En la actualidad, hay casi 150 casos en el mundo, según reportó la Organización Mundial de la Salud (OMS). Por ello, la preocupación por posibles nuevos contagios. Sin embargo, de acuerdo con el organismo, es una enfermedad predecible. Ahora bien, las fake news sobre la viruela del mono corren aún más rápido. En las redes sociales, les usuaries aseguran que se trata de un agente “nuevo” y que hay registros en México. En consecuencia, en Nota al Pie repasamos ambas desinformaciones analizadas por AFP Factual.
Por un lado, la viruela del mono es una enfermedad existente en humanos desde 1970, cuando se halló por primera vez en la República Democrática del Congo. Además, se observó en varios países más desde aquella fecha. No obstante, la OMS asegura que “es prevenible en un 85% gracias a la vacuna antivariólica”, pero “es una enfermedad rara”. De este modo, la Organización analiza de cerca este virus, aunque observa que el contagio entre humanos es limitado.
Por otra parte, hace algunos días la Dirección General de Epidemiología de México certificó que aún no se registran casos de este tipo. El anuncio se debe a que, a través de redes sociales, circuló una falsa información que indicaba la detección del primer caso en el país. Sin embargo, la Secretaría de Salud y AFP Factual confirmaron que se trata de una fake news.
En este sentido, en Nota al Pie explicamos la revisión realizada por este medio sobre las principales mentiras que circulan sobre la viruela del mono.
¿Es una enfermedad nueva?
Según AFP Factual, en las redes sociales se compartieron más de 1.600 publicaciones en referencia a la existencia de un “nuevo” virus. Ahora bien, esta enfermedad se detectó en 1958 en una colonia de monos y en 1970 en humanos. Este segundo tipo ocurrió en Congo, pero registró varias infecciones desde entonces en diversos territorios.
De acuerdo con la OMS, sus primeras apariciones fueron en el centro y occidente de la selva tropical de África. En particular, en países como Camerún, Costa de Marfil, Gabón, Liberia, Nigeria y Sierra Leona todos en seres humanos. Para 2003, se registraron 47 casos en Estados Unidos y, antes de 2022, también hubo brotes en Reino Unido, Israel y Singapur.
En este sentido, AFP Factual halló casi 2.000 publicaciones que aseguran la aparición del primer caso en Estados Unidos el 21 de julio de 2021. Pero en 2003 se detectó un caso de viruela del mono en el país ubicado en Norteamérica. Más tarde, se registraron seis cuadros semejantes en Reino Unido, uno en Israel y uno en Singapur.
Sin embargo, la tasa de letalidad es de entre 1 a 10% y, en general, afecta a niñes y jóvenes. Asimismo, la OMS asegura que es una “enfermedad rara”, cuyos síntomas principales son fiebre; dolor de cabeza; inflamación de ganglios linfáticos; dolores musculares y falta de energía.
¿Hay casos en México?
La OMS confirmó que hay casi 131 casos de viruela del mono y unos 106 casos sospechosos, pero ninguno en México. Ahora bien, en Twitter surgió un anuncio falso que aseguraba la aparición del primer caso en la Ciudad de México. En este tweet, el medio afirmó que la Dirección General de Epidemiología había lanzado este comunicado.
De forma inmediata, la Secretaría de Salud de México desmintió esta información y certificó que se trataba de un tweet falso. Por lo tanto, no existió tal caso en el Hospital General de Xoco. Asimismo, el Info CDMX News aseguró que este virus recibe el nombre de “peste del arcoíris” y que predomina en hombres homosexuales. No obstante, esto es completamente falso y así lo confirmó la Secretaría.
A su vez, AFP anunció que no existe un caso de este tipo en la capital del país y certificó que la imagen no representa la viruela del mono. Esta fotografía trata de un paciente español con una importante erupción, internado en el Hospital Universitario de Madrid.
Además, el hombre afectado aún no tenía la confirmación si se trataba de la viruela del mono, pero su foto recorrió el mundo en un instante. Como consecuencia, el medio creó una falsa alarma sobre una enfermedad que aún no impactó sobre México, aunque afecta a otros países. No obstante, dado su posibilidad de predecir el avance, resulta complejo que pueda transformarse en una pandemia.