En la tarde del lunes 2 de mayo, el Gobierno nacional lanzó el proyecto de ley Cuidar en Igualdad. De aprobarse en el Congreso, el mismo crearía el Sistema Nacional de Cuidados. También ampliaría las licencias de maternidad y paternidad, que pasarían a llamarse “de personas gestantes y no gestantes”.
El anuncio estuvo a cargo del presidente Alberto Fernández y la ministra de Mujeres, Género y Diversidad, Elizabeth Gomez Alcorta. Les acompañaron el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; el ministro de Trabajo y Previsión Social, Claudio Moroni, y la titular del Programa de Atención Médica Integral (PAMI), Luana Volnovich.
En las afueras de la Casa Rosada, el presidente de les argentines afirmó: “Esta ley es para que esto se vuelva un derecho permanente en Argentina, gobierne quien gobierne sea respetado”. Y agregó: “Estoy seguro de que el colectivo de mujeres que revolucionó el país no va a dejar que se modifiquen las leyes para retroceder”.
Cuidar en Igualdad: equidad entre personas gestantes y no gestantes
La ley intenta marcar una equidad entre personas gestantes y no gestantes. En términos binarios, cómo se reglamenta en la actualidad, busca ampliar la licencia por maternidad pero sobre todo la de paternidad.
Argentina es uno de los países de América Latina con más retraso al respecto, ya que los varones solo pueden tomarse dos días al nacer sus hijes. Esta realidad se debatió cuando Alberto Fernández se convirtió en padre, pero aún así trabajaba desde el hospital.
Además, el proyecto refleja la situación de muchas familias diversas. Por eso habla de personas gestantes y no gestantes, así como de casos de adopción y reproducción asistida. E incluye licencias por situaciones que puedan surgir en el momento del parto (por ejemplo, prematuridad). Ahora queda ver lo que pasa en el Congreso.
¿Cómo serán las nuevas licencias?
Las personas gestantes contarían de 90 a 126 días para no asistir a su trabajo. Por su parte, las no gestantes ampliarían su período de dos a 15 días.
Todavía es una cantidad muy diferente, aunque la intención del proyecto es que crezca de forma gradual. Luego de dos años se extendería a 30, después de cuatro a 45, al cumplir los seis a 60 días y, a los ocho años de vigencia de la ley, a 90. Hasta que eso suceda, serán las personas gestantes las que carguen con la mayor parte de las tareas de cuidado.
Por su parte, la ley busca crear licencias para futures adoptantes, de dos a doce días al año. Cuando la adopción se efectúa, el período de eximición sería de 90 días (se iguala al de las personas gestantes), para les dos responsables parentales.
También se integra una realidad que se extiende en el país, la de la reproducción mecánicamente asistida. De aprobarse, la nueva legislación crearía una licencia de 2 a 6 días para cuidar o acompañar a la pareja que se somete a las técnicas.
El proyecto intenta extender las licencias para hijes con discapacidad o enfermedades crónicas (180 días). Asimismo, ante nacimientos o adopciones múltiples o nacimientos prematuros (se suman 30 días por cada ocasión).
Cuidar en Igualdad: ¿y les trabajadores informales?
Para quienes no trabajan en relación de dependencia, o lo hacen de manera informal, también hubo anuncios. El proyecto de ley intenta crear una asignación para monotributistas, monotributistas sociales y autónomes. Consistiría en el pago mensual de un salario mínimo, vital y móvil para personas gestantes, no gestantes y adoptantes.
Lo mismo se establece para personal de casas particulares, personal temporal de trabajo agrario y para toda la Administración Pública Nacional.
Por último, establece la obligatoriedad del cumplimiento de las licencias. Esa condición ayudará a la repartición equitativa de las tareas de cuidado, entre personas gestantes y no gestantes.
Se puede predecir una crítica de los partidos políticos que desean una economía más liberal a este proyecto. ¿Serán les empleadores quienes financien estas licencias y pagos? No, estarían a cargo de la seguridad social.
¿El reflejo del continente?
Argentina es uno de los países con más atraso en la región en cuanto a las actuales licencias por paternidad. Junto con naciones como Bolivia y Bélice, los nuevos padres solo pueden tomarse dos días luego del nacimiento de su hije.
Otras tienen un margen un poco mayor, pero no mucho. Los vecinos Chile y Brasil cuentan con licencia de paternidad de cinco días, (aunque en el gigante sudamericano se puede extender hasta 20).
Más al norte, en México también se otorgan cinco días. Colombia es un país adelantado en la materia, porque brinda dos semanas de eximición de trabajo a quienes se convierten en padres.
¿Y las licencias por maternidad? Parece que también Argentina está para atrás. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) recomienda como mínimo una licencia por maternidad de al menos 98 días. Pero sugirió que se extiendan a por los menos 126 días y que se prolonguen en los casos de nacimientos múltiples.
United Nations International Children’s Emergency Fund (Unicef) realizó un relevamiento junto al Centro Internacional de Políticas para el Crecimiento Inclusivo. Determinó que Chile; Colombia; Cuba; Paraguay y Venezuela fijan licencias por maternidad de 18 semanas y/o más.
En tanto, Belice; Brasil; Costa Rica; El Salvador; México; Panamá; Perú; República Dominicana; Surinam y Uruguay tienen licencias de 14 semanas y/o más.
Argentina se encuentra dentro del grupo de países con licencias por maternidad de menos de 14 semanas. Lo acompañan Bolivia; Ecuador; Guatemala; Guyana; Haití; Honduras; Jamaica y Nicaragua.
Por eso este proyecto de ley contempla una realidad con retraso, que debe actualizarse con rapidez. Para lograr la igualdad de derechos, son necesarias leyes que contemplen y protejan a les ciudadanes en los diferentes momentos de su vida.