Mind Race es un experimento a nivel global que demuestra el impacto que genera la inactividad física para la salud mental. El mismo fue realizado a deportistas regulares que suspendieron sus rutinas normales de ejercicios por una semana. El proyecto estuvo a cargo de la compañía global de calzado deportivo ASICS.
Por medio de la prueba se vio reflejado el estado mental que presentaron les participantes. El mismo era similar al de una semana de sueño interrumpido, al igual que el nivel de ansiedad aumentó al 23%. Sin embargo, para estimular a la mente de manera positiva se necesitan 15 minutos y 9 segundos de actividad física diaria.
Otros aspectos que disminuyeron fueron la confianza un 20%, la positividad un 16%, los niveles de energía un 23% y la capacidad para enfrentar el estrés un 22%. Por lo tanto, se destaca la importancia del ejercicio físico ya que el estado emocional y cognitivo se ven afectados.
Dicho proyecto, también se encargó de monitorear a les participantes cuando volvieron a sus actividades físicas de rutina para analizar el comportamiento. En ese sentido, se observó una mejora inmediata del estado mental, lo que significa que se pueden revertir de forma rápida los efectos negativos que se producen al no realizar ejercicios físicos.
La actividad física y la mente
En diálogo con Nota Al Pie, la psicóloga especializada en Deporte, Daniela Boschini expresó: “ubico a la actividad física como una gran aliada de la salud mental”. Debido a que es una herramienta necesaria para prevenir “trastornos mentales como la depresión o la ansiedad”.
“Tiene un impacto profundamente positivo en la salud psicológica, al mejorar la autoestima, la resistencia al estrés, fomentar las relaciones interpersonales, reducir el aislamiento social que tienen ciertos estilos de vida y combatir el sedentarismo”, resaltó la licenciada Boschini.
Por esta razón indicó que, al realizar actividad física, también se pone en práctica la actividad mental y eso mejora el bienestar de una persona. Dado que con la mente sana se puede “afrontar los desafíos y los cambios del día a día con equilibrio”.
En referencia al estudio Mind Race, la licenciada expuso que los desniveles que se produjo en la inactividad se deben a un “desequilibrio en el estado de armonía”. Por lo que “se podría inferir que la inactividad puede producir un incremento de la ansiedad alterando, entre otras cosas, el sueño y el descanso”.
“Cuando practicamos ejercicio físico ponemos nuestra atención en la tarea y, como consecuencia, nos ayuda a distraernos y dejar de pensar en nuestras preocupaciones. En algunas ocasiones el deporte puede contribuir a gestionar mejor las emociones negativas como la ira, ya que nos puede ayudar a desahogarnos” explicó la especialista en psicología del deporte.
El ejercicio físico y el estado de ánimo
De esta manera, la licenciada recomendó generar un balance en la “rutina de descanso” para disminuir los niveles de estrés. A su vez, se cuida la salud física y mental.
Asimismo, remarcó: “para dormir bien es importante seguir buenos hábitos: Fijar horario estable para descansar, procurar espacio cómodo, mantenerse activo, hacer ejercicio con regularidad, ya que favorece el descanso, entre otros. Debemos buscar un deporte adaptado a nuestras condiciones y a nuestras necesidades”.
Por último, insistió en que la actividad física es el “resultado esencial para un cerebro sano”. Además de ser una herramienta “para prevenir enfermedades de la salud mental, como: ansiedad, depresión, insomnio, estrés, entre otros”.
Por su parte, Brendon Stubbs, un investigador vinculado en temas del ejercicio y la mente, expresó que se conocía la importancia de la actividad física para la salud mental. Sin embargo, no estaba claro el impacto que genera en el descanso, pero “gracias a la contribución de miles de personas” se logró determinar el tiempo de ejercicio que se necesita para producir un impacto positivo en la mente.
En la misma línea, Stubbs remarcó que por medio de este estudio se puede ver como el bienestar de las personas “se recupera muy rápidamente”. Luego de atravesar un período de descanso y regresar al ejercicio regular, otra vez.