes anterior por declaraciones “engañosas” de la red social.
La demanda de Twitter
La compañía señaló que el magnate, después de firmar un acuerdo vinculante de fusión, “se niega a cumplir con sus obligaciones con la empresa y sus accionistas porque el acuerdo que firmó ya no sirve a sus intereses personales”.
En ese sentido, la demanda, que fue presentada en los tribunales de Delaware, Estados Unidos, apunta a obligar al empresario a cumplir con su compromiso de pagar 54,20 dólares por cada acción de la compañía.
Además, en el documento se responsabiliza a Musk por una “larga lista” de violaciones de lo pactado “empañando” su negocio y provocando, entre otros problemas, que el precio de sus acciones se desplome.
“Derecho de abandonar el acuerdo de adquisición”
El viernes pasado, el CEO de Tesla anunció su decisión de cancelar la compra de la red social, que había puesto en suspenso en mayo. Según afirmó una carta que les abogades del magnate enviaron con copia a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), “el señor Musk ejerce (el) derecho de terminar el acuerdo de adquisición y abandona la transacción”.
En este sentido, Musk justificó el rompimiento del acuerdo diciendo que Twitter hizo declaraciones “engañosas” en sus negociaciones al “no proporcionar todas las informaciones solicitadas sobre el número de cuentas falsas en la plataforma”.
Asimismo, indicó que el despido de importantes empleades de alto nivel era equivalente a la ruptura de su compromiso de “mantener sustancialmente intactos los componentes materiales de la actual organización de negocio”.
La cita en septiembre en los tribunales de Delaware
La demanda de Twitter marca el comienzo de lo que podría ser una batalla judicial prolongada. Les expertes legales deben debatir, principalmente, si el conflicto de las cuentas falsas que plantea Musk es suficiente para permitir que el empresario abandone el contrato.
Cabe destacar que, en el acuerdo original firmado entre las partes, existe un compromiso de una indemnización en caso de no cumplir el acuerdo. La misma puede llegar a 1.000 millones de dólares, bajo ciertas circunstancias.
Además, en el acuerdo de fusión también se incluye una disposición de desempeño específica que habilita a Twitter a obligar a Musk a consumar el contrato. Para esto, la compañía debe demostrar que no violó los términos del acuerdo de compra y que el magnate rompió el pacto al retirarse.
Por su parte, la red social ya contrató a la poderosa firma de abogades de fusiones y adquisiciones Wachtell, Lipton, Rosen & Katzla para ser representada en la batalla legal. Además, comunicó a su personal que solicitó al tribunal que el caso sea escuchado de manera expedita, en septiembre próximo.
Las idas y vueltas de Elon Musk con la red social
No es la primera vez que Elon Musk se sienta a negociar con les empresaries de la red social. De hecho, el magnate ya es dueño mayoritario de Twitter, tras adquirir el 9,2% de las acciones en abril de este año.
Asimismo, a finales de ese mismo mes, el hombre rankeado por la revista Forbes como el “más rico del mundo”, anunció la compra de la compañía por 44 mil millones de dólares. Sin embargo, semanas después, afirmó que el acuerdo quedaba temporalmente en “suspenso”.
En esa oportunidad, Musk dijo que no iba a seguir adelante con el acuerdo hasta que se demostrara el porcentaje de cuentas falsas que aseguraba tener Twitter. Según detalló en un tuit, la red social señaló tener 5% de usuarios de bots mientras que para el empresario se trataría de una cifra cuatro veces más alta.
Cabe recordar que instituciones sin fines de lucro, lideradas por Accountable Tech, se han manifestado en contra de la adquisición de Twitter por parte de Elon Musk. En ese sentido, han impulsado el hashtag #Stopthedeal.