La semana comenzó convulsionada en Estados Unidos. El lunes 27 encontraron un camión abandonado con 50 migrantes fallecidos en el estado de Texas. Sucedió en una zona de muy poco tránsito, en cercanía a una vía de tren en el suroeste de San Antonio. El sitio se ubica a unos 250 km de la frontera entre Estados Unidos y México, por lo que ambos países están involucrados en la investigación.
Sobre el perturbador hallazgo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio detalles e informó de los cuerpos. “Hasta ahora son 50 los fallecidos. 22 de México; 7 de Guatemala; 2 de Honduras y 19 todavía sin información sobre su nacionalidad”, explicó el mandatario. Por otro lado, otras 16 personas fueron transportadas a hospitales cercanos del área con lesiones vinculadas al calor.
De antemano se habían informado solo 46 personas fallecidas encontradas en el remolque del camión, pero luego la cifra pasó a 50. Dos personas perdieron la vida en el hospital, mientras que las 48 restantes en el lugar. Aún no se determinó de manera concreta el origen del camión y su posible ruta, ni cuánto tiempo estuvieron muertas las personas en su interior. Por su parte, el conductor del vehículo abandonado logró huir minutos antes de que llegara la policía al sitio.
En relación al hecho, el canciller de México, Marcelo Ebrard, confirmó que el tráiler tenía placas de Estados Unidos “superpuestas, para circular sin revisión”. “Muy probable, autoría de tratantes”, sostuvo sobre el motivo de la matrícula. Además, agregó en un tuit que las víctimas restantes aún están por ser identificadas y que México se incorpora a las indagatorias que se realizan en EEUU”.
Una escena de horror
El jefe de la Policía de San Antonio, William McManus, contó cómo fue la secuencia del hallazgo durante una rueda de prensa. “Un trabajador de uno de los edificios aquí atrás escuchó un grito de ayuda. Salió a investigar, encontró un remolque con las puertas entreabiertas”, contó. “Las abrió para mirar y encontró varias personas fallecidas adentro”, detalló.
En la misma línea, también agregó que hay tres personas detenidas, pero sin determinar aún que estén conectadas en lo acontecido.
Por su parte, el jefe del Departamento de Bomberos de San Antonio, Charles Hood, afirmó el motivo por el cual las personas migrantes fallecieron. “Murieron de agotamiento y exceso de calor dentro del camión, no tenían aire acondicionado”, sostuvo al respecto.
Además, indicó que las víctimas estaban “calientes al tacto”. Los sobrevivientes no parecían tener acceso a agua. Además, estaban demasiado débiles como para salir del camión por su cuenta. Las temperaturas de la zona de San Antonio rondaban entre los 32° y 37° el lunes, según el Servicio Meteorológico Nacional.
Por otro lado, expresó que “las edades de los inmigrantes varían, pero no hay niños”. A su vez, un guardia de seguridad en un depósito de madera cercano, Edward Reyna, contó sus sensaciones al llegar a su turno nocturno.
Sostuvo que ya ha perdido la cuenta de las veces que ha visto a inmigrantes saltar el tren que pasa a un lado de la escena del incidente. “Pensé que tarde o temprano alguien saldría lastimado. Los carteles que los traen no se preocupan por ellos”, aseveró en diálogo con la cadena BBC.
Les migrantes, una moneda corriente
Los hechos de inmigración son cada vez más comunes en Estados Unidos. Abarcan todo un tema político y polémico que no tiene freno. El año pasado se detuvieron a un número récord de inmigrantes indocumentados que cruzaban al país desde México a través de rutas peligrosas e inseguras.
Las principales razones para realizar una transición ilegal es huir de la pobreza y violencia que hay en América Central.
Incluso, muches de les inmigrantes pagan sumas exorbitantes a traficantes de personas para que los hagan cruzar la frontera. En los últimos años han sucedido hechos similares de migrantes que perdieron la vida en sus travesías. Sin embargo, ninguno fue tan masivo como el descubierto el lunes.
En 2017, diez migrantes fueron encontrados dentro de un camión con remolque sin vida detrás de una tienda Wal-Mart al sur de la ciudad.
El área sur de San Antonio es un trayecto con solo dos carreteras principales que unen la ciudad con los pueblos fronterizos de Texas. Las comunidades rurales en su mayoría, algún que otro depósito de chatarra y un pequeño cúmulo de vecindarios de la zona permiten que un camión pase desapercibido con facilidad.
Al respecto, el reportero local de KENS5, Matt Houston, confirmó que por el momento se trata de un incidente de contrabando de personas. Además, sostuvo que “sería el más mortífero de su tipo en la historia de Estados Unidos”.
Por su parte, el gobernador de Texas, Greg Abbott, responsabilizó al presidente estadounidense, Joe Biden, por las muertes. Las calificó como “resultado de sus letales políticas de fronteras abiertas”.
Incluso el propio alcalde de San Antonio, Ron Nirenberg, dio su postura con lo sucedido. “Es una tragedia. Son 46 personas que tenían familias y buscaban una mejor vida”, explicó al respecto. Además, tildó el incidente como una “horrible tragedia humana”. Por último, aseguró que el incidente es investigado por las autoridades federales.
La postura del presidente
Frente a lo sucedido en San Antonio, Joe Biden remarcó que el hallazgo de los cuerpos en el camión es “horripilante y desgarrador”. También afirmó su postura para con la necesidad de perseguir a las redes criminales de tráfico de personas.
“Explotar a personas vulnerables con fines de lucro es vergonzoso, al igual que la grandilocuencia política en torno a la tragedia”, confirmó el mandatario.
En su comunicado, subrayó: “Mi administración seguirá haciendo todo lo posible para impedir que los contrabandistas y traficantes se aprovechen de las personas”.
A su vez, sostuvo: “Este incidente subraya la necesidad de perseguir la multimillonaria industria del contrabando criminal que provoca demasiadas muertes inocentes”.
“En Los Ángeles, hace dos semanas, anuncié que Estados Unidos ha puesto en marcha una campaña de lucha contra el contrabando”, explicó sobre su labor al respecto.
Además, Biden dijo que es “la primera en su clase con nuestros socios regionales. En los tres primeros meses, hemos realizado más de 2400 detenciones”. Y concluyó que “esta labor no hará sino intensificarse en los próximos meses”.